05

212 30 17
                                    

JIMIN

Me desperté debido al insoportable dolor en mi espalda, otra vez, sentía como si un camión me hubiera arrollado veinte veces seguidas, casi no podía moverme por las constantes punzadas en las heridas.

-Dios mi espaldaa -Chillé en voz baja, traté de levantarme con cuidado pero no podía, ¿Por qué me dolía tanto la espalda? -Espera... -Me mantuve en silencio un momento, mis ojos estaban abiertos como platos.

-¡¿Qué hago aquí?! ¡¿Y YoonGi?! ¡¿Cómo llegué a mi casa?! ¿Qué...?

De un brinco quedé sentado en la cama, mi respiración se aceleró y comenzaba a alterarme. Miraba a todos lados en busca de una señal de YoonGi, pero por suerte no estaba allí.

¿Pero qué mierda hacía en mi casa? ¿Acaso YoonGi me trajo?

No sabía qué pensar, lo último que recordaba eran las malditas sanguijuelas... De allí todo, era borroso.

Maldito... Mira nada más como me dejaste...

-Ahh mi espalda- Dije al borde del llanto. Me dolía muchísimo, lo único positivo era que ya estaba en mi casa y alterarme ya no me serviría de nada, así que traté de levantarme de la cama como pude, pero las piernas me temblaban y cada movimiento me hacía chillar del dolor.

-Joder -Dije con la voz ida.

Logré sentarme pero está vez en la orilla de la cama y me quedé en silencio otro momento, mirando alrededor de mi habitación sintiendo el intenso dolor en mi espalda, giré a la izquierda y noté que en mi mesa de noche había una ¿Carta?.

Para Jimin...

¿Qué carajos? -Exclamé algo confundido y molesto, me levanté con cuidado, agarrándome de las orillas de la cama para no caer, hasta llegar a la mesa y quedarme de pié, con el puto dolor más jodido, pero de pié. Tomé la carta y la abrí.

"Cuidado con una caricia ajena... Le podría costar la vida a esa persona"

MYG.

Quedé helado al leer aquello, y una expresión de horror y desagrado se formó en mi rostro... A la verga la calma.

-¿C-caricia ajena? ¿Pero qué mierda? No recuerdo que alguien se me acercase tanto excepto... -El silencio vuelve a apoderarse del lugar.

-¡JUNGKOOK! -Grité asustado, tenía miedo de que YoonGi le pudiera hacer daño.

-Mierda cierto, JungKook es como mi sombra, siempre está conmigo... -Proseguí alterado. -Pero no, no creo que piense mal de él, ¿O solo ésta jugando? Sí, debe ser eso...

Arrugue la jodida carta y la aventé con fuerza y rabia al cesto de basura que estaba junto la mesa de noche, y de un momento a otro pensé que fuera una broma, la verdad no creo que YoonGi sea un asesino, aunque... de él puedo esperar cualquier cosa y tal vez si... ¡Ay noo! -Gruñí con cara de preocupación.

Empezé a caminar en círculos por toda la habitación, sin darle importancia al intenso dolor de mi espalda. No dejaba de pensar en que YoonGi hiciera algo así, sinceramente estaba asustado, tenía miedo, pero no tanto de lo que pudiera hacer conmigo, sino con los demás.

-No Jimin, ¡No! Sácate esas ideas locas de la cabeza -Tomé mi cabeza con ambas manos, quedando con la mirada fija en el cesto de basura y respirando con dificultad.

-Calmate Jimin... respira hondo...

Cerré mis ojos, tomé una bocanada de aire, esbocé profundo y los abrí nuevamente. Si seguía pensando en eso solo lograría alterarme más, pero la verdad es que me era casi imposible, por Dios... ¿Cómo carajos iba a estar calmado después de leer semejante cosa? Y sobretodo si provenía de Min YoonGi, levanté la mirada y decidí bajar a la cocina, me vendría bien comer algo, tenía que despejar mi mente un poco.

Te Necesito || (Y.M +18) [PAUSADA] Donde viven las historias. Descúbrelo ahora