Capitulo 1

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AMOR DE ESCRITORIO

Al llegar a la oficina veo la hora, uf! Es temprano son las 8:30 de la mañana y todavía nadie ha llegado de la oficina, al ser una mujer muy metódica me siento y me pongo a ordenar mi escritorio, no está desordenado, pero ya es costumbre.

Mi nombre es María, tengo 35 años trabajo en una empresa de marketing y publicidad en la paz, y todos los días hago lo mismo, me despierto, me doy una ducha, sirvo desayuno para mí, mi esposo y mis hijos, los despacho al colegio y me subo con mi marido a el trabajo, llegamos todos a almorzar (por qué son horas sagradas) nos cobramos como nos fue en la mañana, me doy tiempo para revisar si tienen tarea, por qué que sean niños de 14 y de 11 años, siempre hay que revisar, luego nos encerramos con mi esposo, Lucas, en el baño, para que me dé, como el diría, mi dosis, que es 5 minutos, nos alistamos y salimos al trabajo, nos encontramos a las 6:30 para bajarnos a la casa, llegamos, cenamos y de ahí vuelvo a revisar que hicieron mis hijos y nos acostamos para dormir, hay noches que lo hacemos, otras veces que no, y al día siguiente es lo mismo, durante 15 años fue lo mismo y creo que será toda mi vida así.

........
-Perdón María te encuentras bien???

Escucho una voz familiar, es Carlos mi compañero de trabajo, un hombre de 30 años, tez blanca, con unos ojos negros, gran amigo, si no fuera casada diría que nos traemos ganas desde hace tiempo, pero nunca hemos dicho nada, solo nos insinuamos todo, pero nos quedamos callados al momento de la verdad.

María

-si, todo bien, creo que anoche no pude dormir bien.

Carlos

- será qué soñaste conmigo? (Me dice, mientras empieza a acercarse)

María

- depende de qué tipo de sueño. (le digo en tono de burla), entenderás que hablo dormida así que sería medio comprometedor (suelto una risa en tono de burla)

Carlos

-y por qué no hacemos tus sueños realidad? ( Se hacerca mientras veo que tengo su cara al frente de la mía).

María

-por que son las 8:30 y las cosas que quiero que me hagas serían indecentes en el trabajo (estamos tan cerca que puedo rozar con mis labios, sus labios, mero me alejo abruptamente y sigo) además estamos en horario de protección al menor y el jefe podría llegar ( los dos soltamos una risa cómplice, y veo un bulto en su pantalón que es casi perturbante).

Carlos

-creo que si seguimos así me voy a tener que lanzar una cubeta de agua helada (me dice casi riendo)

María

- mejor corre al baño y arreglate eso (señaló al bulto de su pantalón) que muchas se pueden estar antojando (suelto una risa).

Se me hacerca a la altura de mi oído y me dice en susurros:

Carlos

- no me acompañas al baño y me lo arreglas tu, pero con la boca ( me quedo paralizada y hasta un poco tentada)

Trato de concentrarme y aclaró la garganta, a un que me siento un poco tentada.

Carlos

- buenos hermosa nos vemos más rato me voy a mi oficina a tomar agüita, si quieres puedes vení (me guiña un ojo y se va mientras yo siento que los calores suben a tono carmesi)

María

-esta bien lo tomare en cuenta (le mando un beso, mientras me levanto para ir al baño)

Al llegar al baño me mojo mi cara y me doy cuenta que estoy roja, no sé si es por bochorno o un nosequé, pero nunca habíamos llegado a tanto, durante 3 años nos habíamos molestado con carlos, pero no de forma tan directa........

cuentos cortos de infidelidad, para señoras casadas.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora