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Departamento de Izayoi.

Sábado 7:56 p.m.

一 Vaya mierda de noche...一 susurré mientras sufría algo parecido a un espasmo al momento de estirarme.

Empezaría con algo común cómo "Los rayos del Sol entraban por una pequeña abertura entre las cortinas, llegando hasta mi cara haciendo que por fin despertara de mi reconfortante sueño"

Pero las cosas son diferentes.

Este cuarto estaba completamente a oscuras por las cortinas que cubrían todo rastro de luz.

No sabía qué hora era y realmente no me importaba. De cualquier forma no tenía nada que hacer.

¿Saben esos momentos cuando te despiertas y empiezas a pensar en toda tu vida mirando a la nada?

¿Sí?

Ese soy yo ahora mismo.

一 Es verdad.一 murmuré.

Sí tenía algo que hacer.

De un solo salto estaba fuera de mi nueva cama; además de que esa cama no tenía cobijas o almohadas. Literalmente este departamento no tenía nada. Era nuevo en su mayoría.

一 ¿Tan temprano, amor?~~一 una voz femenina preguntó en tono seductor en la pared a mi lado.

Mi cuarto estaba al final del onceavo piso, y al parecer había una pareja; los cuales están en sus veintes o treintas, los cuales no desperdiciaban su tiempo juntos.

一 Claro que sí, cariño.一 replicó al instante el hombre.

Pude percibir el sonido de un golpe firme contra la pared.

Gemidos empezaron a escucharse.

Tuve que despertarme tres veces en la madrugada para escuchar a este dúo de "calientes" tener relaciones sexuales.

Los gemidos continuaron, y por la poca pero suficiente experiencia propia, sabía que esto continuaría por un laaaargo tiempo.

Bueno. Cada quien tienes sus "necesidades"

Solté una leve carcajada antes de caminar hacia la tarjeta de crédito. Una tarjeta negra con varios números, códigos, etc.

La tomé con mi mano derecha y empecé a jugar con ella. Después recogí mis audífonos y celular.

La frase que había dicho anteriormente: "No tengo nada que hacer", estaba totalmente incorrecta. Tengo muchas cosas para hacer hoy.

Caminé hacia la salida de mi departamento.

No tenía que cambiarme porque me había dormido completamente vestido.

Después de bajar por las escaleras di una rápida mirada a los cuartos del departamento.

La cocina tenía elementos que la hacían ver que era nueva. Desde la estufa hasta  algunos estantes que estaban ahí.

No había una puta mesa, tampoco había sillas. Ni siquiera platos, vasos o utensilios.

Pasé por la puerta para mirar a mi "sala de estar"; sin muebles, sin sillones, sin televisión y sin siquiera un pequeño adorno.

Ni una puta alfombra que dijera "Hogar, dulce hogar" o una frase parecida.

Lo bueno que tan siquiera tenía luces y tomacorrientes.

Miré al único detalle que este lugar tenía. Un espejo.

一 Tch. 一 chasqueé la lengua.

Mi uniforme escolar azul-marino.

¿Por cuánto tiempo he utilizado este conjunto?
¿Dos años ya?

A Child With The Power Of A God. (HIATUS Y REESCRIBIENDO)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora