El Encanto del Pecado [Editando]

Un vaso de vidrio en el piso

Estábamos en la cocina desayunando y esperando a Mayleen ya que  se fue toda la noche con aquel chico sin decir a donde,mi madre estaba algo enojada ya que necesitaba que ella hiciera el desayuno pero le tocó a ella misma hacerlo, lo único que se escuchaba eran los cubiertos contra los platos hasta que se escuchó como cerraban la puerta, mi madre se levantó rápidamente y yo la seguí hasta quedarme recostado en el marco de la puerta del comedor para así ver quien era.

-Al fin llegas Mayleen _-dijo mi madre mostrando una sonrisa hipócrita.

-¿Me esperabas? _- respondió May levantando una ceja y entrando a la casa.

-Obvio que te esperaba, tienes muchas cosas que hacer. ¿Donde estabas?

-Me quede con Arnold en su casa. _- nos miró seria.

-Tu novio? _- se quedó mirando fijo a May pero yo me adelante a responder

-Es un amigo de ella. _-me aproxime a donde se encontraban

-Si, mi novio. _- La mirada de May y la mía chocaron. Su mirada era como si había ganado algo y la mía era de sorpresa y algo de desilusión.

-Si?! ven cuentame _- mi madre tomó las manos de May y se sentaron en la mesa y yo imite su acción queria saber porque razón eran novios.

-Para qué quieres saber eso? _- May se levantó de inmediato _-voy a prepararme asi hago mi trabajo, Permiso. _- subió las escaleras dando una última mirada a mi, yo le sonreí pero ella se giro, en eso mi madre se levantó tirando la silla con furia.

-¿Qué pasa? _- pregunté  arrugando las cejas.

-Nada que te importe ¿si?, puedes ir con Lucy.

-No te pedí permiso para ir con ella. _- Mi madre hizo una mueca y se fue yo solo rodé los ojos y salí un rato a la piscina para asi relajarme un poco.

Lia'n

Me coloque rápidamente el uniforme para asi bajar y limpiar la piscina que ya tiene  días un tanto sucia, al salir puede ver a Noah quitando su playera ;pude notar como se la quitaba y dejaba ver su abdomen levemente marcado, el era un tanto delgado con ese típico cuerpo de modelo, su cabello quedó alborotado después de sacar su playera, quedando solo en shorts, lo único que hice fue quedarme parada como una tonta,viéndolo mojarse con el agua de la piscina como si estaba en una propaganda de perfume, moviendo su cabello de un lado a otro para secarlo, su rostro tan definido,sus ojos azules haciendo contraste con el agua de aquella y la luz del día era todo lo que necesitaba para hacerte el día pero olvidaba algo en todo ese momento que estuve babeando por el;El era mi hermano y los dos salíamos con otras personas, apesar de que eso era lo menos importante,estaba pensando en cosas cochinas cuando no debía,no pecaría de esa forma, yo no.

Cuando salí de mis cochinos pensamientos note una mirada divertida me veía desde lo lejos y al voltear me conseguí a Madeleine viéndome desde el otro lado, para luego irse y dejarme ahí confundida.

Al volver mi mirada a la piscina me tomo por sorpresa no ver a Noah metido ahí, me gire buscándolo y cuando lo encontré venía con una toalla en sus manos secándose,Se estaba acercando y eso no me gustaba.

Segui mi paso ignorando la mirada de Noah hacia a mi, empecé a recoger todo lo que había en las mesas y en las afueras de la piscina, mientras lo hacía podía sentir como Noah se acercaba pero yo solo me movía ya que en estos momentos me sentía incómoda después de fantasear un poco con el no podia tenerlo tan cerca ya que sentía que al ver esos hermosos ojos me lanzaría a él y eso tenía que evitarlo.

Pero todo resultó ser un fraude ya que al pasar cerca de la piscina me resbale y pude sentir como un brazo me jalo y quede pegada a un pecho, pegada a Noah solo sentí sus brazos rodeando mi espalda, se sentía tan bien estar en sus brazos algo que con Arnold era diferente pero rápidamente me aleje de él no quería tener ese tipo de contacto ya que no estaba cómoda.

-¿Que pasa? ¿Porque te alejas asi? _- pregunto acercándose a mi pero yo retrocedí un paso 

– Espacio personal.. _- Escuché una risita de parte de el.

– Eso no lo dijiste cuando Arnold te beso ayer.– Alce una ceja sorprendida volteandome de nuevo para enfrentarlo.

–Nos viste besandonos?_- lo mire atentamente a los ojos – Una sonrisa divertida apareció de nuevo en sus labios.

– Lo supuse, y ahora lo confirmo–  rió abiertamente

– Idiota.– Lo miré mal.

– ¿Por que te asustaste? – No querías que yo supiera que se besaron ? – Ahora yo fui la que soltó una risita irónica.

– No eres el centro de atención, ¿Por qué crees que me importaría si me viste besandolo? – Me cruce de brazos.

Noah se acercó rápido a mí tomándome de la cintura para susurrar en mi oído. – Créeme que se que por esa cabecita pasaron muchas cosas hace unos minutos, y no sería tan lindo que le hagas eso a tu novio no? Y sé que te importa y mucho. – Me estremecí entre sus brazos, su voz gruesa resonó por todo mi odio, podía sentir como mis piernas se hacían gelatina con tan solo oír la voz de Noah tan cerca de mi.

– Sueltame. – dije tratando de alejarlo a lo que el me seguí pegando al el y sonrió mostrando su perfecta dentadura.– Deja de hacer eso.

-Hacer que?_- su sonrisa se amplió 

-Sonreir NOAH._- Alze la voz ya que me extresaba que se hiciera el tonto, Este se acerco más a mí y sus labios se estamparon en mi mejilla haciendo que todo dentro de mí se calentará por completo, el simple Rose de sus labios hacia que todo se encendiera cuando no eso no estaba permitido en el libro de mi vida.

Me separé de él de golpe, pasándole por un lado.
Termine de recoger lo que quedaba en el piso y me largue de ese lugar para asi entrar y dar un suspiro, cerré los ojos un momento para asi abrirlos y ver a Melody con el ceño fruncido.

-¡Hola pequeña! _- me agache para asi poderle hablar bien. 

-Ay no tienes porque hablarme asi. _- alzo una ceja y cruzó los brazos

-Eh? porque?_-ladeé la cabeza.

– Ya no estoy pequeña.– Su tono me divirtió un poco.

– Vale,entiendo. – Asentí mirando a otro lado– Quieres algo? Donde esta tu hermana?– La miré atenta.

– Está en su cuarto encerrada esperando a que papá llegue. – volví asentir.– Está noche no salgas de tu cuarto después de las 9, a papá no le gusta que estén fuera cuando él viene de alguna de sus reuniones.

– Ok,pero por qué...– La pequeña me interrumpió.

– No salgas. – Se fue dejándome intrigada y viendo hacia la puerta de Moriss.

Está noche no salgas de tu cuarto después de las 9, a papá no le gusta que estén fuera  cuando él viene de alguna de sus reuniones.