Hoy viernes fue el día que me arme de valor, pude dominar mi nerviosismo y logre acercarme a ti. Trate de no desviar la mirada de tus ojos y como pude logre invitarte a salir, no te dije a donde te llevaría ya que sería una sorpresa.
De lo que pronuncié no sabía que era lo que te pareció gracioso, pero todo cobro sentido al oír aquellas palabras que salieron de tu boca e incluso aún puedo oír como retumban en mi mente:
—¿Acaso eres tarado o qué? Ni loca dejaría que me vean con una persona fea como tú.
Aún puedo sentir el dolor en mi pecho, cuando me dijiste aquello, como pude recogí los pedazos de mi corazón y me marché del lugar dejándote atrás con tus sonoras carcajadas.
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Diario De Un Chico Feo
Historia CortaEl amor lo puede todo. Pero no debes obligarlo a florecer, y más con una persona que se preocupa por cosas que en verdad no tienen importancia *** Queda prohibida la reproducción y adaptación parcial o total de esta historia, por lo cual no se pued...