Golden Cage

La melodia de un ave cautiva es un llanto inconsolable

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- la ominosa e imponente figura de un hombre ensombrerado
se hacia notar a través de la muchedumbre agetreada e incipiente de la gran ciudad gracias a su gran altura, esa larga gabardina invernal color negro que fortalecia su aspecto lugubre y peligroso; un alfa que a todas luces era de temer.
Pero el sujeto no buscaba problemas a pesar de esa expresion fastidiada y desdeñoza.
El monopolio familiar habia pasado en herencia a su posesion dejandolo con una riqueza bastante envidiable hasta para las castas mas pudientes de otras especies mas comunes, pero con el doloroso y amargo precio de pasar largos e insufribles ratos en la soledad de su caserio sin hacer otra cosa que trabajar, sellar, firmar y leer complicados e inutiles documentos de rebuscada burocracia que le hacian querer colgarse de la corbata al techo. Estaba absurdamente aburrido de su rutina, toda su familia era un nido de vivoras (literalmente) y no deseaba tener que ver con ellos jamas. Se podria decir que fue sentenciado a la miseria con aquella firma millonaria (vaya ironia).

Tan solo habia tenido la oportunidad de escapar a sus deberes y decidió darse un paseo liberador antes de darse por vencido. No tenia intencion de salir al exterior, era realmente uraño pero era mejor que nada.
De forma inconciente sus pasos lo habian llevado a la zona comercial mas grande de la ciudad donde se daria cuenta que estaba de pie fuera de una "pet shop" y era inevitable mirar dentro a traves de esos altos e iluminados ventanales. Habia especies en venta mas pequeñas e "inferiores" que servian de juguete o servidumbre a sus contrapartes dominantes y mas salvajes: gatitos, conejos, hamsters, ardillas, chinchillas y aves. Todos los especimenes eran omegas de ambos sexos exhibidos en vitrinas que contenian hasta 6 individuos en cada cubiculo. Se mantenian agolpados sobre si mismos con miradas tristes y temerosas tan solo esperando ser vendidas a su infortunado y triste destino en la esclavitud. Entonces la idea vino a su mente de forma igualmente inevitable "comprar uno de esos".
Tenia el dinero y estaba lo bastante aburrido para siquiera tolerar la respiracion de otro ser vivo en su misma casa, ademas en su familia habia habido sirvientes como esos que terminaban "rompiendose" despues de unos cuantos meses, nunca duraban demasiado asi que despues de aburrirse seria facir desecharlo.
Entró en la tienda muy precavidamente sabiendo que en cuanto cruzara a los pasillos recibiria muchas miradas retadoras pues el lugar estaba plagado de otros alfas que buscaban satisfacer sus "antojos". Pero nadie se atrevió a sostenerle la mirada por mas de un segundo, su esencia era venenosa y daba entender lo letal que podia llegar a ser un solo intercambio de puños con él.
Black Hat se dirigió a las "jaulas" examinando con aburrición cada individuo de cada especie sin encontrar verdadero atractivo en ninguno de ellos y mas que eso podia pensar en mas de una desventaja al obtenerlos.
Detestaba los gatos, sueltan mucho cabello y abusan de la confianza de sus amos con rapidez al igual que un zorro, además que necesitan mucho alimento. Un conejo es limpio y estilizado, siempre atento y animado pero tan callado y nervioso que podria matarlo con solo quedarsele viendo por un momento, ademas que no podian quedarse quietos sin ponerse a correr por ahi. De ahi lo mismo con los de mas roedores, hasta que ya sin muchas esperanzas de llevarse algo de la tienda terminó en la jaula de las aves.

Muy buen dia Sr. Lo e visto un tanto indeciso por la tienda, que le pareceria una bonita ninfa? - ofreció un joven beta empleado del lugar.
Por obvias razones, era obligatorio que todos los empleados fuesen betas inmunes a las feromonas de la "mercancia"-

Una ninfa.. - Black Hat no recordaba saber algo aserca de esa especie pero le recordaba a otra muy parecida-

Si! Es una mutacion estilisada de las arpias primitivas, son aves de ornato con la cualidad del canto, tienen manos funcionales pero pueden volar, claro si se lo permite. Son muy dociles y no tienen garras peligrosas a diferencia de sus parientes actuales - explicó con un tono y sonrisa agradable omitiendo el hecho de que estos estaban bastante atemorizados del alfa y se reducian a una esquina evitando su mirada, cubriendose con las alas y temblando en sus patitas-