Vamos por más

Parte 2

Holis, es un gusto que verlos de nuevo ewe

$el que estén aquí significa que les gusto y eso nos hace muy felices :3

Tendría que poner la advertencia de que este capitulo posee contenido sexual, violencia y depresion (mi depresion en especial)

$somos algo sensibles cuando trata de niños u.u

Eso es todo amigos y recuerden:

Kuroshitsuji tiene su debida dueña (el cual nos a hecho sufrir bastante)

Las imágenes no me pertenecen.

Esta lleno de flash-back que es lo más importante.

Y el fic pertenece a la serie: "Hermanos o eso creo"

Chaito.

Pensamiento o recuerdo: hola (cursiva)

Llamadas o audios: hola (negrita)

Carta o nota: hola (subrayada)    

----Comiencen----

--Dudo que alguna vez lo hayas sido-- suspiro con pesades. Un recuerdo fugaz llego de algo que deseaba olvidar.

/Flash-back/

Durante una noche, Ciel se extraño de encontrarse solo en su habitación. La cual compartía con su hermano de 13 años, debido a la vida media alta que su familia llevaba. Cosa que no le molestaba, excepto las noche en las que recibía las visitas de su padrastro. Ambos los odiaban. Pero como infantes no podían hacer nada y menos si su madre se volvía sorda y ciega para mantener el estilo que tanto le gustaba. Dos personas que no se parecían en nada a Rachel y Vincen Phantomhive, los últimos de su linaje sanguíneo. Soltó el aire caliente de sus pulmones. Preocupado de que Astre se encontrara atrapado en algún lugar de la casa siendo dañado. 

Sin más preámbulos se levanto de la enorme cama saliendo por el pasillo. Camino hasta el cuarto donde un sonido inusual llamo su atención.

--A... ayu... da... ay... ayu...-- se repetía en la oscuridad de la elegante pieza de sus padres.

--¿Mamá?-- pudo reconocer la voz de su progenitora. Guiado solo por la luz de la lampara, tratara de encontrarla --¿mamá?-- apenas termino la frase la hallo.

--Ciel...-- la mujer que le dio esa condenada vida, la cual tuvieron que soportar por más de cinco años, se encontraba a un lado de la cama desangrándose --Ciel, mata... lo...-- fueron sus ultimas palabras ante de morir.

Todavía pasmado por la escena, solo pudo llorar en silencio. Asustado del asesinato. Su mente infantil culpa al hombre que tanto daño les había hecho. Miro la garganta de cabello azulado, encontrándose una daga incrustada. La encargada de acabar con su vida. Con asco y dolor lo retiro de su carne, para de manera apresurada salir de allí. Debía encontrar a su hermano.

Rápido y en silencio, bajo las escalera donde un nuevo sonido lo alcanzo. Provenía de la cocina. La escasa luz de alguna olvidada lampara le hizo saber que alguien se encontraba en el lugar. Aun con la respiración agitada y aterrada fue capaz de presencia semejante acto que hasta ese día le lleno la garganta de bilis. En el suelo se encontraba ese hombre cuyo nombre ya no recuerdo. Rodeado de un charco de su propia sangre. Muerto para ser más especifico. Y como no lo estaría si su hermanito, aquel que siempre debió proteger por su enfermizas debilidades, se auto penetraba con el pene del cadáver. Por lo que podía ver la razón de su descenso fueron diversas apuñaladas en el pecho.