Danger's Back (Niall Horan)

31. "What the fu*ck do you mean she's not picking up?"

“¿Que quieres decir con que ella no coge el teléfono?”


_____’s Point of View:

“West End, Vancouver.” Niall dijo abiertamente mientras el entraba al living sosteniendo una carpeta. Tirándola en la mesa de café, el se sentó en la silla de al lado.

Yo estaba actualmente sentada en la parte superior de las escaleras, escuchando su conversación. Desde nuestra noche juntos, hace cuatro días, Niall se habría abierto a mi mas, dejándome entrar en vez de alejarme, pero eso no evitó que el me contara todo el negocio.

El seguía yendo a reuniones y salía sin derramar una palabra sobre lo que estaba pasando y lo que ellos habían planeado. Cuando le pregunté a Carly si ella sabía algo, ella había dicho que John no había hablando una palabra tampoco, así que yo avancé hacia la próxima cosa posible que pudiera pensar, para conseguir mis respuestas--escuchar a escondidas.

“¿Qué?” Bruce preguntó, confundido mientras el se inclinaba, agarrando el archivo en sus manos. Abriéndolo de un tirón, el empezó a hojear a través de los papeles.

“Ahí es donde Lyndon va a hacer su próximo movimiento.”

“¿Como lo sabes?” Marcus caminó hacia allí con Marco y John mientras ellos se sentaban en el sofá tratando de captar vistazos del dossier.

“Johnny Prince me llamó por teléfono esta mañana; me dijo que el y sus hombres estaban manteniendo vigilancia en algo sospechoso teniendo lugar alrededor de Canada para nosotros, cuando el se encontró un archivo vinculado a alguien de New York. Aparentemente Lyndon esta haciendo un trabajo con Stevie Adams de aquí. Sus hombres fueron vistos reuniéndose en Woodstock. De acuerdo con las fuentes, Lyndon los subsanó y ahora el tiene unos cuantos en su lista de nombres.”

Bruce negó con su cabeza, sin ser capaz de creer a sus oídos. “Eso es ridículo. Desde cuando Stevie trabajaba con un extraño? El ha estado haciendo negocios aquí en Stratford, durante años.”

“No se, pero Johnny tiene pruebas verdaderas en esa carpeta; fotos, recibos y todo. Lyndon ha estado planeando esto engañosamente durante mucho mas tiempo de que esperábamos. Prince rastreó sus llamadas recientes una por una y encontró que ellos han estado en contacto mas o menos durante cinco meses ahora.”

“Hijo de pu*ta,” Bruce murmuró en voz baja mientras el tiraba la carpeta abierta contra la mesa. “Ese ca*bron ha estado planeado su forma de atacar antes de que el ni siquiera llegara aquí.”

“Eso no es todo.” Los ojos de Niall brillaron con odio oculto, lo negro de sus soles tomaban lugar, sus pupilas se dilataban ante las palabras no dichas que nublaban el aire.

Bruce miró hacia arriba con preocupado interés, “¿Que hay mas?”

“Stevie no es el único que esta trabajando para Lyndon.” Haciendo una pausa, Niall lamió sus labios, una disgustada sonrisa tomaba lugar. “Aparentemente James también lo esta.”

Con eso dicho, el aire en la habitación se espesó mientras Bruce luchaba para contener su compostura, aunque no duró mucho. Poniéndose de pie, el agarró el control remoto de la mesa, lanzándolo a través de la habitación. “Ese podrido hijo de pu*Ta!” Bruce se burló, “El estaba debajo de su protección todo este tiempo?”

Niall asintió. “El nos engañó a todos. Nos hizo creer que el no había planeado nada para hacer con nuestro cargamento cuando en realidad el ayudó a Lyndon a plantar las bombas todo el tiempo.”

“Pu*to infierno,” John murmuró mientras el sacudía su cabeza, tratando de envolver su cabeza alrededor de esta nueva información encontrada. “Y le llevamos a él con nosotros esa noche, le dejamos entrar en todo.”

“Lyndon sabía que estábamos yendo esa noche con las intenciones de matar, porque James le avisó. Esa puerca escoria tenía sus manos en nuestros hombres y nosotros no teníamos ni pu*ta idea.” Arrojando su cabeza hacia atrás en frustración, Bruce frotó su cara vigorosamente antes de volverse hacia Niall. “¿Quien mas?”

Encogiéndose de hombros, Niall frotó sus palmas contra sus muslos, “Nadia mas en lo que a mi concierne, pero eso no significa una mier*da. Claramente nosotros no podemos confiar en nadie en nuestro grupo; tenemos que mantener un ojo en todos.”

“¿Como demonios se supone que debemos hacer eso? Apenas puedo estar al tanto de los guardaespaldas que pagamos para que asistan a las chicas; no puedo enviar a otros diez para vigilar que demonios están haciendo nuestros hombres!”

“Entonces todos nosotros vamos a tener que tomar turnos para vigilar el resto de nuestras comunicaciones. Tenemos un trabajo residente con los Murrays, cinco de los grandes.”

Marco contuvo el aliento silbado entre sus dientes con temor. “Maldita sea.”

“Lo se,” Niall reconoció, mirando alrededor de la habitación a todos los chicos. “Ya fui allí para asegurarme que todo el mundo estaba bien. Hasta ahora todo bien, puse a Prince en guardia cuando me marché. El dijo que sería capaz de vigilarlos esta noche pero el tendría que irse mañana.”

“Esta bien, le llamaré esta noche para discutirlo.” Limpiando sus labios con su mano, Bruce exhaló profundamente, “Ahora, ¿Que vamos a hacer con James?”

“Lo matamos.” Marcus se encogió de hombros como si fuera la cosa mas obvia del mundo.

“No, no ahora al menos,” Bruce caminó por la habitación. “Si lo hacemos, Lyndon sabrá que vamos detrás de él. Tenemos que hacerle creer que todavía estamos en la oscuridad, pero, podemos joder un poco. Hacer a James sentirse cómodo como si el no tuviera nada que perder.”

“¿Que tienes en mente que hagamos?”

“Creamos un par de envíos falsos; le hacemos pensar que confiamos en el completamente. El tendrá su tiempo de gloria y orgullo, pensando que el lo tiene todo hecho y entonces es cuando le golpeamos duro. En la recta final, le diremos a él que es lo mas importante para nosotros lo que debería hacer que el lleve adelante a los hombres de Lyndon. Cuando el lo haga, es cuando le tenderemos una emboscada.” Bruce entonces miró a Niall, “Y tu harás los honores de matarlos.”

Niall sonrió ante la idea. “Perfecto.”

“¿Alguna objeción?” Bruce tomó un vistazo alrededor de la sala esperando ver si alguien no se sentía cómodo con el plan. Era algo que el hacía a menudo para asegurarse de que todo iba como la seda y no había cuestiones. “Esta bien,” El chocó sus manos, “Entonces esta decidido.”

“¿Cuando empezamos?”

“Tan pronto como sea posible, pero primero, tenemos que preocuparnos de esta noche. James es un problema que será tratado pero necesito el dinero que Lyndon robó desde justo debajo de nuestras narices, de vuelta. Si Prince tiene razón entonces Lyndon debería de estar en Bay Street en el puerto a las doce de la medianoche donde vamos a tomar control de su entrega.”

“¿No vamos a destruirlo?” Marcus preguntó, sorprendido.

“No vamos a devolverle el golpe con las mismas acciones, vamos a crear las nuestras. Lyndon es repetitivo; el va a sospechar que haremos algo similar, por eso haremos exactamente lo contrario. Vamos a tomarlo todo para nosotros mismos. Vinny esta todavía esperando su transporte y fue lo suficientemente amable de esperar uno nuevo. Esto no debe ser por lo que el pagó, pero seguro como el infierno lo hará lo suficientemente bien.”

“Entonces, es esta noche,” Niall se puso de pie, estirando sus extremidades. “¿Hemos terminado aquí por ahora?”

“Si, pero espero que tu estés aquí abajo, preparado para ir a las once. No mas tarde que eso o nos iremos sin ti.”

Niall rodó sus ojos. “Vale, papa,” El arrastró en sarcasmo mientras el caminaba fuera de la habitación y empezaba a subir las escaleras.

Saltando de mi lugar en la parte superior, apresuré mis pasos hacia la habitación donde me tiré a mi misma en la cama, tratando de parecer como si hubiera estado durmiendo todo este tiempo.

“Se que estas despierta.” Niall se rió entre dientes mientras el entraba dentro de la habitación, la diversión bailaba en sus ojos, “Te vi sentada en la parte superior de las escaleras.”

“¿Que?” Jadeé, asomándome por debajo de la manta.” No hice tal cosa; no tengo idea de lo que estas hablando.” Fingí inocencia, haciéndome la tonta.

“No me mientras, te escuché prácticamente correr como si la vida te fuera en ello el segundo en que me viste venir.” Sentándose en el borde de la cama, el sacudió su cabeza hacia mi. “Tu nunca escuchas, ¿no? ¿Cuantas veces te tengo que decir que no escuches a escondidas en mis negocios?”

“Lo se, lo se,” Chillé nerviosamente, “Yo solo-- odio estar al margen de las cosas y preocuparme sobre lo que va a pasar.” Mirando hacia abajo a mis manos, evité su mirada a propósito, sintiendo el calor subir en mis mejillas y cuello.

Ahuecando mi mejilla en sus palmas, Niall rozó sobre la sensible piel ardiente con su pulgar, “¿Vas a hacer algo esta noche?”

Arqueé mis cejas, dándole una mirada de incredulidad. “Estoy encerrada las veinticuatro horas del día los siete días de la semana. Apenas puedo ir al baño por mi misma. Realmente piensas que tengo planes para esta noche?”

Sonriendo, Niall rió entre dientes, “Touché.” Apartando el cabello de mi cara, el parecía perdido en concentración.

“¿Porque?” Pregunté, rompiendo su trance mientras mis cejas se fruncían juntas en confusión.

Ignorando mi pregunta, Niall captó mi mirada, sus dientes se juntaron entre dientes mientras el tiraba de la piel seca, “¿Que dices de venir afuera conmigo? ¿Solo los dos?”

Estrechando mis cejas, tomé un momento para procesar lo que el había dicho. “Espera, como en, como una cita?”

“No necesariamente...” El sonrió, “Pero algo así. No he pasado mucho tiempo contigo y siendo que hay mucho que esta pasando ahora mismo, pensé que te llevaría afuera un poco antes de marcharme.”

“Realmente no tienes que hacerlo Niall. Se que estas muy ocupado y--”

“Nunca estoy demasiado ocupado para mi prometida.” El respondió, inclinándose para plantar un suave beso en mi mejilla, cerca de la comisura de mi boca.

Dejando mis ojos cerrarse lentamente mientras un suave suspiro se escapaba de mis labios entreabiertos, dejé escapar un murmullo de aceptación. “Vale,” Susurré.

“¿Vale?” El sonaba esperanzado.

Riendo, asentí con mi cabeza, mirando como el se ponía de pie, sacando su mano para que yo la cogiera. Arrugando mi cara, miré hacia arriba a él en duda.

“Vamos.” El hizo un gesto detrás de le hacia la puerta con su cabeza.

“¿Ahora?” Pregunté mientras agarraba su mano, poniéndome de pie justo en frente de el.

“Si, ahora. Vamos,” Llevándome fuera de la habitación, me eché hacia atrás un poco, deteniéndole en el pasillo. “Pero, no estoy vestida!”

Mirando hacia mi vestimenta, el se encogió de hombros, “Te ves bien. Nadie va a vernos de todas formas; solo va a ser nosotros.”

“¿Estas seguro?” Suspiré, contemplando la idea de salir en público con solo mi pijama puesto, “¿Y que quieres decir con que solo vamos a estar nosotros?”

Riendo, Niall sacudió su cabeza, “No te preocupes por ello y si, estoy seguro.” Agarrando su chaqueta y la mía, el salió por la puerta principal pero en vez de ir a la calzada, el hizo su camino hacia la parte trasera.

“¿A donde vamos?” Luché para respirar debido a el frío tiempo mientras me ponía mi chaqueta.

“¿Que pasa con todas las preguntas?” Niall abrió una puerta antes de llevarme a lo que parecía un cobertizo. “No tienes nada de lo que preocuparte, relax.” Metiéndome dentro, el se detuvo en la entrada, encendiendo la luz.

Dejando ir mi mano, el caminó hacía lo que parecía ser una moto cubierta, pero me sorprendí cuando el quitó la tela para revelar una brillante Harley negra motocicleta de división que tenía llamas corriendo por los lados, HORAN estaba impreso en la placa de matrícula.

Mis ojos se abrieron completamente mientras me daba cuenta de porque el me había traído aquí. “Tienes que estar bromeándome...” Murmuré dando un paso atrás.

“Nah, nena, no lo estoy.” Niall sonrió como un niño pequeño la mañana de Navidad. “Vamos, sube.” Agarrando un casco, el lo sostuvo en mi dirección en la que rápidamente negué con mi cabeza.

“No hay manera en la que me voy a subir a esa cosa incluso si mi vida dependiera de ello.”

Levantando una ceja, Niall sonrió. “¿Estas segura de eso? ¿Sabes si quiera con quien estas hablando?”

Estrechando mis ojos, me quejé para mi misma. “No lo harías.” Me quejé, estampando mi pie contra el suelo de cemento.

Su sonrisa creció, “Lo haría.” Dando un paso hacia mi, yo grité, saltando hacia atrás, lanzando mis manos hacia arriba en frente de mi como si ello me protegiera de que Niall me agarrara y me obligara a subirme en la moto.

“Vale, vale! Me subiré.” Resoplé, cogiendo el casco de sus manos mientras lo metía en mi cabeza, haciendo click juntando la cinta bajo mi barbilla.

“Buena chica.” Lanzando su pierna por encima, el encendió el contacto, el motor retumbaba mientras la motocicleta recobraba la vida, sorprendiéndome ligeramente.

“Sube,” Haciendo un gesto detrás de él, tome una profunda respiración antes de seguir su dirección y lentamente hacer mi camino a donde el indicó.

Envolviendo mis brazos alrededor de su cintura, me aferré a las cinturillas de sus jeans, mi mejilla estaba presionaba contra su espalda.

“Ha pasado un tiempo desde la ultima vez que saqué esta cosa; todavía estoy un poco falto de práctica así que ten paciencia conmigo.”

Rodé mis ojos. “Wow, eso me hace sentir mucho mejor, gracias.” Siseé en sarcasmo, mis brazos se apretaban alrededor de su torso.

“Solo aférrate bien fuerte listilla,” El rió entre dientes, esperando hasta que hundí mi cabeza en su hombro y murmuré un vale antes de patear hacia arriba el soporte y alejarse dentro de la noche.



Media hora mas tarde, Niall dejo la motocicleta reducirse a un sordo rugido antes de poner el pie abajo.

Quitando mi casco, sentí mi estómago aletear con innumerables mariposas ante la familiar vista en frente de mi. “Richmond...” Murmuré sin respiración, volviéndome hacia Niall. “Nos trajiste...”

“A donde todo empezó,” El dijo, terminando mi pensamiento con una leve sonrisa mientras el empujaba su mano izquierda dentro del bolsillo de sus jeans, balanceándose sobre los talones de sus zapatos. “Pensé que este era el lugar perfecto para llevarte.”

Caminando hacia los árboles, Niall tomó una bocanada de aire fresco.

“Se siente como si hubiera sido solo ayer que me hubiera escapado para reunirme con Carly...” Murmuré, sintiendo mi pecho contraerse ante los recuerdos que venían inundando; el aire brumoso, las luces, los coches alrededor, bebidas, baile...

Riendo entre dientes, Niall asintió con su cabeza. “Si, recuerdo venir por aquí con solo un pensamiento que era matar a Parker pero luego te vi y sabía que este no era tu tipo de salida. Pude decir por la manera en la que tu bebiste la cerveza tan rápidamente que estabas tratando de encajar. Fue lindo... tu inocencia.”

“Ni siquiera sabía quien eras tu, para ser honesta,” Reí, sacudiendo mi cabeza ante mi propia estup*idez. “Carly me tuvo que decir después de que tu te marcharas.”

“Siempre supe que ella me odiaba,” Niall se recostó contra el tronco del árbol, los brazos estaban cruzados contra su pecho. “Ella lo hizo tan evidente. Es gracioso también porque mientras ella estaba mas probablemente advirtiéndote para que te alejaras de mi, John estaba haciendo lo mismo contigo. Es irónico ahora que pienso sobre ello, porque aquí estamos, años mas tarde, juntos y ellos dos también.”

Sonriendo, me acerqué hacia él. “Ellos trajeron mala suerte, supongo.”

Sacudiendo su cabeza, el sonrió. “Quien sabría que solo llevaría una noche...”

“Una fiesta...” Continué sin pensar.

“Y un error para traernos a todos de vuelta aquí hoy.” Mirando hacia abajo hacia mi, el se inclinó hacia delante para que su frente se presionara contra la mía. “Y todo lo que hizo falta fue que tu tropezaras en el bosque y me cogieras haciendo algo que tu probablemente no deberías de haber visto.”

“Eh, pero entonces no tendría el honor de llamarte mi prometido ahora, ¿no?” Me reí como una chica de colegio.

“Supongo que no.” Suspirando, Niall llevó su cabeza hacia atrás, sus manos palmeaban mi cintura mientras sus pulgares dibujaban círculos en mi piel. “Solo deseo que a veces no hubiera sucedido de esa forma...” Lamiendo mis labios, el contuvo su respiración. “Pero se que si no hubiera ocurrido, nunca te hubiera visto de nuevo.”

“Supongo que es por eso que dicen que las cosas pasan por una razón.”

“Si,” Mirando abajo hacia mi, Niall besó mi mejilla. “Vamos, tengo otra sorpresa para ti.”

“Oh Dios,” Reí,” ¿A donde me llevas ahora?”

Sonriendo hacia mi por encima de su hombro, Niall guiñó un ojo. “Es una sorpresa.”

Gimiendo, tiré mi cabeza hacia atrás, siguiéndole detrás de él a regañadientes. “Sabes lo mucho que odio las sorpresas, Niall.” Fruncí mi ceño.

“Relax nena, tengo la sensación de que vas a amar esto.”



“¿Me trajiste al almacén?” Pregunté en asombro una vez que nos bajamos de la motocicleta por segunda vez esta tarde. “Pero pensé que ellos habrían derribado este lugar por ahora...”

“Lo poseo, es mi propiedad. Ellos ni siquiera podrían si quisieran.” Mirando hacia abajo a mi, el asintió con la cabeza hacia la entrada. “Vamos.”

Rompiendo una sonrisa, deslicé mi mano en la suya, nuestros dedos juntos como si ellos estuvieran destinados a estar compuestos de esa forma.

Apretando nuestras palmas juntas, Niall nos condujo dentro donde el arrastró sus pies por las hojas secas y rotas en trozos del lugar, mas allá de los viejos sofás y hacia las puertas traseras. Abriéndolas, el se aferró a mi mano una vez mas antes de sacarme en la colina que habíamos visitado tantas veces antes.

“Todavía es tan hermoso como la última vez que lo vi.” Susurré, echando un vistazo del brillante escenario delante de mi. Las brillantes luches de las casas debajo de nosotros, las luces de la calle y la gente caminando por debajo que no tenían idea de que nosotros podríamos distinguir sus sombras desde aquí arriba.

“Igual que tu.” El murmuré, sus ojos vagaban a lo largo de mi cuerpo antes de descansar en mi rostro, la adoración estaban tintada en los soles de sus irises haciendo que mi corazón dejara de latir.

Sonrojándome, incliné mi cabeza para que me cabello cayera alrededor de mi cara como una cortina, avergonzada de dejarle ver el efecto que el tenía en mi a pesar de que yo estaba segura de que el ya lo sabia.

Envolviendo sus brazos alrededor de mi, Niall tiró de mi en su pecho antes de descansar su barbilla en mi hombro. “Amo cuando te sonrojas.” El susurró en mi oreja, su nariz viajaba por la longitud de mi cuello. “Y te amo a ti.”

Conteniendo mi respiración, volteé mi cabeza para que nuestros ojos se encontraran. “Yo también te amo.” Besando su nariz en vez de sus labios, reí mientras el gruñía en respuesta. Descansando mis manos en la parte superior de las suyas, me incliné en el mientras los dos vigilábamos el firmamento juntos; acogiendo la paz que nos daba a los dos estar aquí.

“Lo siento por la manera en la que te he estado tratando estos últimos días...” Niall empezó una vez que el silencio se estableció entre nosotros. “Se que he estado alejándote pero la idea de cualquier cosa pasándote por mi culpa...”

“Confío en ti.” Admití en una pequeña voz. “Confío en que tu sabes lo que estas haciendo y que vas a hacer esto paso a paso.”

Dejando escapar una profunda respiración, Niall hizo una pausa, contemplando un pensamiento. “¿Estas asustada?”

Tensándome en sus brazos, sentí mi garganta cerrarse. “No estaré aquí, mintiéndote y diciéndote que no tengo miedo porque la verdad del asunto es que lo estoy. Estoy asustada de pensar en que lo que pasará ahora es el principio. Cuando salgas por ahí esta noche, va a ser el comiendo de el final para todos nosotros. No hay vuelta atrás de nada de ello...”

“Mi principal objetivo aquí eres tu. No me importa nada mas. Los Snipers tendrán lo que merecen, ellos van a pagar por todo lo que nos han hecho, pero lo mas importante, voy a asegurarme que nadie, y quiero decir nadie se acerca a ti.”

“No puedes prestar atención a mi y luego hacer todo lo demás, Niall. Cuando te vayas esta noche, vas a tener que dejar ir el pensamiento de mi y hacer tu trabajo o de lo contrario vas a arriesgarte, poniendo en peligro no solo a ti mismo si no a todos los demás.”

“No puedo perderte.” El susurró, “No lo permitiré.”

“No lo harás,” Respondí, “Lo prometo.”

“No puedes prometerme algo como eso.” Niall negó tercamente con su cabeza, su mirada estaba centrada en otros lugares, diciéndome que su mente estaba actualmente en una nube.

“No,” Advertí severamente, “No hagas esto de nuevo. Lo que quiera que pase pasará, pero no será porque tu no hiciste algo de una cierta manera o por que tu no lo hiciste bien. No podemos controlar nuestros futuros pero podemos asegurarnos de que se mantiene en el camino correcto.”

Escondiendo su rostro en mi hombro, Niall inhaló mi aroma, relajándose. Un tranquilo silencio nos rodeaba mientras nos quedábamos de pie allí por lo que se sintieron horas, solo observando el mundo que nos rodeaba y todo que tenía que ofrecer.

“A veces...” Niall inició en voz baja, “Me quedo despierto en la noche pensando sobre como serían nuestras vidas si te hubiera dejado ir todos esos años atrás. Como las cosas serían diferentes y no tendríamos que preocuparnos por nada... pero, luego me recuerdo a mi mismo que mi vida no sería nada, porque la verdad del asunto es que no hay vida sin ti en ella.”

“Llámame loco,” Niall se rió sin aliento, “Pero,” Lamiendo sus labios, el me miró hacia abajo, sus ojos estaban clavados en mi alma mientras el sostenía mis caderas firmemente en sus manos, volviéndome para que estuviera cara a cara con el. Apartando mi cabello hacia atrás mientras ahuecaba mi mejilla, su respiración tambaleó. “Tu eres mi vida ahora.” El susurró tiernamente.

Cerniendo su mano con la mía, me incliné hacia arriba en los dedos de mis pies y antes de que ninguno de nosotros se dara cuenta de lo que estaba pasando, nuestros labios se presionaron juntos en un dulce, pecador beso; uno que había sido evitado desde que habíamos puesto un pie en Vancouver, lejos de nuestra casa en Stratford.

Gimiendo, Niall se apoderó de mi rostro, sus labios hacían todo el trabajo mientras ellos se movían perfectamente en sincronización con los míos. Cavando sus dedos en mi cabello para mantenerme en lugar, el entreabrió sus labios, saboreando mi piel mientras el hacía su camino por mi cuello.

Mordiendo mi lengua para no hacer ruido, agarré en mis pu*ños su camiseta, queriendo nada mas que hacer que este momento entre nosotros durara para siempre.

Pasando sus manos por mi figura hasta que ellas aterrizaron en mi cu*lo, Niall sonrió antes de manosearlo dentro de sus palmas y levantarme, mis piernas se envolvieron instintivamente ellas mismas alrededor de él.

Trazando la línea de su mandíbula, planté una serie de besos de mariposa en la estela de donde mi dedo había tocado antes, besándole completamente en los labios, esta vez con mas pasión que antes.

A ciegas haciendo su camino de nuevo en el almacén, Niall me aterrizó en el sofá mientras su cuerpo se cernía sobre el mío. Echándose hacia atrás para que el estuviera sentado a horcajadas de mi, Niall rasgó su camiseta de su cuerpo antes de sostenerse a sí mismo hacia arriba para que no me aplastara.

Trazando su nariz de mi mejilla hacia mi cuello, Niall besó mi garganta, sus manos vagaban por mi cuerpo mientras el levantaba mi camiseta, revelando la calidez de mi cuerpo hacia al frío aire.

Temblando por debajo de él, Niall se deslizó por la longitud de mi cuerpo antes de agarrar mis caderas y besar mi estómago. Escuchando mi respiración desfallecer y mi espalda arquearse ligeramente, Niall tomó esto como su oportunidad para continuar mientras el hacía su camino hacia arriba, negándose a dejar un centímetro de mi piel quedarse intacta.

Tirando de los extremos de su cabello duramente, Niall gruñó mientras el me miraba a mi con nada mas que amor y lujuria en sus ojos. “Me estas matando.” El siseó a través de sus dedos apretados, sus caderas se aliviaban en las mías mientras el me sostenía hacia abajo contra el sofá.

“Y que lo digas.” Susurré de forma errática, mi cabello estaban tirado debajo de mi mientras yo luchaba por recuperar mi aliento.

“No deberíamos de estar haciendo esto,” Niall sacudió su cabeza, “No así. No quiero... y tengo que dejarte.” Sentándose, Niall se levantó de encima de mi, poniendo su camiseta mientras el me entregaba la mía.

Levantándome a mi misma sobre mis codos, soplé un mechón de cabello fuera de mi cara, abriendo mi boca para decir algo cuando decidí no hacerlo, mirando como el se tumbaba a sí mismo en el sofá a mi lado.

Frunciendo el ceño, supe que algo estaba mal. Arrastrándome en su regazo, envolví mis brazos alrededor de su cuello, descansando mi barbilla en su pecho mientras le miraba hacia arriba, dándome cuenta de como de cansado el estaba realmente a pesar de que yo sabía en el fondo, que no era por la falta de sueño, si no por la presión que el estaba sintiendo. “¿Estas bien?”

“No en realidad, no.” Niall murmuró en su brazo ates de descubrir su rostro con un suspiro y mirándome hacia abajo. Pasando sus dedos a través de mi cabello, una profunda arruga tiró en el medio de sus cejas, como si el se perdiera a sí mismo en sus pensamientos.

“¿Que esta mal?”

“Odio hacer esto, tener que dejarte mientras voy a tratar con esta jodida mier*da. Todo lo que quiero es hacer el amor a mi prometida y ni siquiera puedo hacer eso porque tengo negocios de los que ocuparme.” Dejando caer su mano a mi regazo, el masajeó mi muslo distraídamente, su labio inferior hacía pucheros ligeramente.

“Mírame.” Murmuré, mis dedos presionaba en la piel cerca de su barbilla mientras me las arreglaba para tirar de el para que lo hiciera. “Tendremos un montón de tiempo juntos una vez que todo esto acabe, ¿vale? Confía en mi, nadie quiere esto mas que yo, que nosotros seamos simplemente capaces de pasar la noche juntos y no tener que preocuparnos por el mundo alrededor de nosotros, pero desgraciadamente, no podemos hacer eso ahora mismo y tenemos que aceptarlo.”

“No debería de ser así...” Alejando su rostro de mi suave agarre, el apartó la vista de mi, sus ojos viajaban alrededor del perímetro de la habitación, la tristeza habitaba en sus ojos. “Nunca quise esto para mi mismo. Nunca quise esto para ti.”

“Niall, esta bien.” Me esforcé, obligándole a mirarme en los ojos una vez mas. “Estaré en casa esperándote cuando vengas.”

“Va a ser tarde.” El murmuró con el ceño fruncido. “Deberías de estar durmiendo, no preocupándote por mi.”

Me encogí de hombros, “No me importa. Esta no es la primera vez que te he esperado y no será la última.”

“Nunca escuchas, ¿verdad?” El frunció el ceño, sacudiendo su cabeza.

“Me pregunto de donde conseguí eso.” Repliqué en broma, ganándome una sonrisa a cambio, haciendo mi corazón agitarse una vez que me di cuenta de que no le había perdido por completo.

“Probablemente deberíamos regresar a casa ahora.” Niall dijo mientras miraba abajo a su teléfono. “Quiero asegurarme de que estas a salvo en nuestra habitación antes de que nos marchemos.”

Cogiendo su teléfono de su mano, lo sostuve fuera de su alcance, apagándolo antes de devolvérselo. “No tentemos que ir a ninguna parte.” Sonreí, “Todo va a estar bien, ¿vale? Necesitar dejar de penar demasiado.”

“¿Que si Bruce me llama?”

“El va a tener que vivir con ello, además; vamos a llegar a casa a tiempo. Ahora, cállate, acuéstate y abrázame porque la última cosa que quiero estar haciendo es hablar con mi novio antes de que el tenga que dejarme esta noche.”

“No digas eso.” Niall murmuró, sacudiendo su cabeza.

Arrugando mi rostro en confusión, incliné mi cabeza hacia un lado. “¿Decir el que? ¿Que dije?”

“Que te voy a dejar. Hace que suene como si quisiera hacerlo y ese no es el caso en absoluto.” Levantándome sobre mis pies antes de acostarse en el sofá, Niall metió su brazo derecho detrás de su cabeza antes de llevarme hacia él, mi cuerpo adaptándose perfectamente a su lado.

Jugando con las cadenas alrededor de su cuello, giré una de ellas alrededor de mi dedo antes de dejarla caer en su pecho. Suspirando, agarré su mano, decidiendo entonces jugar con sus dedos en cambio.

“Alguien esta inquieta,” Niall rió entre dientes mientras el miraba hacia abajo a mi, una sonrisa tiraba de las comisuras de sus labios.

“No se que hacer.” Defendí con un mohín de mis labios.

“¿Que si hablamos, eh? Sugeriste eso antes.”

“Eso fue antes de que pensara que tu me escucharías y ahora que lo haces, no se que decir.”

“Bueno, podemos hablar sobre la Universidad si quieres.” Niall se encogió su hombros izquierdo, “No me importa realmente. Solo quiero escuchar tu voz.”

Sonrojándome, escondí mi cabeza en su hombro. “Deja de hacer eso.”

“Dejar de hacer el que?” Niall rió.

“Hablar dulce, va a hacer mas difícil dejarte ir mas tarde hoy.”

Apretando su brazos alrededor de mi, Niall besó la parte superior de mi cabeza. “Solo estoy a una llamada de distancia niña.”

“Lo se.” Levantando mi cabeza, besé sus hinchados labios. “Simplemente odio esperar.”

“Eres un dolor en mi cu*lo, ¿sabes eso?”

Abriendo completamente mis ojos, miré hacia él, mi boca se abrió en sorpresa. “¿Que hice ahora?”

“Bueno, para empezar decirme que no me preocupe y ahora aquí estas haciendo exactamente la misma cosa.”

“Eso es porque soy una chica y esta en nuestra naturaleza preocuparnos de este tipo de cosas. Es nuestro trabajo asegurar al novio que todo va a estar bien.”

Frunciendo mis labios en pensamientos, Niall me miró hacia abajo en cuestión. “¿No se supone que debe de ser al revés?”

Rodando mis ojos, agité una mano con desdén. “Dices tomate, yo digo patata. ¿Que diferencia hace? Creo que ya se ha establecido que no somos normales.”

Estallando a carcajadas, Niall cubrió su boca con su mano, las lágrimas brotaban de sus ojos mientras el trataba de detenerse a sí mismo pero falló miserablemente.

Riendo, le di una mirada extraña. “¿Que en el mundo es tan gracioso?”

“Tu,” Niall habló a través de su ataque, “La manera en la que dices eso tan... casual, no lo se. Simplemente me hizo reír.”

Mirándole hacia arriba, sentí mi corazón hincharse ante la imagen en frente de mi. El se veía diferente... de una buena manera diferente. “Ha pasado un tiempo desde que te escuché reír...” Señalé abstraída.

“Lo se,” Besando mis labios, Niall miro hacia arriba al techo. “Gracias.”

“¿Por que?”

“Por darme la sensación de libertad que nunca tuve.”

Apretándome en él, besé su pecho. “De nada.”