ESTA CERCA DE TI

EL SEÑOR S

¿Los Monstruos Existen?

La señora Harrison entro al cuarto de la niña sosteniendo una charola con un plato de caldo de verduras y unos cubiertos, la infante ya estaba sentada en su cama con las piernas ya metidas en las sábanas.

-¿Como estas Lisa? ¿Lista para dormir?- pregunto la señora Harrison con una amplia sonrisa en su rostro mientras se sentaba en el borde de la cama.
La pequeña Lisa no correspondió su sonrisa en cambio en el rostro de la chiquilla se reflejaba preocupación.

-¿Que pasa hermosa?- pregunto la señora Harrison al ver su rostro pálido.
La niña observó alerta alrededor y a cada rincón de la habitación, como si no quisiera que nadie la escuchara.

-Tengo miedo mami- soltó en voz baja Lisa.

-¿De que?- pregunto la mujer mientras acariciaba con una mano el cabello castaño de la niña.

- De que otra vez vengan los monstruos a verme.

La señora Harrison la escucho y pensó un segundo en su respuesta.

-Los monstruos no existen cielo- la tranquilizó con voz suave la mujer.

-Si, si existen, ellos vienen casi todas las noches a verme.

-¿En serio?- pregunto sin darle mucha importancia la señora Harrison mientras llevaba una cucharada de sopa recién hecha a la boca de la niña, ella la rechazo.

-Si, son malos, pero me asusta más el líder de los monstruos.

-¿Quien es el líder?- pregunto la mujer sin interés.

-Dice que se llama el señor S, él es el más malvado.

-Mira- la interrumpió la señora Harrison- corazón, los monstruos no existen, deja de pensar en eso- dijo mientras se ponía de pie nuevamente con el plato completamente igual a como había llegado, Lisa no probó ni un bocado.

-Pero mami, tengo miedo- suplico Lisa.

-No tienes porque, no pasa nada, ahora descansa- dijo la señora Harrison segundos antes de apagar la luz de su habitación, salir y cerrar la puerta tras de si.
Con la espalda pegada en la puerta, la señora Harrison exhalo.
Al momento en que se disponía a ir a la cocina a dejar la charola, la señora Harrison se encontró con su esposo en el pasillo, el señor Harrison.

-Prepara a Lisa- dijo el señor Harrison.
La mujer lo miro con miedo.

-No, ahora no, ella ahora está muy cansada, necesita descansar.

-¡No me interesa si esta cansada!- gruño el señor Harrison- El señor Simmons pago por adelantado y no pienso perder a mi mejor cliente.

¿Los Monstruos Existen?... Si, Ellos Viven Entre Nosotros.