Capitulo Único

931 90 14
                                    

꧁꧂


Las manos de Jimin acariciaban el suave cuero que cubría el volante delante de él. El sonido del motor lo sentía en sus piernas y el retumbar de las bocinas sin duda removía todo su interior.

El aire que entraba por las ventanas movía seximente sus cabellos negros que, rebeldemente parecían bailar una ardiente melodía. El sol traspasaba el cristal delantero, pero los Wayfarer Classic cubrían sus ojos perfectamente impidiendo que aquella luz solar lastimara sus profundos ojos negros.

El pie derecho se amoldaba perfectamente en el pedal negro que tocaba sus Adidas blancos, el vaquero negro impedía que el calor del asiento se traspasara a su piel y la camisa Gucci con estampado de flores azul petróleo permitía el acceso del aire que recorría sin duda su esbelto pero formado cuerpo.

Wolves de Selena Gómez se reproducía a todo volumen en su pantalla, y la música iba acorde a su dulce voz. La mano izquierda donde poseía un reloj Casio negro marcaba las 17:35 p.m., pero esta iba perfectamente acomodada fuera del ventanal izquierdo, la mano derecha seguía sobre el volante.

Iba un poco tarde a la reunión que se llevaría a cabo con sus amigos, debía haber salido de su casa desde hace unas horas, pero si era sincero esa noche se la paso insultando a su conquista de aquel día. El tipo había sido un fanfarrón, si no mal recuerda era francés. Iug, no se volvería a meter con los franceses.

Jimin quería algo más, algo más que un simple calentón de una noche. Su mejor amigo YoonGi le decía que era una puta necesitada por sexo, puede que esas fueran sus palabras dulces salidas de la boquita de Min, pero la verdad era que si cada noche buscaba a alguien era porque realmente estaba desesperado por amor. No era una puta, o quizá un poco... ¿Ligar con casi medio mundo era ser puta? La respuesta era no, solo era hablar cariñosamente con todos esos hombres, pero si era sincero nadie, NADIE –excepto quizá TaeHyung-, había profanado su cuerpo de una manera que le habría dejado desear más.

Se aburría a mitad de la conversación, o simplemente le cansaba la actitud de todos aquellos que intentaban llevarlo a la cama. Él quería conocer a alguien realmente, enamorarse profundamente y luego entregarle todo lo que sabía que poseía.

Por consejos de su, otro mejor amigo, Taemin, decidió tomar clases de defensa personal por seguridad, puede que por fuera pareciera lindo pero por dentro... bueno, no cree que enojado quisieran conocerlo.

La música paro abruptamente, indicando que recibía una llamada, en la pantalla podía leer el nombre del novio de su primer mejor amigo y su amigo de la infancia, TaeHyung.

En el tablero del volante presiono el botón verde y la música de llamada entrante dejo de sonar, ahora solo escucho el grito de Kim.

"¡Jimin-ie! ¿Te has perdido? ¿Por qué no llegas?"

De fondo se escuchaba la estruendosa música, seguramente el punto crítico de la fiesta había empezado demasiado temprano.

-Estoy a una hora, TaeHyung-ie, me quede dormido. –exclamo un poco alto, el aire no ayudaba mucho.

"Oh, entonces le diré eso a NamJoon Hyung." –escucho un "Dice que ya viene" a lo lejos, y pensó que se lo había dicho.

-Llegare en menos tiempo, dile a Taemin que me espere, que ni piense en comerse mis alitas.

Escucho un breve silencio.

-¿Ya se las comió? –pregunto algo exaltado.

"N-no, no no..."

Pero era todo lo contrario, y por alguna razón Jimin ya ni siquiera se enojaba por aquello.

"Jimin, mi deber como tu hermano nacido de otra madre es decirte lo siguiente: el estúpido de Chen esta aquí, también Jackson y Zico"

penalty 국민 kookminDonde viven las historias. Descúbrelo ahora