Al principio sólo existía un universo, no había sido creado simplemente estaba allí.
Este universo estaba controlado por once civilizaciones, muy distantes entre sí, tanto que no eran conscientes de la existencia de las otras.
Hasta que un día se encontraron. No hubo comunicación alguna pues sus largos años de inmortal existencia los había hecho precavidos y sospechaban de cualquier cosa que no conocían.
Y estalló la guerra. No fue una guerra como las que conocemos ahora, porque estos seres no conocían la muerte, y, siempre que se asesinaba a uno de ellos este renacía en su planeta de origen.
La guerra duró milenios, hasta que un día, por pura casualidad, las armas más poderosas de cada nación dispararon al mismo lugar del universo y al chocar tanta energía en un punto tan reducido se generó la mayor explosión jamás conocida.
La explosión destruyó todo el universo y casi todas las civilizaciones, solo once sobrevivieron. Pues aunque si estos seres morían reaparecían en sus planetas de origen, al desaparecer estos también ellos desaparecieron para siempre. A esta explosión se le denominó sucesivamente por los humanos Big Bang.
Pero, no se sabe como, once sobrevivieron, pero la explosión no les dejó ilesos, la explosión desintegró sus cuerpos dejándolos sólo como consciencias, constituidas solamente por energía pura.
Hasta que por segunda vez se encontraron, no fue un encuentro como el primer pues todos habían estado pensando sobre la guerra ocurrida y sintieron la necesidad de hablar, y, como respondiendo a esta necesidad, se formaron cuerpos alrededor de sus consciencias, limitandolas.
Entonces pudieron hablar y por unánime decisión se acordó que se olvidaría las pasadas rencillas y se ayudaría al nuevo universo.
Y, para obtener esto, empezaron a crear la estructura del universo por la cuan recibirían sus nombres.
Lo primero en crearse fue la nada, que sería la base de todo.
A continuación y entre dos de ellos se creó el tejido del espacio y el tiempo y, a partir de este momento, empezó a transcurrir el tiempo. Sucesivamente, entre todos, al margen de todo se creó la Sede, que sería el hogar de todos ellos.
Después se estableció la oscuridad que lo envolvió todo.
Sucesivamente se instauraron el orden y el caos y del choque entre ellos nació la materia y para permitir la evolución de ésta se instauró el azar o casualidad.
Más tarde se empezó a concentrar materia en puntos del universo formando la primera generación de estrella y con ellas la luz.
Muchos años después, después de la muerte de las primeras estrellas y el nacimiento de otras, después de la creación de los planetas, se empezó a desarrollar la vida y con ella se instauraron la muerte, el destino y el bien y el mal.