▪ 2 ▪

56 9 7
                                    

Pov Minhyuk.

Otro día con la misma rutina de siempre, por suerte, mi turno ya había terminado, estaba contento como cualquier otra persona, pero a su vez decepcionado, tenía la pequeña esperanza de que el chico de la otra vez volviese a venir. Tomé mi chaqueta y me dirigí a la puerta del local, pero antes de que pudiese tocarla, la campanita sonó indicando que alguien estaba entrando; y ahí estabas, tan bello como la primera vez. Tu cuerpo se deslizó suavemente entre el marco de madera y la puerta, acompañado de una suave brisa que movía tu largo cabello marrón; tu piel se veía mas blanca que la otra vez, quizás por la falta de sol, ya que últimamente estuvo nublado. Estabas vestido sencillamente con un jean negro y un suéter un poco largo color crema, que por cierto te quedaba hermoso.

- Volviste... - sonreí al verte - ¿Puedo invitarte un café?

Asentiste con tu cabeza y fuimos a sentarnos en una mesa. Estábamos frente a frente, podía ver con más perfección los delicados detalles en tu rostro al igual que cada uno de tus gestos al leer el menú. Mordías tu labio y fruncías el ceño como si no supieras qué elegir.

- ¿No sabes qué tomar? Puedo recomendarte un latte macchiato, es mi preferido- dije algo tímido. Bajaste delicadamente el menú y me viste a los ojos, sonreíste un poco y asentiste. Llame al camarero para ordena por ambos y luego esperamos a que los prepare.

-Hmm... creo que hasta ahora, nunca me presenté bien, soy Minhyuk, Lee Minhyuk.-

Estaba nervioso porque no contestabas, en cambio, estabas revisando tu mochila en busca de algo. Primero sacaste una pequeña libreta color celeste y luego una lapicera. Abriste la libreta en una hoja al azar y comenzaste a escribir, me sentí curioso de saber qué escribías, así que me lo mostraste.

"Hola, me llamo Yoon Jeonghan, un gusto conocerte, Minhyuk"

Una hermosa y delicada caligrafía en cursiva destacaba en la hoja de papel, simples palabras, pero no quería dejar de verlas. A pesar de eso, no entendía porqué escribiste en vez de hablarme, me sentí como un estúpido al principio, había hablado sin pensarlo dos veces.

-Bonito nombre, Jeonghan, pero una pregunta... ¿Por qué escribes en vez de hablar?- Pude notar el nerviosismo en tu rostro aunque intentabas disimularlo, tomaste nuevamente la lapicera y escribiste cuidadosamente cada palabra, tomándote tu tiempo para pensarlas. Luego, me volviste a entregar la libreta.

"A las palabras se las lleva el viento, en cambio, de esta forma puedo guardar conmigo las conversaciones que tengo con aquellas personas que me parecen interesantes y nunca quiero olvidar. ¿Y si alguna de estas personas es con quien voy a estar todo mi futuro? Me gustaría tener recuerdos de nuestras primeras conversaciones... espero que no sea algo loco"

Mi corazón estaba acelerado y mis mejillas un poco sonrojadas, hacías esto con personas que te parecían interesantes, yo te parecía interesante. Abrí mi boca para hablar, pero no lo hice; tome mi libreta y lápiz que siempre llevo conmigo para tomar las ordenes y comencé a escribir.

"Me parece algo bonito y tierno ¿Puedo unirme? ¡Tengo mi propia libreta y lápiz!"

Sonreíste, una grande y reluciente sonrisa se formó en tu rostro mientras asentías, bajaste tu mirada algo sonrojado y escribiste.

"Gracias, eres la primera persona que no me trata de loco por hacer esto."

Era la primer persona, la primera en hacerte sentir bien con algo que te gustaba hacer, quería saber mas de ti, quería saberlo todo, no quería que te sintiera menos por cosas como estas, quería hacer todo para que solo fueras feliz. Volví a tomar mi lápiz y libreta.

"¿Loco? No creo que haya alguien normal en el mundo, todos estamos un poco locos, pero ese no es motivo para sentirse mal, Jeonghan. Te tengo una propuesta, demostremoles al mundo y a los demás que no estas loco como ellos dicen ¿Quieres hacer algo conmigo mañana por la tarde?"

Lo dudaste, mirabas la nota mientras mordías tu labio inferior, cosa que noté que haces cada vez que no sabes qué responder. Tomaste tu lapicera y escribiste.

"¿Cómo una cita?"

No lo dudé, respondí de inmediato a esas dulces palabras.

"Si, como la mejor cita."

Bajaste tu rostro ocultando tus mejillas ruborizadas y guardaste tus cosas, vi la hora en el reloj de pared y me di cuenta que ya era tarde. Caminamos juntos hasta la puerta de la cafetería, ya era de noche, te miré a los ojos, aquellos que brillaban con la luz de la luna, te acercaste a mi y te despediste con un suave y tierno beso en mi mejilla. Luego, vi como te ibas corriendo sin que yo pudiese hacer algo. El mejor día de mi vida.




▪Sin Palabras▪|| Minhyuk X JeonghanDonde viven las historias. Descúbrelo ahora