Corazones Confundidos.

Cap 1-La llegada

Mi vida comenzó en una ciudad conocida como Moorhead , estado Mississippi en el condado sunflower que en español significa girasol muy bonito ¿Verdad? Pero es lo contrario, mi vida ahí jamás fue lo mejor pero eso cambió, fue un gran cambio.
Mi cumpleaños es el 15 de julio, un día el cual debe ser festejado pero por muchas razones lo aborrezco y detesto pero eso es para mas adelante, el día de mi octavo cumpleaños conocí a la persona más tímida, pequeña y llorona que jamás había conocido en mi corta vida. Su pequeña figura de pie en frente de nosotros hizo que algo dentro de mi se moviera y lo primero que pensé fue "Quiero protegerlo", que ironía de la vida.

Julio 10, 2006.

A levantarse- ordenó Clara, una mujer de edad que cuidaba de todos nosotros. Sus arrugas siempre estaban presentes sobre todo cuando fruncía el ceño algo que era muy regular en ella y a nadie extrañaba- Hoy es un día soleado para ayudar a lavar la ropa.

Los 5 niños en la habitación nos miramos entre sí, viéndonos cansados por la cantidad de sueño acumulado durante esta semana. Era lunes, el sol brillaba con todas sus fuerzas y el calor era agobiante aunque la brisa era fresca y sentías que en cualquier momento el invierno podía reaparecer pero los rayos del sol hacían su trabajo, quemar tu piel hasta pensar que había una probabilidad de freír un huevo en tus brazos. Esa mañana todos los niños y niñas se fueron a sus respectivas secciones para tomar una ducha y estar frescos para el largo día que nos esperaba.

Buenos días Elizabeth, hoy estás más linda que ayer- mi bandeja color azul se posaba encima de los barrotes de metal, sonreí lo mas que pude y así utilizar mis encantos con la cocinera.

E igual que ayer y el día que le sigue- ella por su parte sonrió dejando ver unas pequeñas arrugas en la comisura de sus ojos- eres un niño terrible.

Sonreí al sentirme victoriosos con mi logro, doble razón de pancakes con tosino. Pensaran del por qué me sentía tan feliz al lograr eso, bueno si tuvieran que comer tres rodajas de pancakes del porte de la mano de un niño de 6 años y dos tiras de tosino creo que estarían feliz y saltando de alegría. Me senté con mi típico grupo de compañeros pero antes de llegar fui comiendo la ración extra que Elizabeth me había dado.

Escuché que habrá un nuevo niño- todos en la mesa empezaron a murmurar sobre la nueva noticia que a nadie le entusiasmaba y eso tenía una razón, una boca más que alimentar y cortar un poco las raciones de alimentos- escuché que vendrá la próxima semana...

Que fastidio- se desinfló uno de los niños con un color de piel oscuro como la noche- tendremos que turnarnos en enseñarle todo lo que hay que hacer...

Deberemos compartir habitaciones- los 5 nos miramos y supe que esas miradas no traían nada bueno- Si la señora Clara se le ocurre decir que el dormirá en nuestra habitación créanme que le haré la vida imposible.

-No creo que sea tan malo....
Murmuré mientras comía mis panqueques con miel y mermelada de fresa, uno de los niños más grande me fulminó con la mirada.

Tu cállate nenita-

Tragué saliva y preferí mantener un perfil bajo como siempre, no me metería en líos, no haría alborotos, no me ganaría enemigos y sobre todo no ayudaría a los débiles.
Esas eran mis reglas las cuales seguí durante 3 años seguidos, desde la vez que caí en cuenta que el mundo era muy malo y tétrico.

15 de Julio, 2006.

Hoy era el día más esperado para mí.
Al abrir los ojos las 10 mujeres encargadas del edificio estaban de pie bajo el umbral de la puerta con un pastel envuelto en chocolate, todos los niños y niñas estaban de pie ahí adentro cantando la canción del feliz cumpleaños. Mi estómago rugió de tan solo ver esa torta y como costumbre sople las velas y así recibir el pedazo más grande de pastel mientras lo demás se repartía entre los 25 niños representes (ellos fueron los que madrugaron y llegaron rápido para obtener un pedazo de pastel)