Eternally Love [Sin Corregirse]

Boda II

Me sentía un poco incómoda por aquella mirada penetrante.
Le pedí a Sam que fuera a llevarle algo de comer a Emily y salí de la casa.

Los pensamientos en mi mente me atormentaban, quería despertarla un poco de todo.

Camine asta estar lejos de la casa, la Luna hoy estaba en su punto mas alto con un resplandor hermoso.

El cielo estaba llenos de estrellas, Sonreí recordando a aquella amiga que había hecho.

Larisa Perez, aquella chica que en pocos minutos se convirtió en una amiga muy importante para mi.

Las lágrimas se hicieron presente, no podía sostenerlas por mucho tiempo así que las deje salir.
Me abrace a mi misma, estaba triste.

-Larisa, me imagino que has de estar orgullosa de tu hija.

Mi voz se corto, mis sollozos eran mas sonoros ahora.
Mire al cielo, parecía como si tratara de buscar algo, mis ojos se centraron en la enorme Luna.

Esta soltaba un brillo hermoso pero al mismo tiempo raro, me sentía fuerte, segura.

-Nuestra pequeña niña se nos casa querida amiga, se cada con un buen chico te lo aseguro.

Deje salir las lágrimas de nuevo, el viento se hizo presente, pero raramente este viendo me rodeaba a mi.

Un destello de luz se poso enfrente de mi, no estaba asustada pero no podía confiar de ello, capas y algo malo sera.

Me coloque en posición de ataqué lista para lo que se aproxime, una figura se formaba dentro de aquella luz.

Centre mi vista bien, no podía creer lo que mis ojos veían.
Tenia mis ojos como platos, retrocedí un poco dejándome caer en el suelo, mi sorpresa fue demasiada grande.

Mi cuerpo temblaba, estaba nerviosa, levante mi mano señalándole, pero esta dejaba ve mi nerviosismo, pues no dejaba de temblar.

-¿Larisa?, ¿de verdad eres tu? *estaba muy confundida*

-Así es amiga, soy yo, estoy aquí. *me levante y camine hacia ella*

-¿Pero como? *la tome de la mano, se sentía tan real*

-Tu querida abuela me permitió bajar por única ocasión ala tierra, tenia ganas de hablar contigo. *Sonreí como tonta, agradecí internamente a mi querida Abuela*

-¿Y de que quieres hablar amiga? *nos sentamos en un tronco*

-De nuestra pequeña niña. *ella me miro*

-Me escuchaste..... *afirme a mi misma, ella asintió, estaba feliz de que me aya escuchado*

-He escuchado todos desde siempre asta ahora.

-Oh....

-he visto que se casara con un tal Paul Lahote.

-Asi es, es un buen chico, se que la ama y la cuidará muy bien o si no ya sabe lo que le puede pasar. *dije Con una voz seria, nos miramos y reímos*

-No has cambiado nada.

-Y no lo are. *Soltamos varias carcajadas, ese momento nunca lo olvidare*

-Me alegra saber que la deje en buenas manos, que la deje con la persona que la que llegue a confiar mas.

-Sabes que la protegeré mas que a mi propia vida, además tiene a muchas personas al su alrededor que la cuidan  y quieren mucho. *dije refiriéndome a los Cuellen y los de la manada*