Por toda la eternidad.

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En el horizonte se apreciaba humo emanando de un edificio, las personas se acercaban lo más que les permitía la policía, las ambulancias se escuchaban a lo lejos anunciando su pronto arribo al área, los gritos de auxilio, llanto y alaridos de las personas heridas se podía escuchar aun dentro, los héroes aun no hacían su aparición y la policía no podía hacer mucho no tenían ni idea que ocurría solo escuchaban grandes explosiones que rompían los vidrios del enorme edificio junto con la siniestra voz que amenazaba con arrojar a cada rehén por alguna de las ventanas.

Debían hacer algo pronto la frustración y morbo de las personas al rededor solo empeoraba las cosas, se empujaban, gritaban e intentaban acercarse más sin la intensión de ayudar, solo querían ver mejor.

— ¡¡¡Malditos estorbos quítense!!! — grito fuerte un rubio haciéndose paso entre la multitud.

— ¡Vamos bro! se más educado — le dijo alegre un pelirrojo mientras se disculpaba con las personas que eran empujadas por su compañero.

— Cállate hoy no estoy de humor para esta mierda.

El pelirrojo suspiro en derrota, era cierto hoy era el peor día para el rubio, ese día era su día de descanso, pero en toda la ciudad había eventos y desfiles por lo que era inevitable que algún villano no intentará hacer de las suyas, con los héroes resguardando cada evento solo quedaba pedir ayuda a los que no estuvieran en servicio.

— Denme un informe de la situación — exigió el rubio a los policías.

— Se desconoce la habilidad de los individuos al igual del número, pese a la evacuación del edificio se considera que tienen al menos 10 rehenes además que se exige no acercarse.

— ¿Motivos?

— Se desconoce, por lo que sabemos no hay nada de valor en el edificio solo son oficinas, pero es parecido a otros casos que hemos estado siguiendo todos son seguidores de Shigaraki, en cada uno de ellos...

— No hay sobrevivientes solo son asesinados sin razón ni motivo y los perpetradores se suicidan o entregan sin más.

Escucho a sus espaldas el rubio, el solo escuchar su voz lo hizo enojar más de lo que la situación ya lo tenía.

— Que haces aquí maldito dos caras.

— Me mandaron ya que esto debe solucionarse rápido, pronto iniciara el desfile y no quieren que esto perjudique las festividades — le contesto sin inmutarse pese al odio percibido en cada palabra.

— Crees que necesito de tu ayuda maldito bastardo — le dijo volteándose y mirándolo a los ojos.

— Yo tampoco estoy contento de verte, pero hoy es un día importante y solo quiero terminar esto e irme, tengo mejores cosas que hacer que soportar tus estúpidas rabietas — le respondió molesto en verdad no quería verlo, pero lo mandaron para solucionar rápido la situación quería negarse, pero ese día se celebraría a Midoriya, en otra ocasión hubiera rechazado la petición de su padre, pero esta vez no podía no quería que nada manchara ese día.

— Tu maldito infeliz... — le grito Katsuki generando pequeñas explosiones en sus palmas.

— Vamos bros no debemos pelear entre nosotros, sino con los infelices de allá dentro — les dijo mientras señalaba el edificio.

El rubio bufo molesto, pero Todoroki tenía razón debían terminar rápido y sin percances no podían permitir que alguien muriera ese día.

— Vallamos tengo un plan.

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