Me dijeron ➳ TruTen

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❥Capítulo narrado brevemente.

"Patético y estúpido enamorado"  Por supuesto que era dramático y eso no era algo que le encantará en su mayor resplandor. Había pasado casi una semana en donde su supuesto novio no le dirigía la palabra, ¿Acaso el había hecho mal? Ya ni siquiera lo sabía.

Esa tarde, nuevamente guardo sus cosas al último timbrido que dio la campana, las clases habían sido pesadas, sin embargo mentiría si dijera que había puesto atención en todas. Aún seguía sin poder creerlo.

Generalmente cuando una chica hace un drama del tercer mundo el hombre va, como si hubiese tenido la culpa, a pedir perdón, ¿Por qué trunks era diferente? Dio un frustrado suspiro y se limitó a dejar de pensar en cosas que no lo harían llegar a nada y solo lo deprimirian más de lo que ya estaba.

Sólo quería llegar a su casa, hacer como si todo estuviese bien y encerrarse en su cuarto todo el día que restaba. Ya pasando la puerta de su salón de clases, cuando escucho ser nombrado por una voz algo dulce no pudo hacer más dar media vuelta para ver de quien se trataba.

Era pequeña, rubia y sus mejillas sutilmente estaban algo coloradas, tierna era la palabra que mejor la definía en ese momento. Él sonrió amablemente tratando de darle algo de seguridad para que hablará.

—¿Pasa algo?—Preguntó apenas vio como esta se acercaba un poco más a su cuerpo, sintió un escalofrío recorrer su espalda el sentir como era abrazado dulcemente por esa chica.—¿E-eh?—Mentiría si dijera que podría pronunciar alguna palabra coherente y también que, a pensar de todo, observar como el de cabellos lilas miraba con un poco de confusión y enojo la escena no lo había hecho sentir tan bien.

Pero aún así, su pareja fuera un idiota él no era de esa manera, y a pesar de que disfrutaba con desdén esa pequeña escena que se había dado, no queria que nada fuera malinterpretado.

—Perdón—hablo al instante después de tomarla de los hombros  y separarla—No se quien eres, y que haces.

Esa tarde supo dos cosas; esa chica no hablaba mucho y sus ojos podían llegar a brillar tanto como unos diamantes  y la otra, su novio si era celoso.

—¡No tenías por su tratarla así!—Espeto con algo de enojo fingido, el hecho de que su novio tratará a esa pequeña chica como un bicho venenoso le hacía gracia, más no lo demostraría. Habían pasado apenas unas horas desde lo sucedido.

—¡Te estaba abrazando Goten! Siquiera yo he podido hacerlo en estos días ¿Por qué ella tendría el derecho de hacerlo?—El nombrado se quedo en silencio tratando de comprender las palabras de su pareja y dio un suspiro lleno de cansancio.

—Tu no me buscaste y no me has hablado en dos semanas, ¿En verdad crees que aún tengas el derecho de abrazarme? ¿Aún crees que tienes algún derecho sobre mi?—el azabache observo como el de hebras lilas trato de responder a aquello, más guardo silencio. Quizás aquella conversación ya había quedado concluida.

—Lo siento. Lo siento por ser un mal novio y amigo, ahora se lo que sentiste cuando me viste abrazar a mai; prometo que trataré de no hacerte sentir así de nuevo, aún así eso implique dejar el football de lado.

Goten bajo la cabeza y sonrió levemente, desde hace bastante tiempo quiso escuchar esas palabras, se acercó a Trunks y en un rápido movimiento lo tomo entre sus brazos, lo extrañaba demasiado, su cálido pecho, sus grandes brazos que en cada contacto le hacía sentía su piel quemar, su aroma; todo.

—No tienes porque dejar el football por mi culpa, si es algo que te gusta esta bien, no me molesta. Solo... Prometamos que no pelearmos más por cosas tan estúpidas como estas.

—Lo prometo.

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—Buena actuación Maron, gracias.

—No creas que lo hice por ti, Goten. El dinero es dinero.

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Sólo me queda decir, gracias por leer mi historia 💓.