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Antes que nada. Perdonen las faltas de ortografía tan graves, Las acciones sin sentido, etc. Pues esta historia la escribí a los 11 años, Cuando tenga tiempo, pondré esta historia en borrador y le cambiare muchas cosas. Perdonen, sigan leyendo ❤️

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Pov Alexia

-Mamá, Papá ¿podemos ir a la playa?-pregunte inclinando la cabeza para arriba

-No se si podamos mi amor, tenemos mucho trabajo...-dijo mi mamá agachándose para estar a mi altura mientras papá acariciaba mi cabello

-¡Pero yo quiero ir a ver el atardecer!- chillo, haciendo un puchero, mis típicos berrinches cuando no me dan lo que quiero

-Esta bien -suspira- creo que podemos ir la proxima semana, si es que eso te hace feliz, todo por mi princesita-dijo Papá con una media sonrisa

- ¡Si! -grito con mucha emoción, saltando por todos lados

»Recuerdo las ganas que tenía de ir, mi amiga darla me había contado lo maravilloso que era la playa, y yo de ilusa quería ir con mis padres, lo triste es que no sabía lo que el destino me esperaba«

•Una semana después•

Estaba en el carro, camino a la playa con mi papá conducciendo y mamá alado de papá, mi mamá estaba embarazada de gemelos, eso lo habíamos descubierto hace tres días exactos, y yo estaba muy emocionada, siempre había querido tener hermanos, así que me acerque a papá para hacerle una pequeña broma inofensiva, esas llenas de inocencia que no miran las consecuencias de estas. Creía que sería divertido

-¡Ah!- grite al mismo tiempo que tapaba los ojos de papá mientras sonreía y soltaba una risita

Pero no fue el resultado qué esperaba, todo paso tan rápido. Nunca pensé que pasaría eso

Papá saliéndose de control. Las cegadoras luces del camión, los gritos de mamá, mis llantos, papá intentado cubrirnos a mamá y a mí del golpe, el impacto fue duro, dolió como nunca antes me había dolido algo, de la nada aspire aquel peculiar olor, Quemado. El auto en cualquier momento estaría prendido en fuego. Con nosotros dentro

-¿Mamá?- Tosí- ¿papá está bien?-pregunte tociendo aún más, no sabia en que situacion estaba en ese momento, ni el peligro que corríamos todos, y mucho menos que papá ya había fallecido

-El esta bien-dijo intentando sonreír y hacer como si no pasara nada. Pero muecas se formaban en su rostro, su cara teñida de rojo. Aún la recuerdo-hija, por favor, sal de aquí, todo estara bien, papi y mami estarán bien- dijo mamá acariciando mi cabello sabiendo que sería la última vez que me vería, y que sus difuntos bebes, ya habían fallecido  al igual que su esposo

Yo asentí y me fui por donde ella había apuntado, un poco lejos y cuando mire en dirección opuesta, una explosión me asusto, habia explotado el carro, y está ahora estaba prendido en fuego, y mis padres estaban muertos, no sabia que hacer, estaba muy asustada, no tenia ni idea que me había quedado sola para el resto de mi vida, asi que decidí (aun temblando del miedo, literalmente) irme de allí, no sabía a dónde, tal vez a pedir ayuda, aunque ya no podia hacer nada

No se ni como, pero había llegado
a el pueblo, y nadie me prestaba atención, ni si quiera por la ropa rasgada ni la tierra en mi cara. Asi que llege a mi Casa y entre por la ventana que estaba un poco abierta

Comencé a llorar inevitablemente. Sabía que mis padres habían muerto. Y lamentablemente no tenía familiares a los que le importara. Tampoco la policia ayudó mucho en el futuro. No hicieron bien su trabajo. Nunca supieron que había una niña pequeña en el accidente y que seguía sola

Tres años despues

-Hoy es mi cumpleaños papas, espero que esten bien en el cielo, tambien mis hermanitos, saldré a jugar con la nieve un rato

El invierno era mi estación del año favorita. Era maravillosa la nieve que caía del cielo y los hermosos copos de nieve

Tome una pala de jugete y salí de casa. Nadie se preocupa por mí, y nadie sabía que mis padres ya habían fallecido, pues la noticia nunca salió en las noticias y ellos tenían sus propios problemas

Comencé a juntar mucho nieve en un puño sin sentido y empece a hacer dibujos en la nieve

-¡hay!- grite adolorida sobandome donde al parecer una bola de nieve había impactado

La voz del chico era Melodiosa al reír. Lo mire, no tenía zapatos, su cabello blanco me recordaba a la nieve blanca, era pálido, sus ojos azules eran bonitos y tenía un extraño bastón

-¿Quién eres?-pregunte con curiosidad y miedo a la vez

-¿Me puedes ver? -pregunto asombrado el chico de cabello blanco

-¿Si?-dije confundida

-¡Genial!, ¡Me llamo jack!, jack frost-dijo el sonríendo y haciendo una reverencia  como las de cuentos de princesas

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Ya no creo en jack frostDonde viven las historias. Descúbrelo ahora