Capitulo 1

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El pueblo era bastante bonito, con arboles grandes de copas verdes y anchos troncos, sus caminos rodeados de hierba y el aire puro circulando. Muchachos andando en bicicleta, subiendo pendientes y niños escalando ramas, pequeñas mujercitas en vestidos jugando a la hora del té con muñecos en una pequeña carriola.

Todo era tranquilo, en paz. Los pocos autos que alcanzaba a escuchar ni siquiera eran molestos, en cambio colaboraban a la extraña melodía de Holmes Chapel.

Eso era justo lo que Louis necesitaba, una vida tranquila. Después de haber vivido los dos últimos años en Nueva York, lo que más necesitaba era un lugar tranquilo y al parecer, había llegado al lugar  correcto.

Su auto botaba por las piedras del camino, su cabeza comenzaba a doler, había visitado a su madre en Doncaster antes de llegar a su nuevo hogar y entre los gritos de las chicas y llantos de bebé, su cabeza estaba a punto de explotar.

Si todo iba como él quería Louis compraría una casa en ese lugar para quedarse a vivir por siempre, o al menos por unos cuantos buenos años. Era algo así como un nómada, no se quedaba muchos años en el mismo lugar pero estaba cansado, cansado de las mudanzas, de hacer nuevos amigos y despedirse cuando sentía que ya no encajaba en ese lugar. Por eso se había decidido a asentarse en un lugar, y quería hacerlo cerca de su lugar de nacimiento, quería estar cerca de su madre –aunque no tan cerca, siempre es bueno un poco de privacidad- por lo que con ayuda de su madre y un viejo amigo, Stan, habían buscado algún pequeño pueblo.

La primera vez que había ido a Holmes Chapel había sido muchos años atrás, a visitar a una vieja tía abuela, siendo un adolescente había quedado encantado con el pueblecillo, con sus caminos empedrados y sus casitas con fachadas bonitas –un pensamiento un poco gay a decir verdad- por lo que ese lugar parecía el mejor para quedarse.

Había ido un par de semanas atrás, buscando una casa disponible, su abuelo había  muerto pocos años  atrás y Louis al ser su nieto consentido –y el único varón- heredo una pequeña herencia, aunque lo suficientemente grande como para comprar una casa y vivir cómodamente algunos años. La única condición de su abuelo había sido que ese dinero le fuera entregado cuando cumpliera los 25 años pues a esa edad esperaba que hubiera madurado y empleara en dinero en algo importante –como su casa- Y así fue, Louis cumplió 25 hace dos meses por lo que el dinero ya estaba a su alcance, aun tenía que hacer algo de papeleo por lo que no podía gastarlo, aún.

Miro unas cuantas casas y quedo enamorado de una en particular, había dado un pequeño adelanto con el dinero ahorrado por el mismo y la casa era –casi- suya. Pero él no podía esperar para vivir en Holmes Chapel, por lo que busco algún cuarto en renta.

Fue demasiado afortunado al encontrarse con una señora en el supermercado cuando hablaba con Stan del tema. La mujer se presento como Jenna y les dijo que su hijo acababa de irse a la universidad por lo que tenía un cuarto disponible. Se citaron en un café unas horas después y cerraron el trato. Louis se quedaría algunas semanas mientras le era entregado su dinero y pudiera pagar la casa.

Así que ese era Louis Tomlinson, un hombre de 25 años conduciendo por calles angostas mientras encontraba el que sería su nuevo hogar –temporal-.

Llego a la casa de la señora Jenna, era bastante grande y comprendía un poco a la mujer, ella sola con su marido en esa casa se hubiera vuelto un poco loca, Louis le daría un poco de frescura y juventud al hogar en lo que su hijo acababa la universidad y decidía que hacía con su vida. “Solo es temporal” pensó “Después vendrá otro chico a hacerles compañía

Bajó del auto y la Señora Jenna salió de su casa a recibirlo.

-Veo que has llegado Louis- habló la mujer, su cabello castaño contrarrestaba con sus ojos grises. “Debió ser una mujer muy guapa cuando estaba joven” pensó

Community Work. Larry Stylinson, FanficDonde viven las historias. Descúbrelo ahora