Destino Opuesto [OneShort]

Destino Opuesto

           

—      V... Victor—susurró.

Ambos en perfecta sincronización pegaron sus frentes, el aire frio, que solo el invierno nos podía regalar se mezclaba con los autores de la bella escena.

Victor acunó las mejillas del chico, este ultimo cerró los ojos tratando de grabar en su memoria el tacto delicado y la calidez que el ruso le regalaba en ese instante. Oh, como amaba a Victor.

Yuuri muy en el fondo quería irse, comenzaba a sentir ansiedad por saber si aquel número aparecería en su muñeca, justo al lado de sus dos dígitos.

—     ¿Tienes miedo? —preguntó Victor.

—     Si no aparece yo...

—     Lo hará— interrumpió el otro.

Con delicadeza y paciencia Victor se fue acercando al menor, no había prisa, deseaban disfrutar el momento, su primer beso debía ser puro y sincero, para que ninguno lo olvidara, para que en los días venideros la sensación, amor y todos los factores se reprodujeran en su memoria.

Ambos labios se encontraron, la calidez de aquellos dos ahora se mezclaba, no llevaban prisa, sin embargo, había pasión y amor. Amor de dos novatos amantes probando las delicias y placeres que esta te puede regalar. Un acto simple como un beso transmitiendo sensaciones inimaginables.

Con mucho esfuerzo se separaron, se miraron, azul y café. Yuuri tomó con desesperación la muñeca de Victor, si era su destinado el número del ruso aparecería en la muñeca de Yuuri junto al suyo.

—     No importa, si no aparece no importa, te amo y no dejare de hacerlo...— dijo Victor con nostalgia pintada en su voz.

Yuuri suspiro y volteo la muñeca, ahí estaba el número veinticuatro el número de Victor, más no el del japonés. El menor no pudo evitar que las lagrimas se acumularan en sus bellos ojos cafés, miró ahora, su muñeca, nada, el número quince estaba solo.

—     No, no, no puede ser...—pronunció.

—     Yuuri cariño, no tiene importancia, nosotros...

—     ¡La hay! Esto quiere decir que...— el tan solo pensarlo, hizo que a Yuuri se le quebrara la voz—, en alguna parte esta aquella persona que encaja perfectamente contigo.

—     ¡No! Tú, eres tú. — Victor con desesperación lo abrazó.

—     Victor lo lamento, lamento no ser suficiente para ti—lloró

—     No nos lastimes así cariño, no lo hagas.

Victor le dio un beso en la frente, atesorándolo, sintiendo el dolor de su amante, tenía miedo, sentía tanto temor de perderlo, porque Yuuri era muy frágil y estaba seguro de que, si no le transmitía seguridad, Yuuri mandaría todo al carajo por su terrible inseguridad. Pero no lo culpaba, lo entendía.

—     Todo estará bien—dijo Victor.

—     No nos mintamos Victor ¿sabes cuantas parejas han intentado quedarse con la persona que se supone que aman?

—     Somos diferentes, te amo con locura.

—     Cuando tu persona y mi persona aparezcan no pensaras así— Yuuri acarició su muñeca donde se encontraba su número— debes ser feliz, no quiero que duela más— Yuuri acaricio la mejilla del ruso— Lo siento, terminemos con esta mentira.

—     Yuuri, por favor, no... no te dejare ir, el destino esta celoso de nosotros, solo déjame amarte.

El japonés miró a Victor con ojos llorosos, esta vez fue el quien se acercó, para volver a unir ambos labios, esta vez se sentía amargo y doloroso. Ambos sabían que aquel beso, era una trágica despedida.

—     Gracias— pronunció Yuuri.

Suspiró hondo y con las fuerzas que reunió en el ultimo beso, se dio media vuelta y comenzó a caminar, alejándose de la persona que le había enseñado el significado del amor, de aquel ser que le amo, sin prejuicios y sin pedirle nada a cambio.

Victor no entendió como en aquella noche no detuvo a Yuuri.

Yuuri no entendió como en aquella noche no lucho en contra del destino, por el amor de Victor.

El cómo había sido creados y el cómo deberían encontrar a la persona indicada resultaba tan cruel hasta para el mismo creador.