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Las vidas de ellos dos ya no era la misma, ahora asistían a clases, entraban sus tareas y trabajos, habían dejado de tomar y drogarse, eran más responsables y eso sorprendió a más de uno, tanto sus amigos como profesores.

La maestra Ciel estaba contenta de que Wonho y Takuya estuvieran así, a pesar de que algo no cuadraba bien pues Shin la mayoría del tiempo se la pasaba marieandose y bomitando desde así ya un mes.

- Muy bien chicos para mañana quiero este reporte, el que no lo entregue se le anula su examen.- decía Ciel mientras terminaba de escribir lo que vendría en su reporte de literatura.

- Sí.- contestaron todos al unisono y guardaron sus materiales.

- Hasta mañana chicos.- dijo la profesora y los alumnos contestaron de igual forma.

- Won acaso no tienes calor, estamos en verano y tú traes tú tremendo sueter.- pregunto Yongeok.

- No.- dijo con una sonrisa.- Bueno chicos ya me voy nos vemos.- se despidió de sus amigos junto a Takuya y se fueron.

Takuya dejo a Shin en su casa para después irse.

- Ya llegué mamá.- grito Wonho al entrar a su casa.

- Hola cariño.- saludo su madre saliendo de la cosina.

- ¿Estás haciendo de comer?- pregunto confundido ya que su madre normalmente no cosinaba.

- Si, estoy practicando además hoy no vino Wendy.- informo su madre.

- Espero y no quemes nada.- se burló y su madre lo fulminó con la mirada.

- Y tú que acaso no tienes calor.- dijo su madre viendo su gran suéter.

- No, me voy a mi habitación.- dijo Shin y salió corriendo de el lugar.

Shin dejo sus cosas y comenzó a hacer su tarea, hoy no vería a Takuya durante todo lo que le quedaba del día ya que este tenía que ayudar a su padre en su trabajo.

Pasaron unos cuantos minutos y su pequeñito ya tenía hambre, bajo a la cosina en la cual aún su madre seguía revisando el horno esperando la lasaña que había estaba haciendo. Habrio el refrigerador en busca de algo y encontró un vaso a la mitad de helado de chocolate, no era su sabor preferido pero necesitaba comerlo.

- Hey niño eso es mí, a ti ni te gusta el helado de chocolate.- dijo su madre.

- Se me antojó.- dijo metiéndose una cucharada a la boca.

- ¿Que estás embarazo o qué?- dijo con broma su madre y Wonho se paralizó un momento para después reír nervioso.- Ya va a estar la lasaña y tu padre está por llegar, deja eso.

- No, me voy a terminar mi tarea si no la profesora Ciel me suspenderá mi examen.- salió prácticamente corriendo del alcance de su madre la cual se encontraba extrañada de la actividad de su hijo.

Al terminar su reporte de literatura Wonho decidió hacer nada en lo que su padre llegaba, tomo su celular y busco el número de Takuya, marco sin pensar y espero a que este contestará.

- ¿Pasa algo?- pregunto en seguida Takuya al contestar la llamada.

- No, solo quería hablar contigo.- sonrió.

- No a pasado ni 4 horas desde que nos vimos.- su voz sonaba feliz.

- Pero ya te extrañamos, el bebé y yo nos sentimos solitos.- hizo un puchero Shin.

- Por que eres tan tierno, te amo, te amó, te amo.- dijo Takuya para después ma darle muchos besos y hacer que Wonho riera tiernamente.

- Yo también te amó, te amo mucho.- contestó Shin.

- ¡Wonho baja a comer!- grito la señora Shin.

- Mmmm, ya me tengo que ir, te amo, adiós.- se despidió Wonho con voz melancolica.

- Está bien, cuídate te veo mañana, adiós.- se despidió y colgó la llamada.

- ¡Shin Wonho!- llamo de nuevo su madre.

- Sí, si, ya estoy aquí.- dijo Shin bajan el comedor.- Hola papá.- saludo el chico.

- Hola.- saludo su padre con una sonrisa.- Oye hijo acaso no tienes calor.- pregunto su padre.

- Nop.- dijo por tercera vez en el día.

- Es lo mismo que le pregunté pero según él no tiene calor.- dijo su madre sirviendo la lasaña en sus platós.

- A comer se ha dicho.- dijo Shin evitando que el tema se fuera por otro rumbo y comenzó a comer como si no fuera un mañana.

Llevaba más de tres platos de lasaña y aún no se llenaba estaba cometiendo para dos o más.

- Parece como si no hubieras comido en días.- dijo su madre sorprendido del apetito de su hijo.

- Lo siento.- dijo Shin comiendo más lento.

- Y como te ha ido en la escuela.- pregunto su padre.

- Bien, mis calificaciones están mejorando además estoy muy sentado ahora en mis....- paró de repente.

- ¿Qué pasa? - pregunto su madre preocupada.

Shin solo movió su cabeza negando para después tapar su boca.

- No otra vez.- dijo Wonho para después salir corriendo a el baño.

Wonho vomito, su madre y padre fueron hacia él.

- Shin ¿Estás bien?- dijo su padre.

- Cariño que sucede.- dijo su madre aún más preocupada.

- Solo, creo que no debí comer mucho.- dijo con una sonrisa después de limpiarse la boca.

- Estás enfermo, desde hace días estas así, no quiero que sean nada grave.- dijo su madre.- Mañana te llevaré a el doctor.

Esas palabras hicieron que Wonho saltará sus ojos, por ningún motivo sus padres podían enterarse, por lo menos no ahora, no estaba preparada.

Quería salir corriendo de ahí, esconderse y que nunca lo encontrarán pero eso era imposible, que aria ahora.

Un campito muy corto pero aquí está, lamento mi falta de imaginación, ando muy cansada y es todo lo que pude hacer, esperen el próximo capítulo, los amo, adiós bebés. ❤❤

WABI SABIDonde viven las historias. Descúbrelo ahora