Capítulo 16

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Había un hombre de espalda mirando unos cuadros, me acerqué a mi escritorio y se dio vuelta lentamente. Mis manos sudaban, pero sentí un gran alivió al darme cuenta que no era él.

-Buen día señorita- dice un hombre de al menos 30 años.

-Hola- suspire- Perdón por la tardanza, tomé asiento porfavor-.

(...)

Dos dias han pasado desde que Noel y yo no nos hablamos, él intenta disculparse pero yo lo ignoró, aunque lo extraño un montón, ya no se ni porque me enojé tanto.

Al parecer hoy llovera, eran aproximadamente las 7 de la tarde y esta todo el cielo nublado, Noel salió a ver unos asuntos junto a Ganda, ya debería llegar, fui a cerrar las ventanas, mientras preparaba cafe. Comenzaron a caer las primeras gotas y al rato se intensificó. Las horas pasaban y Noel no llegaba.

El timbre sonó y fui abrir la puerta, estaba Noel empapado, tenía su nariz roja y un mal aspecto, entró y su ropa mojaba el piso.

-Noel- digo preocupada- Vamos voy a prepararte un baño caliente y ropa limpia- digo tomando su  mano llevandolo arriba.

Estaba callado y tranquilo, prepare todo y él se dio un baño, bajé a terminar de preparar algo para nosotros. A los minutos él bajo ya vestido, pero aun asi tenía cara de enfermo.

-¿Quieres cafe?- digo mirándolo.

Se acercó a mi y me tomó de la cintura.

-Te quiero a ti- dice y me besa.

Le correspondi abrazandolo, y terminó escondiendo su cabeza en mi cuello.

-No debi hablarte ni comportarme de esa forma contigo princesa- dice y lo miré.

-Ni yo hacer tanto escándalo- digo mirándolo- Ahora toma una pastilla para que no te enfermes- digo y me sonríe.

-Realmente no se que hice para merecerte-.

-Tampoco yo a ti- bese su mejilla y fui a buscarle una pastilla.

-Mi peliona- dice y reí levemente.

-Debes parar de hacerme enojar- digo bebiendo mi cafe.

-Me gusta verte enojada, sobre todo cuando sacaste a patadas a la rubia- dice riendo.

-Se lo busco- le digo- Nadie puede decir que estas bueno, exepto yo- digo cruzandome de brazos.

-Tu estas buena- dice abrazandome y agarrando mi trasero.

-Exacto- digo mirándolo.

Se escucho un trueno y me asuste, lo abraze y me acarició la espalda.

-Hora de dormir- dice.

Me tomo en brazos y subio la escalera conmigo, me acerque mas a él y encondi mi cabeza en su cuello. Llegamos a nuestro dormitorio, nos desvestimos y nos acurrucamos juntos.

...

El frío me despertó, me fijé y Noel no estaba, era temprano, muy temprano, aún llovía, me paré y salí.

-Noel- digo y no contesto.

Caminé por el pasillo y senti ruidos en una de las habitaciones, enseguida salió él, traía unas cosas para ocupar cuando salieramos.

Levantó la vista y se fijó en mi, soltó las cosas y me miró embobado, me fijé y traía solo mis bragas de encaje y mi sosten, recorde que el día anterior no ocupe pijama. Lo observé de la misma forma, el solo traia sus boxers rojos.

-Habia olvidado esto- digo caminando a él, me agachó justo en frente y cerca de su entrepierna, tomando las cosas que tenía.

-Nena ¿Podrías pararte?- dice mirándome desde arriba, desde ahi tenía una buena vista de mis pechos apretados gracias al sujetador.

-¿Porqué?- digo inocente.

-Tu sabes porque- dice y sonreí.

Me paré lentamente y lo miré. Lo bese y su mano se posó en mi espalda y la otra en mi cadera, subió lentamente hasta desabrochar mi brasier, lo sacó y lo tiró. Me apego a él y me levantó, enrolle mis piernas en su cadera y me estampó contra la pared. Su miembro chocó con mi entrepierna, jadie, beso mis pechos y los chupo, tiré de su pelo.

-Noel- gemi cuando los mordió, lo atraje mas a mi, estaba duro.

Me bajé y lo tire a la pared, metí mi mano dentro y apreté su miembro, soltó un gemido, estaba sensible, mordi mi labio.

-¿Qué pasa mi amor?- le ronroneo.

-No me hables asi- cierra los ojos y apreta los dientes.

Pasó mi lengua cerca de sus labios y bajé a su cadera y observó su gran bulto.

-Lía- gruñe.

Lo estimule y lo meti lentamente a mi boca, saboriandolo, lo saque y lo mire, estaba mirandome concentrado, lo meti de golpe y succione, soltó un gemido agarrando mi pelo, tratando de sacarme de ahí, golpeó su mano y lo metí completo, se estremeció y jadio.

-Lía basta- gemia y cerraba sus ojos.

Pase la lengua de arriba abajo, y chupe la punta, tomó mi cabeza y se metió mas en mi, sonreí y jadie sorprendida con mi lengua lo enrolle adentró, tiró de mi cabello y se arqueaba.

-Mas vale que termines esto- dice ronco mirándome aflijido.

Agarré sus testiculos y los acaricie mientras seguía metiendo y sacándolo, mordi levemente y lo sentí temblar, sonreí, succione con mas ganas y sentí su primer chorro en mi garganta, hasta que soltó un gruñido llenandome la boca con su semen.

Tragué todo y me saborie mirándolo, me puse de pie y estaba mirandome necesitado.

-¿Algo más?- digo pasando mi lengua por mis labios.

Lo vi reaccionar y me toma las piernas y las pongo en su cadera nuevamente, nos rozamos y gemimos. Volvio a recuperarse.

-Ahora si te ganaste una buena- dice y  mordi mi labio-.

Abrí mis piernas y pone su miembro y empuja, gemi y cerré los ojos, estaba tan duro y grande, lo acerqué y nos besamos, comenzó a meterse y salirse lento de mi.

-Me las vas a pagar- dice sonriendo.

Trate de presionar su miembro mientras lo tenía adentró, jadie y apretó los dientes. Se sintió fantástico.

-¿Joder cómo hiciste eso?- dice jadiando volviendome a penetrar

-No me subestimes- digo.

Nos besamos y seguimos con nuestro roze, trate de concentrarme y no gemir tan alto, no queria darle en el gusto, Noel me apegaba a él, lo hacía tan profundo, mordi su hombro y gruño. Sentía mi cuerpo adolorido por el choque con la pared, pero me encantaba, ya no aguantaba, él se dio cuenta y lo hizo mas rápido, besó mi cuello y aspiraba mi aroma, volví a gemir y no podía más.

-Noel- digo y sonó como un gemido- Mas fuerte- digo agarrandome de su cuello.

-Oh- jadio- me estás apretando- con los ojos cerrados.

Senti mi cuerpo colapsar y cerré los ojo, me corri desesperadamente gimiendo y senti el impacto de su escencia muy dentro de mi, seguido de un gruñido que calle a besos, me apretó a él y nos separamos. Repirabamos agitados, salió de mi lentamente y apretó los dientes.

Me puse de pie y me afirme, me dolían las piernas, él sonrió al darse cuenta.

-Te dije que no me provocaras- dice.

-Idiota- le digo.

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Uff😥

















Ella *Noriel*Donde viven las historias. Descúbrelo ahora