1.- Paraguas

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Aquel día lluvioso, iba a ser el día de su primera cita, pero quien iba a esperar mejor cosa de Gotham, siempre había ese tipo de clima, en cada día del año, rara vez salía el sol.

Te quitaste tus zapatos, que te eran un poco incomodos y subiste las escaleras de tu pequeña casa, entraste a tu cuarto y te sentaste en el borde de tu cama, a maldecir en voz baja a aquella lluvia que caía.

Diste un largo suspiro, hasta que tu teléfono empezó a cantar aquella melodía que te avisaba cuando tenia una llamada.

Sin ver de quien era el numero, contestaste.

-según yo, teníamos una cita pendiente hoy- hablaron al otro lado de la linea

-¿Damian?-

-estoy en el café, en el cuál te había citado- respondió con un poco de molestia en su voz

-eh, si ya voy en camino, la lluvia me hizo un ligero retraso- contestaste con un poco de nerviosismo en tu voz

-ok, te veo en unos minutos- dijo el chico para luego terminar la llamada

Te colocaste nuevamente tus zapatos y agarraste tu pequeño bolso, en el cual traías dinero, tu teléfono, y un libro para distraerte, agarraste el primer paraguas que viste en tu casa, y emprendiste tu camino hacia el café, uno de los mas deliciosos de Gotham, pero un poco caro.

Empezaste a correr, conforme la lluvia aumentaba, no querías mojar, aquel pantalón que apenas habías comprado la semana pasada, llegaste al centro de Gotham, y empezaste a caminar con mas tranquilidad, te creerían loca, si te veían correr.

Visualisaste el café a lo lejos, y una sutil sonrisa se formo en tu rostro, apresuraste el paso pero sin correr.

Al llegar al café diste un largo suspiro, y entraste.

Al abrir aquella puerta, un aire cálido y un fuerte olor a cafe inundó tu nariz.

Al entrar rápido visualisaste a aquella cabellera negra y ojos verde, y fuiste directo a el, al llegar te sentaste en aquel comedor y por acto seguido el levanto la mirada de su teléfono y te dedicó una sonrisa que muy pocas veces tu podías apreciar.

-tardaste- dijo

-lo se, pensé que por la lluvia la cita se cancelaba- dijiste mientras dabas una sonrisa tímida

-¿quieres algo para desayunar?- dijo mientras te pasaba una de las dos cartillas

-me encantaría, Damian- dijiste mientras la agarrabas y empezabas a leer.

Luego de unos minutos, Damian se para a ordenar lo que ambos querían, para posteriormente volverse a sentar.

-oye (T/N), enserio pensaste que la cita se cancelaba?- dijo con un tono un poco burlesco el actual Robin.

-ya te dije, la lluvia me hizo pensar eso- dijiste mientras una sonrisa nerviosa aparecía en tu rostro

-aquí esta su orden- dijo un hombre de mayor edad, mientras dejaba dos platos con tarta de chocolate y dos cafés y se alejaba.

-después de aquí, ¿que te parece un paseo por el parque?- dijo Damian mientras daba el primer mordisco a tu tarta.

-me parece bien, ¿pero con esta lluvia?- preguntaste mientras tus ojos (C/O), lo miraban con incredulidad.

-traes un paraguas ¿no?, y para empezar unas gotas de agua no le hacen daño a nadie- dijo con una un rostro un poco fruncido, el de ojos verdes.

-no lo se, enfermarse, o un ataque de gripa- dijiste lo mas obvia posible- pero aun así, me parece bien-

Tiempo después

Solo faltabas tu, para poder salir del café, no te gustaba comer a prisa, por lo que te tomabas tu tiempo.

Minutos después Damian y tu se levantaron de la mesa, y salían de aquel lugar.

Pasaban por las grandes calles de Gotham, iluminadas de aquella ciudad, ambos iban a una distancia un poco prudente, debido a que en las calles de la ciudad, no les gustaba ser el centro de atención.

Al llegar al parque, notaron que este estaba un poco vacío, y decidieron tomarse de las manos, casi nunca lo hacían, debido a el corto tiempo del que disponían los dos.

El, y sus clases extracurriculares y su doble vida, siendo uno de los defensores nocturnos de aquella ciudad llena de cualquier tipo de delincuentes.

Y tu, siempre metida en aquellos libros y en tus clases de dibujo, por lo cual, solo se podían ver, los fines de semana, o en la escuela.

Y si no era eso, eran los viajes familiares de Damian.

Decidieron caminar un poco, por el parque, conversando de cualquier tema que se les viniera a la mente, hasta que se dieron cuenta de la hora, era ya de noche, las lámparas, iluminaban, los caminos, por lo que nunca prestaron atención a aquel detalle.

El teléfono del chico empezó a sonar, indicando que tenia un mensaje.

Saco su teléfono, para poder leer aquel mensaje que le había llegado, para posteriormente contestar y guardarlo.

-me tengo que ir- dijo mientras te entregaba aquel paraguas que el sostenía para cubrirse de la lluvia, y salía corriendo.

Te quedaste mirando a la dirección que había corrido, y diste un suspiro mientras cerrabas tus ojos, y empezabas a caminar directo a tu casa, pasaron unos minutos para darte cuenta que estabas en la ciudad, pero no en el centro.

Seguías caminando, hasta que alguien toco tu hombro, y tu volteaste a verlo.

-Dam..- tan rápida fue su acción que no te dio tiempo de terminar la oración y se te caía aquel paraguas.

El te estaba besando, tu, poco a poco empezaste a corresponder aquel beso inexperto por parte de los dos.

Hasta que el se separo, y dijo.

-pensaste que me iría así nada mas- dijo mientras se daba la vuelta- te veo en la escuela mañana- dijo para irse de ahí.

Tocaste tus labios, era tu primer beso, mientras un sonrojo y una sonrisa de enamorada, mientras que recojias aquel paraguas, del suelo, estabas toda mojada por la lluvia, pero aun así estabas feliz por tu primer beso.

One-Shots Damian Wayne Donde viven las historias. Descúbrelo ahora