Capítulo 3

9 0 0
                                    

CAPÍTULO 3

[Narra Agustina]

La vida va ligera, a mis 15 años pesaba 168 libras. Hoy soy una mujer de 25 años estudiando Administración de Empresas especializado en Contabilidad. Mi meta como persona fue bajar de peso, recuerdo que cuando me gradúe de noveno me mude a Carolina del Norte en los Estados Unidos, no quería saber de esos compañeros inútiles. Mi mamá y yo decidimos viajar a Puerto Rico para visitar a mi abuela Marcela, la que me cuido y me aconsejo cuando apenas tenía 15 años de edad.

Agustina: Abu... Abuelaaaaa, Abuelaaaa -gritaba emocionada-

[Narra Agustina]

Gritaba emocionada, había llegado al aeropuerto internacional de Puerto Rico a eso de las 12:45 de la tarde emocionada. Solté mis molestas y corrí hacia ella regalándole un fuerte abrazó que tanto yo necesitaba.

Abuela: Mi niña -emocionada-

Agustina: Que rico es abrazarte y sentirte abuela. -con lágrimas en los ojos-

Abuela: Mi chiquita, que falta me hacías. -comienza a llorar-

Madre: Bueno, paren el llanto y para casa nos vamos. -riendo-

Abuela: Si, vamos enseguida. -limpiando su rostro-

Madre: Mami espero que un banquete nos este esperando porque con esta hambre me como una vaca. -sarcasmo-

Abuela: claro que si, cocine unas ricas pechugas, con arroz blanco y abrí huelas coloras como le gustan a mi Agustina. -con mirada tierna-

Agustina: Siempre e dicho que eres la mejor abuela. -abrazándola-

[Narra abuela]

Me sentí tan bien cuando vi a esa muchacha grande, más hermosa de lo que era corriendo hacia mi y gritando "abuela". Sólo quería abrazarla y nunca dejarla ir, hace 10 años que no sentía ese amor verdadero. Luego llegamos a casa y comenzamos a comer, a contarnos historias hasta llegar la noche.

Abuela: Estas grande, flaquita, ya no eres mi gordita favorita -melancólica- ahora eres mi flaquita preferida. Te amo como seas mi amor.

Agustina: También te amo mi vieja preferida, pues cuando cumplí mis 17 años me propuse rebajar para ponerme un vestido elegante y patear a todas esas gringas y un todos quedarán babeados por mi. -riendo a carcajadas-

Abuela: ¿Y que te motivó mi niña?

Agustina: Me motivó todas esas personas que me apoyaban, esas que me rechazaban y mi salud abuela.

--FLASHBACK--

Agustina: Abuela...¿Tu me amas?

Abuela: claro mi corazón, ¿por qué preguntas eso?

Agustina: yo soy una cerdita abuela, soy fea, y nadie me va a querer así.

Abuela: No eres una cerdita, porque no eres un animal, no eres fea, Dios no hace porquerías. Y las personas te van a querer o amar como eres, o como seas en un futuro. Mi amor escúchame muy bien, tu serás como eres, si eres gordita, o flaquita no es para agradarle a alguien, sino para agradarte a ti misma. Si tu te sientes feliz así, se feliz, sino trabaja con una buena alimentación y un poco de ejercicio y siéntete feliz. LA BELLEZA FÍSICA DESAPARECE, LA INTERIOR PREVALECE. -término diciendo y recalcando-

Agustina: -descontrolada con las palabras de mi abuela le dije:- Gracias Abuela, eres la mejor. -abrazando me fuertemente-

--Termina FLASHBACK--

Abuela: Así es mi niña, pero lo más importante, ¿Qué es?

Agustina: Sentirme feliz. -sonríe-

Madre: Bueno, coman que los mareos no avisan. -comienzan a reírse-

Agustina: Abuela hágale caso a la Jefa. -riendo a carcajadas-

[NARRADOR]

Terminan de contar sus historias, y luego se van a dormir.

La otra mujerDonde viven las historias. Descúbrelo ahora