Capitulo 11

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-Tranquila pequeña que ya casi llegamos. - dijo y dió la vuelta en una calle de terraceria.

¡Alex va a pagar por esto!

Casi de inmediato el bosque que rodeaba la carrtera se fué dispersando y los árboles empezaron a rodear un lago.

El agua del lago era limpia y cristalina; y a las orrilas de este, se ocultaban entre los árboles unas casas enormes y hermosas.

Alex estacionó el coche en una casa blanca con varios ventanales que tenían una vista al lago.

Yo todavía no salía de mi asombro cuando Alex dijo:

-¿Qué tal pequeña? ¿Te gusta?
-¡Vas a pagar por esto maldito!- dije pero no pude contener la risa.- ¡Me encanta! ¡Gracias!

Lo abrazé y me besó.

-Todavía no terminan las sorpresas.- dijo con voz pícara y me volvió a besar. Pero esta vez el beso fué más una invitación seductora. Lo aparté de mi.
- ¡No espera!.- dije
-¿Qué pasa? ¿Hice algo mal?
- No, no. Tranquilo.... Es solo que si empiezó no se si sea capáz de controlarme para no termimar.- sonrió
- ¿Ahora me arremedas?
-Tus palabras. No las mías.- reimos.- Pero Alex...
-¿Qué pasa pequeña?
-No esperes que te deje pagar la renta de la casa por ti solo.
- Muy tarde pequeña. Lo tengo todo resuelto.- dijo y me vió a los ojos diciendome "Gané". Maldito.
- No creas que por pagarme todo esto ya ganasté.- dije sensualmente.
- Demuestrame que estoy mal.

Lo emepecé a besar intensamente, más bien lo mordía. Colocó sus manos sobre mi cintura y lentamente las fué bajando.

Me pasé sin dejarlo de besar al lado del conductor y Alex abrió la puerta. Acomodó mis piernas alrededor de su cintura y bajamos del coche.

Mientras caminabamos hacia la entrada y sin dejarlo de besar tomé su playera y la empecé a subir.

-Deja que entremos a la casa mínimo.- dijo y abrió la puerta. De una pata da la cerré.

Me bajé de él e inmediatamente le quite la playera. No era la primera vez que lo veí sin camisa, pero si era la primera vez que lo podía tocar todo para disfrutarlo.

Alex pasó sus manos por debajo de mi playera y yo me la quité.

De un brinco me subí en él y lo seguí besando. Le jugueteaba el pelo y pasaba mis manos por su espalda mientras él subía las escaleras para subir, a lo que me imagino que es un cuarto.

Se sentó en el borde de la cama y yo poco a poco fuí bajando haciendo que se recostara para así poder besarle el pecho.

Él empezó a pasar sus manos por mi espalda, una petición silenciosa.

Y así seguimos. Prenda por prenda. Beso por beso. Disfrutando al máximo el uno del otro.

Hasta que finalmemte pasó lo que tenía que pasar.

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⏰ Última actualización: Jul 05, 2018 ⏰

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