Primer Acto

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Y entonces te vi,
Sentada en un rincón
Creyendo que eras invisible
Siendo mi secreta pasión.

No esperes que te ignore
Si cada sonrisa que me diste
Encendió en mi alma
El más potente de los amores.

Y cada cosa que hago es para ti
Cada rosa cortada
Y cada espina clavada
Vale la pena para mí.

Thomas

Poesía Para Todos Y TodasDonde viven las historias. Descúbrelo ahora