Historias cortas de terror ➸ BTS ❪✓❫

El invitado

[Leer en fondo negro]

Desde el momento en el que Taehyung entró a la casa se sintió observado por alguien, pero él sabía que esto era ridículo; pues Hoseok había muerto un día antes y no tenía ni familia, ni amigos en ese lugar.

Sin dar más importancia a esto, Taehyung comenzó a recorrer la vieja casa de un lado a otro.

Pero al hacerlo, poco a poco esa extraña sensación fue aumentando.

Esto lo hizo pensar por un momento que quienes lo observaban, no eran otros, sino las personas retratadas en los cuadros que colgaban de las paredes. 

Sin embargo, Taehyung creyó que eran solamente sus nervios los que lo habían traicionado nuevamente, así que no dudó en seguir con su camino en medio de las miradas tétricas y vacías de aquellas pinturas.

Tras apenas unos minutos de haber entrado a la casa, Taehyung encontró una puerta cerrada con llave. Pensando en ese momento que más allá de la puerta tenía que estar lo que él buscaba, Taehyung forzó la cerradura de la misma forma en la que lo había hecho con la puerta de la entrada.

Después de abrir la puerta Taehyung entró al cuarto e inmediatamente su atención se posó en un altar sobre el cual estaban un par de velas aún encendidas y otra pintura más.

Al ver a Hoseok en el cuadro, un escalofrío recorrió el cuerpo de Taehyung,pues en ella, Hoseok tenía una apariencia horrible y distorsionada, de cierta forma diabólica.

Como si se tratará de un demonio el que se encontraba dentro de la pintura.

Hasta ese momento Taehyung nunca había hecho caso a todos los que decían, que por las noches, al pasar cerca de aquella casa maldita, se podía escuchar como el siniestro Hoseok platicaba con alguien desconocido.

Alguien que en lugar de voz emitía un horrible y atroz sonido, que al parecer, alegraba a Hoseok de alma negra únicamente con oírla.

A Taehyung jamás le importaron estas historias, a él solamente le importaba una cosa de Hoseok, su dinero.

Pensando en esto, Taehyung súbitamente sintió que había alguien atrás de él, y de inmediato su sangre se volvió tan fría como el hielo, a causa del horror de lo que esto significaba.

Todos aseguran que en la misma noche en la que Taehyung desapareció para siempre de este mundo, se escuchó una vez más la macabra risa de Hoseok.

Es por esto que nunca nadie pasó otra vez cerca de la casa de Hoseok. Pues además de haber muerto una noche antes; todos sabían que el único capaz de hacer reír al maldito de Hoseok, no era otro más que el demonio mismo.