La Era Dorada (Consejos De Vida)

Detrás de Seongwu

TRECE AÑOS ATRÁS:

-Hijo, realmente estoy muy orgullosa de ti, acabas de ganar el primer lugar en oratoria ¡Eso es maravilloso!-.

-Gracias mamá, no pensé ganar un premio eso fue inesperado-. Respondía el pequeño Seongwu.

-Bueno hijo, cómo felicitación por ello, ¡Te compraré un helado!-.

-¡¡Sí!! Gracias mami-.

-A ver campeón, andas celebrando y no me invitas-.

- Papi, mamá me comprará un helado-.

-Oh, qué bueno hijo, y dime ¿Por qué saliste con ese cascanueces de madera a presentarte?-.

-Fue porque fue mi primer regalo de parte de ustedes, fue bueno llevar a Gim-.

-No sabía que aún guardabas el regalo, bueno hijo, espera aquí, iré a estacionar bien el auto-.

*Dirigiéndose al auto*

-Señor Kang ¿Así qué aquí estaba?-.

-¿Quién es usted?-.

-¿Ahora te olvidas de mí? Eres un imbécil, no pagaste la deuda que nos debías, ya pasó mucho tiempo, así que sólo actuamos-.

-¿De qué hablas?-.

-Pues ¿De qué más? Te acabamos de quitar todo lo que pusiste en garantía, ahora es nuestro, pero de todas maneras eso no es suficiente así que te mataremos, maldito engendro, por cierto, el auto también será nuestro ahora-.

-No lo hagas, te pagaré, sólo déjame un tiempo más, por favor, te lo suplico, no puedo morir ahora-.

-Lo siento, así son nuestras reglas-.

...El disparo fue estruendoso, justo la bala atravesó el corazón, el día comenzaba para unos pero lamentablemente se apagaba para otros, un charco de sangre se formaba en el lugar del crimen.

-Mamá ¿Qué fue eso?-.

-Hijo, corre, corre lo más rápido que puedas, ve con tu muñeco y corre-.

-Pero mamá, mi papi, ¡¡Papá dijo que vendría!!-.

-¡Por favor!  ¡¡Sólo hazlo!!-.

El pequeño Seongwu corrió con todas sus fuerzas, mientras corría oyó un grito de su madre y más disparos, pero no podía volver atrás, así que hasta el final siguió siendo el pequeño hijo obediente de mamá.

-¿Dónde estoy? Mami, papi, llévenme también con ustedes ¿Hice algo malo? Díganme y cambiaré, incluso si no me compran helado seré feliz, ¡¡PAPÁS!!- Seongwu gritaba al cielo, estuvo caminando por horas pero nadie lo ayudaba, hasta que paró a dar a una carpa dónde fue a pedir agua-.

-Wow, es un circo, papá dijo que en cuánto pueda iríamos ¡Es tan grande!-.

-A ver niño, aquí no puedes entrar, estamos ensayando-.

-Buenas tardes señor ¿Puede darme un poco de agua?-.

-Bien niño, pero luego te vas, tenemos que ensayar-.

-Está bien-.

-Ten, toma agua- Apenas le dio agua a Seongwu este casi devora el vaso de la desesperación-.

-Señor, estoy perdido, ayúdeme por favor-.

-Ay niño, sólo soy el payaso en este circo ¿Cómo podría ayudarte? Mira ¿Quieres ver televisión? Te dejaré estar aquí por media hora ya que el jefe no está, pero no hagas bulla y ve la televisión ¿Entendido?-.