CAPÍTULO ÚNICO.

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Siempre estoy junto a ti aunque tú no lo notes, camino a tu lado cada vez que sales de casa rumbo al trabajo para asegurarme de que llegues con bien.

Me siento en la mesa contigua a la tuya en los restaurantes para cerciorarme de que consumas alimentos sanos y no esa comida chatarra que tanto te gusta, sé que no tiene nada de malo pero tú sueles abusar en cuanto a ese aspecto, así que no tengo más remedio que cuidarte.

Cuando sales a beber con tus amigos también te sigo, pues temo que bebas de más y te quedes a medio camino tirado en algún lado donde quién sabe qué te podría pasar. La última vez tuve que intervenir porque casi te quedas dormido en el parque a las tres de la mañana, por eso te acompaño aún más de cerca. Quizá no pude llevarte a casa, pero me encargué de hacérselo saber a tus amigos para que fueran por ti.

Siempre estoy contigo, cuando cruzas la calle y miras de cada lado para asegurarte que todo este despejado, incluso ahí, yo estoy contigo solo para intervenir en caso de que te distraigas y puedas hacerte daño.

Sé qué tal vez parezco un acosador, pero la realidad es que sólo me preocupo por ti; no sé qué haría si algo o alguien te hiciera daño, así que, para evitar que eso suceda, siempre estoy contigo.

He intentado acercarme a ti más de una vez, aunque quizá sea tan sutil que nunca lo has notado. Cuando oías que alguien te seguía por la calle oscura o cuando pensabas que estabas loco por escuchar ruidos en la planta alta de tu casa esa vez que te quedaste solo, se trataba de mí, porque siempre estoy contigo cuidándote en los momentos en los que te sientes vulnerable.

Aquella vez que lloraste desconsoladamente en la sala mientras mirabas la televisión sin prestar atención, incluso ahí, yo estaba contigo, consolándote desde lejos, pero cerca de ti al mismo tiempo.

Siempre estoy contigo, cuando tienes que convivir con tus padres que te cuestionan sobre tu estilo de vida, tema que odias tocar, yo estoy ahí, aunque no lo notes, yo estoy apoyándote.

Cuando sientes que la vida es injusta contigo, cuando llegas a casa agotado sin ganas de seguir adelante, sin esperanzas sobre el futuro incierto, cuando no encuentras sentido a la vida, yo estoy contigo, y aunque lloro de impotencia porque quisiera ir y abrazarte para decirte que todo estará bien, no puedo hacerlo, pero quiero que sepas que yo estoy contigo.

Siempre estoy contigo, cuando bebes una taza de café que se ha enfriado por perderte en tus pensamientos, cuando ves los autos pasar a través de tu ventana, cuando te sientas frente al computador para hacer tus trabajos pendientes, incluso ahí, yo estoy contigo.

Cuando tus amigos te visitan y los recibes sin mucho ánimo, cuando les cuentas tu rutina, cuando ellos tratan de animarte con cosas divertidas y solo finges sonreír, yo estoy contigo, tratando de transmitirte mis mejores vibras para que te sientas mejor.

Jeonghan, amor, yo siempre estoy contigo. Cuando lloras a la nada y susurras mi nombre, cuando me pides perdón por no poder seguir, cuando me dices que nos veremos pronto porque no soportas más estar así, cuando lloras hasta quedarte dormido con nuestra foto entre tus manos.

Cuando recuerdas una y otra vez el último día que nos vimos a los ojos en aquel accidente de tránsito. Cuando les mientes a tus padres diciendo que estás bien.

Cuando dices que me amas hasta la eternidad y besas nuestra foto. Cuando te estremeces al sentir una corriente de aire recorrer tu cuerpo, ese soy yo, abrazándote a mi manera y llorando contigo.

Siempre, en cada momento y en cada lugar, y a pesar de la distancia, yo siempre estoy contigo.


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Always with you. 🖤 JiHan. Donde viven las historias. Descúbrelo ahora