Parte 15

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15. FUTILE DEVICES

"And when I sleep on your couch

I feel very safe

And when you bring the blankets

I cover up my face

I do love you"

Futile Devices. Sufjan Stevens.

Raoul

Llegué a Oslo el dieciocho por la tarde noche, bastante cansado e increíblemente hambriento. Isak y Even habían venido a buscarme al aeropuerto y me estaban esperando en una cafetería tomando algo. Cuando se levantaron a abrazarme, me sentí un poco ridículo, parecía un puto enano en comparación con esos dos. Si Ago hubiera estado conmigo seguro que ya se estaría riendo y llamándome ser de luz pequeñito, bebe de tres años o esas gilipolleces que tanta gracia le hacían.

"Ojalá estuviera aquí burlándose de mí".

Deseché el pensamiento rápidamente. Iba a pasar un mes separado de él y no podía estar llorando su ausencia cada segundo. Les dí un abrazo y nos sentamos en la mesa que tenían ocupada. Estuvimos charlando unos minutos de que tal estábamos cada uno y al rato tuve que preguntar.

- Chicos, ¿perdonad pero habéis cenado? Voy a desfallecer de un momento a otro.

- Sí, nosotros solemos cenar a las 6, ¿quieres comer aquí o te preparo algo en casa?- Contestó Even.

- No te preocupes, miro a ver que hay - Me levanté y fui a la barra a comprobar si efectivamente había algo comestible. Escogí un par de sándwich y una coca cola y esperé mientras me los calentaban. Eché un vistazo alrededor del establecimiento, siempre me habían encantado los aeropuertos internacionales, con todo el bullicio de gente, cada uno de un país, confluyendo en un mismo lugar. Me fijé en mis dos anfitriones, que se hacían arrumacos en medio de la cafetería con toda naturalidad. Miré al resto de clientes y vi que nadie reparaba en ellos. Cuando me acerqué de nuevo con la comida, se separaron, pero mantuvieron sus manos entrelazadas.

- Perdona,-dijo Even disculpándose- Isak estaba agradeciéndome que le trajera a buscarte.

Sonreí por el comentario.

- ¿No podía venir él solo?

- Qué va, no tiene el carné, le da un miedo horrible conducir. - Isak se sonrojó y apartó la mano.

- ¡Ya estás haciéndome quedar en ridículo! - El más alto tiró de él y le dio un sonoro beso en la mejilla a modo de disculpa y se rio. Se notaba a la legua lo mucho que se querían y se cuidaban.

Di un mordisco al bocadillo observándoles mientras masticaba.

- ¿Cuánto hace que estáis juntos vosotros dos?

- Pues el día 8 hizo diez años.

- ¡10 años! - no me imaginaba que pudieran estar tan ñoños después de tanto tiempo.

- En realidad empezamos antes. Pero tuvimos nuestros más y nuestros menos - apuntó Isak

- Casi le vuelvo loco al pobre.- intervino Even levantando las cejas.

- Pero fue el día 8 cuando le dije que ya no estaría solo.

- Y lo cumplió. - se miraron con una intensidad que ponía de manifiesto todo el amor que se tenían y no pude evitar pensar en Agoney. Mi mayor anhelo era estar con él dentro de diez años y tener la misma complicidad que veía en los dos chicos. Esperaba fervientemente que el canario hubiera llegado a mi vida para quedarse. En ese momento pensé en qué estaría haciendo, le imaginé tumbado viendo una serie y desee estar con él. Sacudí la cabeza para salir de mi ensoñación y continuar manteniendo una conversación con los noruegos.

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