Eres digna
-¡MAIK HUYE!.-Grito Loki despavorido mientras corria hacia ella para llevarla lejos, pero, aquella gran arma, impacto su poder con el de ella y causo una gran explosión donde todo a su alrededor quedo pulverizado.-¡Loca!¡Loca!.-Gritaba al no verla por ningun lugar, pensando que ella tambien fue pulverizada.-No le cumplire a Thor si no regreso contigo, con vida.-Se tiro al suelo.-¿Como podre verlo a los ojos?...a pesar de todo, sigue siendo mi hermano...
La bestia comenzo a escarbar en un lugar en especifico.-¿Ahi esta?.-Se logro ver su energia, la cual la cubria de todo aquello que cayo sobre ella.-¡Eso bestia, sacala!.-Esta lo volteo a ver y le gruño para despues por fin sacarla.
-¡Levantate!.-Gritaba mientras la tenia en brazos.
-Callate de una vez.-Constesto mareada ya que el choque de fuerzas la dejo desconcertada y con dolor de cabeza. Miro sus heridas y noto como estas no sanaba como regularmente lo hacian, eran grandes y dolian, algo poco usual.-Debemos regresar. Vendran mas de esas cosas y no estoy en buenas ondiciones para luchar. No se que tienen esas armas pero he dejado de regenerarme...-Se levanto del suelo con esfuerzo y se acerco a aquella bestia.-Grandulon, este ya no es lugar para ti.-Se alejo lo suficiente e invoco el Bifrost.-Ven conmigo...-Extendio su brazo hacia el
[***]
-¡LOKI Y LA MIDGARDIANA HAN REGRESADO!.-Informo un guardia.
-Se rindieron en menos de dos dias.-Comento Odin victorioso mientras que Thor lo veia furioso y Frigga solo suspiraba.
Las puertas del palacio fueron abiertas. Maik camino firmemente por aquel gran pasillo acompañada de Loki, ambos con heridas y caras completamente serias. Se hincaron unos metros antes de llegar frente a este y miraron fijamente.
-Seras escoltada hasta el Bifrost.-Dijo Odio pero Maik solo sonrio.-¿Que es tan gracioso?
La pregunta se contesto sola.
El gran especimen camino lentamente, como si estuviera asechando a su presa, mostro su gran torso y colmillos por igual. Sus ojos hipnotizaban al rey y lo hacian no querer apartar la vista ni un segundo.
-Prefiero mi estadia en Asgard y vida llena de riquezas.-Contesto burlona.-Les presento al grandulon, unico en su especie...el gran chimaerae. En menos de 2 dias.
-¿Como es posible que una midgardiana haya podido no solo encontrarlo, si no, que tambien adiestrarlo?
-Ah, cierto. No me he presentado como es debido.-Se coloco de pie y esparció su energia por todo el lugar.-Soy Maik Stark, una de las personas mas poderosas de Midgard.-Sonrio coqueta.
-No puede ser...-Exclamo frigga mientras llevaba sus manos a su boca por la sorpresa y a la vez en sus ojos podia notarse tristeza y melancolia. ¿Porque?
-Sin duda no has cambiado.-Comento Odin con la misma cara de melancolia.-Eres digna de quedarte en Asgard con todas las riquezas que quieras.
-Lastimosamente, no me importan las riquezas, solo una cosa.
-¿Cual es?.-Respondió el.
-Que Loki sea liberado y vuelva a vivir en el palacio.-Sorpresa.
-¿Por que he de hacer eso?.-Replico Odin.
-Por que loki a pesar de ser un testarudo que parece que nunca tuvo un corazon, en realidad si lo tiene y aprecia mucho a su familia. Me gustaría reunir de nuevo a la familia como lo era antes de poner a Thor como sucesor.
-Lo que deses, hija mia.-Dijo él padre de todo mientras esbozaba una pequeña sonrisa.
Sorpresa.
-Ay suegro, no se lo queria decir de esta forma.-Respondio avergonzada.
-¿Suegro?.-Replico con el seño fruncido.
-¿Por mi?.-Pregunto Loki mientras se señalaba de manera asombrada.
-Por mi.-Respondio Thor mientras se señalaba.-¿No?
-¿Eh?.-Agrego Maik desconcertada.-¿Por que lo dijo usted?
-Por que eres la viva imagen de una disipula que se convirtio en mi hija en el pasado.-Respondio de la misma manera.
-Ahh.-Dijo avergonzada mientras tapaba su rostro.-Olvido lo de suegro, es muy embarazoso. Yo...ire a...sanar mis heridas...por...alla.-Señalo y se marcho
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ONLY MY GOD\\Thor Odinson
Fanfiction-Prométeme una cosa.-Hablo a lo lejos.-Que te quedaras a mi lado después de esto. Pude sentir como todo se volvio en camara lenta, el viento resoplaba contra los árboles haciendo que las hojas cayeran a centimetros de nosotros y su sonrisa, su hermo...