He loves control ; BYLER

02

El día se le hizo largo a Will Byers, se la pasó prácticamente encerrado en su casa, hasta la tarde que vio que su refrigerador sino fuera por ésa caja de leche echada a perder, estuviera vacío. Necesitaba ir al mercado a surtirse de víveres.

Se puso una blusa roja sin mangas, unos jeans que le resaltaban sus curvas, unas zapatillas deportivas, una muñequera en la mano izquierda color negro, llevaba los audífonos puestos escuchando música y salió de su casa, directo al ascensor. Las puertas se estaban cerrando cuando fueron detenidas.

—¡Willy! —Exclamó un chico rubio que no tardó ni un segundo en recorrer el cuerpo de el muchacho con una mirada morbosa —. Luces maravilloso el día hoy.

Will solo asintió antipático, volteó a la derecha para ignorar al chico morboso que no apartaba su mirada libidinosa de su cuerpo.

—Supongo que todos en la escuela te han de decir todos los días lo bello que eres, lo hermoso, lo sensual, lo rico que estás .- el hombre empezó a acercarse a él para acorralarlo contra la esquina del ascensor.

—¿Qué quieres Joel? .- Preguntó directamente sin amedrentarse, mirándolo con desafío.

—Bueno, yo he escuchado como disfrutas con ésos tontos niños sin experiencia, sé que necesitas a un hombre de verdad, uno que te haga ver las estrellas…- se acercó a él para susurrarle al oído — te confieso que me toco cuando te escucho gemir de placer, y deseó ser yo quién esté en el lugar de ése estúpido.

La mano del rubio iba acariciando el brazo de Will hasta llegar a la cintura. Se acercó más a el castaño a tal punto que los labios del señor se encontraban a pocos centímetros de la boca de Will.

—Dame una oportunidad y verás que conmigo sí vas a disfrutar y en grande .- susurró el sujeto.

—Ni en sus más retorcidas fantasías, asqueroso .- Will lo empujó contra la otra esquina.

—¿Estás seguro? ¿De verdad piensas perderte esto? .- el hombre se señaló la entrepierna donde ya se abultaba su miembro.

—No me perderé de mucho, gracias por su oferta, pero no me interesan los rubios con cara mono, me gustan los rizados con cara de rana .- contestó Will con burla, detuvo el ascensor, estar con ése rubio le estaba causando nauseas.

—Pues sí cambias de opinión, ya sabes dónde encontrarme, yo con gusto te recibiré, hermoso .- lanzó un beso al aire.

El hombre fue lanzado hacia fuera del elevador, Will se quedó adentro y mientras se cerraba, el castaño le hizo una seña ofensiva con el dedo medio. Que ni pensara ése tipo que él se iba a salir del elevador para bajar tres pisos por las escaleras.

( . . . )

Mike estába hablando con Eleven nuevamente, Will rodó los ojos, vio cómo la chica se despidió del menor con un besó en la mejilla, el castaño sintió ganas de vomitar.

Mike se quedó sólo sacando algunos libros de su casillero, Will sonrió y caminó hacia él.

Will llegó hasta su ex mejor amigo, lo acorralo, poniendo su mano en la pared, muy cerca de su cuello, a pesar de que el castaño era más bajo de estatura, apenas le llegaba a la barbilla, eso no fue impedimento para que Will se acercara al rostro de Mike, casi a unos escasos centímetros de sus labios.

—¿Con que besitos en la mejilla, eh? .- Se mofó el oji-verde, observándolo de una forma que a Mike le causó nerviosismo.

—Sí .- respondió sin dejar de ver los castaños ojos de Will, impresionado de que el chico era más hermoso de cerca.

El castaño siguió con su sonrisa burlona y lo dejó, dándose media vuelta. Caminó por el pasillo, moviéndose seductoramente.

Mike se quedó unos segundos inmóvil, la acción del menor le sorprende mucho, pero no sería uno de sus juegos

– ¡Will!.- gritó Mike dispuesto a enfrentarlo, el menor volteó con una sonrisa

– Dime amigo.- Mike abrió los ojos, hace tiempo no escuchaba la palabra "amigo" de los labios de el pequeño Byers

– Qu-Quiero que te disculpes con Eleven.- habló cruzando los brazos, Will ni frunció el ceño ni se enojo, eso le resulto muy extraño, a paso lento y muy sensual a su gusto se fue acercando a él sin quitarle la vista de encima ni pronunciar palabra, eso lo estaba poniendo nervioso.

Will al estar a casi un metro de distancia entrecerró los ojos y entreabrió los labios, se acerco más estando ahora a pocos centímetros teniendo que levantar la cabeza un poco para verlo a los ojos, noto el nerviosismo de Mike,y como la respiración se le hacía más profunda.

Will sonrió

– No me siento mal por lo que dije Mike, no tengo disculparme porque tu me lo digas, es lo que siento por ella y merecía saberlo .- habló. – Y.. ¡casi me olvidó! quería invitarte a la fiesta que tendré hoy en mi casa.-

– Joyce no te deja hacer fiestas.- dijo extrañado

– Mi mamá y Jonathan no están en casa, mamá fue a ver a mi abuela, pero me llama a cada maldito segundo, y Jonathan está con Nancy en no se dónde, me quedó solo en casa ahora.- respondió con un toque tan sensual, que a Mike se le erizaron los vellos de su piel

–¿C-Cómo te pueden dejar solo después de lo que pasaste?.- pregunto molestó

–Yo se los pedí; ya estoy grande Mike ,¿irás o no? .- preguntó

–No hasta que te disculpes con Eleven.- dijó cruzando los brazos, Will suspiró

–Esta bien.- sonrió Will

–¿Lo harás? .- pregunto sorprendido el rizado

–No, esta bien que no vayas, no pienso disculparme con esa mocosa.- dijó y sin más se dio media vuelta y tras dar unos pasos giro la cabeza y pronuncio con el mismo tono que antes.– Te esperó Wheeler .- y retomó su caminar pausado, bajo la atenta mirada del rizado que no podía dejar de observar el vaivén de sus caderas, cuando lo perdió de vista salió de su mutismo y liberó un largo suspiró para quitarse un poco de tensión

– Demonios...-mustió por lo bajo.– Iré igual

De otro lado un lindo muchacho reía pícaramente por lo bajo

– Se que irá, pero no hay ninguna fiesta .- y sin abandonar una pequeña sonrisa se adentro a la aburrida clase.