Quien lo iba decir que me iba a casar con mi jefe, solo acepte porque me hizo la 13 14 retándome y al final acabe locamente enamorad a de él y el de mi claro.
Me desperté con el sonido de los pájaros cantar y el sol alumbrando mi cara, mentira me desperté con los horribles ruidos de los dos despertadores, lentamente fui abriendo los ojos encontrándome con una Karol media dormida,rápidamente me levante rápidamente para apagar esos aparatos del demonio, me dirijo a mi habitación busco ropa interior y me meto dentro de la ducha me tome una ducha rápida. Salí en busca de ropa que ponerme después de un buen rato mirando me decidí por un pantalón de traje color crema un camisa manga corta y una chaqueta de traje del mismo color que los pantalones de accesorios me puse unos pendientes dorados con una perla en el medio blanca, el bolso y los tacones d color negro, des de siempre me han agradado los colores oscuros y no se el porque, bueno si lo se pero ahora no es momento de dar pena .
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Salgo de la habitación ya vestida y me encuentro a una Karol envuelta en toallas, mierda se me había olvidado de que no tenia ropa así que la llame.
-Karol ven que te enseño el armario para que te vistas.
-No pasa nada me pondré lo mismo que ayer.
-Eso si que no, si tengo ropa de sobras y créeme cuando digo de sobras, así que andando.- Ella simplemente asiente con la cabeza y me sigue hacia mi habitación.
-Todo tuyo ponte lo que quieras, yo voy a preparar unos cafés ¿quieres?.
-Sino no es mucho pedir.- Dice ella algo avergonzada.
-Tienes que saber que para mí eres como una hermana Karol, te conozco des de ayer pero es como si te conociera de toda la vida, así que por favor no te comportes conmigo como si fuera una autentica desconocida para ti.-Ella se abalanza contra mi en un cálido abrazo, como echaba de menos un abrazo hacia tanto tiempo que no me daban uno, hecho de menos a mis hermanos.
Me dirijo la cocina con una sonrisa en mi rostro y preparo los cafés y dos sándwiches, de repente aparece una Karol igual vestida que yo pero en vez de pantalón lleva vestido, le queda espectacular, le sonrió y le digo.
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- Créeme que si fuera hombre no te dejaba salir hasta darte duro contra el muro.- Ella se sonroja y empieza a reír murmurando un gracias por todo.
