Parte 2

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-No hay porque desanimarte. Ese tipo me da mala espina y no creo que dure mucho con él. Animo ¿vale?

-No lo sé Monrroy, no creo que me quiera. Soy muy pesimista y no lo sé, no veo posibilidades.

- ¿Ya le has escrito o algo parecido a lo que tú haces?

-Sí, pero vi que solamente la tiró al cesto de basura.

-No te desanimes ¿vale?

Yo sé que pensarás en algo.

-Gracias Monrroy…

¿Pensar en algo?

Y así pasó el tiempo, “las palabras son el arma más poderosa” alguien dijo eso, es borrosa la imagen de quien lo dijo, pero por algo lo hizo.

Conforme pasaban las semanas la Mente y el corazón de Marco hicieron alianza para poder escribir sin límites. Escribir sobre las nubes, escribir sobre las estrellas, tomar la luna como lámpara de lectura y el cielo como mesita de noche para dejar que todo fluyera, miles de palabras y sentimientos corriendo durante las noches. Lamentablemente las palabras iban simplemente al vacío. A pesar de ello la fe, esperanza y constancia es algo que dentro de nuestro pequeño principal es algo que no parecía tener límites. Nuestro principal era alguien que no tenía valor para lanzarse o levantar la voz, pero algo cambió en él. Una fortaleza se levantó ¿acaso no es bello el amor? Tomó la fuerza para pegar sus sentimientos en el diario mural de la escuela. Eso solo fue el comienzo.

Buenos días Donde viven las historias. Descúbrelo ahora