Capítulo 4 (parte 2) :

12 2 0
                                    

¿No os ha pasado alguna vez que alguien os ha humillado tanto que queréis matarlo?¿Esa sensación de rabia que surge cuando ves la sonrisa de la persona delante tuyo qué es provocada por tu humillación? Eso mismo me está pasando ahora.

Mierda ugggghhhh. Ese idiota de va a arrepentir de lo que acaba de hacer como que me llamo Kaily. Estoy empapada, no, lo siguiente. Todo el mundo me esta mirando, so lo se oyen algunos cuchicheos, pero por lo genero to dos están callados y atentos a mi reacción. Olía a alcohol y mi padre me iba a descuartizar y después meter los restos de mi cuerpo entre las paredes de la casa. Me sacudo una mano para quitarme todo el líquido. 

UN POCO ANTES:

Seguía en la fiesta. Supongo que será ya muy tarde, y digo "supongo" porque no tengo reloj y soy tan lista que no cargue el móvil y ahora está sin batería. Os preguntaréis ¿entonces como sabes si es tarde? Facil, tan sólo tienes que mirar el número de gente borracha, y por el número calculo que serán las dos de la madrugada. Estoy bailando casi en una esquina del salón ya que no quería llamar mucho la atención, en vano, a los cinco minutos ya estaba rodeada de unos tres chicos que parecían perros detrás de su presa. Si África hubiera estado aquí ya los habría hechado a patadas, pero lamentablemente  no se donde narices se ha metido. O sea que ya podéis imaginaros la escena, yo bailando en una esquina de una casa tras la historia de los Tigres, sola rodeada por tres chicos con las hormonas revolucionadas queriendo acostarse conmigo. Y es por esto chicos y chicas por lo que odio las fiestas.

De repente cambiaron la música y pusieron una canción lenta.

-Hey, ¿quieres bailar?-dijo uno de los chicos de cuyo nombre no tenía ni idea.

-No, gracias, mejor me voy a sentar, estoy un poco cansada-100% excusa. Me fui a sentar a una de las mesas pequeñas y observé el panorama. Que triste, de verdad. Noté que alguien se sentaba a mi lado. Me giré y lo vi. Ese chico me sonaba de algo, pero ¿de qué?

-Mmm... ¿Nos conocemos?- el chico me miró. Y luego se rió. Era pelirrojo y tenía los ojos verde esmeralda. Era bastante atractivo, me sorprende que no se esté acostando con alguna pava que solo busca sexo.

-Mmm...creo que si, ¿tú vas a la UG?-preguntó el chicorreo de ojos azules.

-Si. Ahh¿Tu estudias derecho,no?¿Darion?

-Si y tú eres la chica... Kaily.

-La misma en persona.- nos dimos la mano. Nos pusimos a hablar de las carreras cuando otro chico castaño nos interrumpió.

-Darion ¿Qué haces aquí?- me miró a mi- Ahh, ya veo.

-Te puedes quedar Zane, estábamos hablando de la UG.-dijo Darion.

Zane...me suena un montón al igual que Darion. Y me da la impresión de que no es sólo de la UG.

-Bueno, vale.Qué estás estudiando tu, morena.-se sentó en frente mío.

-Para empezar tengo nombre y es Kaily, segundo, no me vuelvas a llamar morena y tercero estoy estudiando medicina. Cuarto... ¿nos conocemos?

El chico me estudió, después de unos segundos abrió mucho los ojos, esos ojos grises. Esos ojos grises que yo tanto conocía. De pronto me empezó a hervir la sangre. Y mi piel adquirió el tono del pelo de Darion que en este momento nos miraba confusos. Justo en ese momento África paso por allí mirando entre la gente. Se giró y nos vió.

-¡¡¡¡TU!!!!- África lo había reconocido. Esto se iba a poner muy feo. Pero que mucho.-¡Te vas a enterar por lo que le hiciste a Mía! 

Zane se levantó y se enfrentó. Gran error. Gravísimo error.-Tardó en llegar la psicópata de Gringo. Ya me estaba preguntando donde estabas.

Secretos descubiertosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora