Herido de muerte

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Trey caminaba con dolor por un callejón sucio y humedo en el Distrito 14, había perdido a su novia en un tiroteo minutos antes mientras un sujeto destrozaba todo lo que se atravesaba en su camino, no podía olvidar su aspecto, un reluciente y oscuro casco cibernetico que cubría toda su cabeza, vestía un traje negro con cintas semejantes a una red de circuitos luminiscentes, pero su sable era lo peor, de un solo tajo vio como partía a la mitad un vehículo antiasaltos, nadie habia sobrevivido.

Mientras el dolor se hacia mas intenso sentía como la sangre abandonaba su cuerpo, pensó en la muerte y palpo la herida con su mano izquierda.

- Pensé que la sangre era tibia - Dijo Trey en voz baja y lastimera, con dolor bajo la mirada hacia su abdomen.

Su sorpresa creció cuando una sustancia azul metalizada salía de su herida mezclándose con la sangre, sus piernas temblaron doblandose del miedo.

- Esto no es mío, no soy yo -Se repetía una y otra vez el joven Trey mientras se sentaba entre un montón de deshechos ciberneticos.

Pocos minutos pasaron para quedar inconsciente, mientras las ratas corrían en diferentes direcciones y la lluvia fría de la noche comenzaba a caer una mano toca el rostro de Trey, la chica de cabello negro y largo observa con curiosidad mientras de una mochila saca un artefacto parecido a un lápiz.

- Esto va a doler un poco -Susurra ella con delicadeza mientras introduce aquel dispositivo en el cuello de Trey.

El joven hace una mueca de dolor y sus ojos se abren mirando a todos lados como si buscará encontrar una salida inexistente.

- Quien eres tú ¿que me diste? - Dice Trey asustado.

- Me llamo Angela Kirchner, te vi cuando toda la gente corría, un disparo te alcanzó, pero sabía que no ibas a morir cuando vi esa sustancia azul saliendo de tu herida, tu sistema orgánico esta conectado con un exoesqueleto cibernetico, no eres totalmente humano.

- Pero ¿cuando paso esto? yo soy humano... no soy una maldita maquina.

- Calmate, llevo muchos años rastreando a personas como tú, tenia sospechas sobre quien eras, pero hasta hoy pude comprobarlo.

- Gracias por la ayuda pero debo irme -Trey intenta ponerse de pie pero el dolor se lo impide.

- Dejame ayudarte y si quieres podemos averiguar que te sucedió - Dice Angela mientras ayuda a Trey a incorporarse.

Los dos caminan lentamente por el callejón hasta una camioneta estacionada a la distancia. los destrozos de una batalla se ven por todos lados, algunas cintas de la policía acordonan ciertas áreas; todo parece una locura.

Llegada la noche la camioneta de Angela se estaciona frente a una bodega en las afueras de la ciudad, adentro un enorme laboratorio oculto contrasta con un lugar lleno de polvo y telarañas, del suelo se abren un sin fin de cables y aparatos de alta tecnología, relucientes y blancos como si apenas hubiesen salido de su empaque.

- Siéntate Trey - Le dice Angela mientras un sillón con decenas de conexiones se arma automáticamente desde el piso polvoriento.

- ¿Que es eso? -Pregunta él haciendo un esfuerzo por mantenerse en pie. -Olvidalo... necesito sentarme y no creo tener mas opciones.

- Exacto, eso se llama "Sinapsik B" es un prototipo de un reparador de enlaces neuronales.

- No te entiendo -Dice Trey haciendo un gesto de dolor. -Pero si esa cosa... va aliviar este dolor que me esta matando... adelante.

Angela teclea en una pantalla y las conexiones comienzan a insertarse en las terminaciones nerviosas de la cabeza de Trey.

- Ahora vamos a conocer tus recuerdos mas traumaticos -Angela presiona la tecla "conect" y todo comienza a tomar forma.

Sangre SintéticaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora