❝rainy days❞ - jalex

somebody else

Otro día lluvioso. Bueno, no era una nueva noticia, era temporada de lluvia.

El olor a humedad no tardó en aparecer y los pequeños charcos de agua se empezaron a formar.

Las mejillas de Alex estaban ya empapadas por sus lágrimas y su respiración seguía entrecortada, ¿cuándo sería el día en el que deje de sentirse tan mal?

Se sentía estúpido, decepcionado, engañado y usado por una persona quién lo había hecho sentir hace tiempo lo contrario.

No podía creer como se dejó llevar por palabras bonitas y muestras de cariño.

Hace cuatro meses pasó y sigue sin comprender que hizo mal para que se fuera, tal vez lo aburrió con sus problemas, tal vez se cansó de ayudarlo, tal vez ya le daba asco, tal vez había encontrado a alguien mejor que él.

Jack era lo único bueno en su vida y terminó rompiendo su corazón.

"Debes olvidarlo", decían sus amigos. ¿Cómo iba a olvidarlo tan fácilmente cuando se había acostumbrado a tenerlo en sus brazos todos los días?

Porque a pesar de que lo haya dejado como si nada, no lo pensaría dos veces en volver con él, lo necesitaba y odiaba el hecho en que se había vuelto dependiente de Jack.

Su cabeza daba vueltas, no podía olvidar cada palabra y acto que hizo, le dolía la manera en como lo dañó mientras sabía su estado, él mismo calmaba sus ataques de ansiedad, le decía que todo estaba bien y que estaría siempre a su lado, nunca lo decepcionaría y ahora estaba ahí llorando por palabras vacías.

"No le importó" murmuró entre sollozos

Estaba harto de no poder dormir por esperar al menos una llamada de él, deseaba que al menos lo mirara en la escuela, que lo lamentara, que dijera que era un estúpido por dejarlo, que fue un error y no se irá esta vez de su vida, ¡pero nada será así, nunca le importó!

Ahora no sabía quién era más estúpido si Jack por dejarlo o él por ilusionarse.

"Se acabó" fue lo último que salió de los labios de Jack

Alex pensó era una broma de muy mal gusto, pero cuando vió que Jack empezó a alejarse y sus lágrimas no cesaban se dio cuenta que no era una broma, lo estaba dejando sin razón alguna.

Se fue y esta vez no pensaba en regresar.

Intentó tranquilizarse y olvidarse por un momento de aquello pero fue imposible, otra vez empezó a llorar con más fuerza, los malditos recuerdos no salían de su cabeza y aquellas promesas lo rompieron de nuevo.

Estaba harto de estar así pero es algo que no puede controlar porque ya había entregado su corazón.

"Nunca te haría daño, eres mi pequeño ángel"

Suspiró Alex con una sonrisa triste al recordar esas palabras, ¿en serio estaba tan cegado que no se dio cuenta de como iba acabar eso?, tal vez si no se hubiera enamorado, si no hubiera abierto su corazón e intentar algo no estaría así. Pero muy tarde, debió estar alerta, él inició esto.

No quería su cuerpo, pero odiaba pensar acerca de él estando con alguien más. Jack solía decirle que era su todo y ahora terminó en nada.

Confusión es lo que iba a tener siempre, dejando a un lado lo demás.

¿Acaso no le entregó lo suficiente?

Estaba pensando en quitarse la vida, ¿no le importaba?, si mataba a alguien, ¿no le importaba?, si lo amaba, ¿no le importaba?

Dejó de llorar cuando escuchó su celular sonar, no quería hablar con nadie en estos momentos, ya no le importaba nada, solo estar con Jack pero eso era algo estúpido, ni si quiera le llamaba y ahora era algo absurdo pensar que alguna vez lo haría.