Y... Logré ver la realidad, logré ver todo ese daño que me hacías.
Llegó el día en que tu recuerdo se volvió una imagen borrosa, tu sonrisa una luna opaca y distante... Y tu voz por fin calló convirtiendose en un eco.
Todo ese tiempo atrapado dentro de una adicción que me carcomía... Te amé con toda la fuerza que pude... Pero tu mencionaste una vez que para ti el amor era 'desechable'.
Oh, querida Heroína, ¿ha caído alguien más en tu trampa?
Esas dulces palabras engañaran más personas y... Lo quieran o no, se enamoraran de ti, tal como hice yo, eres una pequeña pero poderosa y tóxica droga, mi amor.
Nadie merece probar esos adictivos labios, nadie merece el llanto de noche... Lo lamento querida, me duele decir que solamente fui...
»El primer Adicto.«
