Altercation

cap9

Aunque la cama en la que Kyungsoo despertó es mucho más cómoda a la que está acostumbrado, todavía hay algo que se siente diferente, mal. Se estira -todavía demasiado cansado para abrir los ojos y se da cuenta que puede estirarse perfectamente. Algo ha pasado. Se frota los ojos y trata de hacer que estos se abran pesadamente, encontrándose solo en la habitación de Jongin. Nunca lo admitiría, a nadie, pero de repente se siente muy decepcionado por alguna razón. Le encanta despertar con él a su lado. El niño echa un vistazo al reloj y ve que ya son las 2pm. Como si algo estuviera ardiendo, cae de la cama dando silbidos por el dolor que siente en la espalda baja, y se tambalea un poco. Nunca pensó dormir casi hasta medio día. Mierda.

Jongin entra en la habitación con su rostro asustado y sostiene al chico mayor por la cintura. Se pregunta qué pasó porque oyó los tropiezos y pensó que algo malo ocurrió. Kyungsoo ignora sus preguntas a propósito y lo empuja tan lejos que golpea la pared sacándole un gemido lleno de dolor. Se lanza hacia delante y pone su mano alrededor del cuello de Jongin en un agarre firme, tira de él para darle un beso ardiente y descuidado.

"No me dejes." Susurra, asegura que suene como una amenaza, aunque en realidad es una súplica. Nunca admitiría cuánto le gusta Jongin, especialmente no precisamente en su cara porque probablemente nunca lo mencionaría así. El muchacho joven sonríe en el beso.

"Sólo fui a hacernos desay-...almuerzo..." Responde, como si se estuviera defendiendo. "Ahora date prisa, baja tu lindo trasero y no perdamos el resto del día. Estoy tomando a mi novio el resto del día. "

"Oh, ¿Entonces quieres que me vaya? Así no te interrumpiré." Kyungsoo bromeó y el menor mordió su labio inferior, casi lo suficiente para hacerlo sangrar. Suspiró profundamente y se alejó.

Jongin lo esperó en la cocina, y cuando entró, simplemente sabía que tomó la mejor decisión en elegirlo como novio. La forma en que su cabello estaba todavía húmedo y brillante por la ducha, su camisa prestada era un poco demasiado grande para el pequeño chico y la forma en que los vaqueros colgaban perfectamente de esas deliciosas caderas, hicieron que deje escapar un gemido, uno que no se supone debía ser escuchado, pero lo fue.

"¿Qué?" Kyungsoo preguntó con su habitual actitud de que-es-lo-que-quieres.

Te amo.

Me encanta la forma en que siempre me hablas como si estuvieras en una pelea conmigo.

Me encanta la forma de cómo te vez cuando simplemente acabas de salir de la ducha.

Me encanta el tono rosa de tus labios.

Me encanta lo suave de tu piel lechosa.

Me encanta cómo te ves bien con cualquier cosa que usas.

Me encanta cómo esos moretones te hacen ver un centenar de veces más caliente.

Me encanta tu actitud.

Me encanta tu mirada burlona.

Me encanta como siempre tu mirada parece decirme Quiero golpear tu cara y al mismo tiempo dice déjame chuparte la polla.

Me encanta que seas mío.

"Nada, vamos a comer." Jongin evita el tema.

"¿Dónde están tus padres?"

"En el trabajo, obviamente."

"Oh."

"Ellos van a otro viaje de negocios por cierto. Dijeron que va a ser el último en mucho tiempo." Jongin sonríe a sí mismo, no le gusta que sus padres estén demasiado lejos.