Yo no te amo, princesa.

15.

Narra Noah.

Suspiré profundo y me acerqué a Viv. Ella estaba sentada en el banco del centro del parque, donde yo le había propuesto de ser mi novia semanas atrás. Se mordía el labio, mientras golpeteaba el césped con su pie, nerviosa. Su pelo rubio lo tenía recogido y no paraba de mirar el celular. Cuando vió que yo me acercaba a ella, hizo un intento de sonrisa. Me senté a su lado, y abrí la boca para empezar a hablar.

—Viv... lo siento muchísimo, y lo sabes. -dije, mirándola, apenado-. Sabes que yo no la quería besar, fue ella la que irrumpió en mi casa. Ni siquiera sabía que iba a venir... yo te quiero, y necesito estar contigo...

—No... espera, Noah. -dijo, negando con la cabeza-. No... no puedo seguir estando contigo, nuestra relación tiene que cortar, y lo sabes. Ella te ama, viajó hasta aquí por ti... y se que en el fondo... tu también la amas. Vi como la mirabas, tu cara de asombro y felicidad por aquel beso. Sé... sé que me quieres, como yo te quiero a ti, pero no puedo estar contigo, sabiendo que quieres estar con ella, Noah. No quiero sufrir, ¿si?

—Es que... yo te quiero, Viv. -dije, mirándola a los ojos-. Quiero estar contigo pero...

—Pero quieres estar con ella. -me interrumpió-. Claro que quieres. Y eso, no me molesta... bueno, si, pero si eres feliz... yo soy feliz.

—Te mereces a alguien mucho mejor que a mi. -sentencié-. Mereces a un chico que te haga feliz, como yo no pude. Y Viv... siempre me tendrás, cuando necesites algo.

—Gracias, Noah. -me dijo-. Tú también mereces ser feliz, y lo sabes.

Luego de decirme aquellas palabras, se fue. Lágrimas comenzaron a caer por mis mejillas. Yo quería a Viv, y ella me acababa de romper el corazón. Dolía saber que ella tenía razón, y no sabía que hacer.