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Siempre la misma pregunta ¿Estás bien?". Siempre la misma mentira "Estoy muy bien." 

Confundido, así podría definir en una sola palabra los pensamientos que rebotan en mi mente en este momento.

Cada vez intento ser más frío, tratando de alejarme y de ignorarlo las repetidas veces que se me acerca, pero siempre termino insultándome a mí mismo porque vuelvo a caer en sus estúpidos trucos. Trucos que al final terminan gustándome, porque cada vez que intento ponerle distancia siento un arrepentimiento y un inmenso vacío , así como también una gran necesidad de buscarle. Cada vez  que me sonríe deposita una energía en mi , por lo que mi felicidad se ilustra de la misma forma devolviéndole la misma sonrisa.
Mis sentimientos son un secreto, porque estoy convencido que algún día saldré de ellos.
Tuve que haberle dicho que no desde el inicio, pero mi ego me hizo convencerme que podría con esto...

—¡Buenos días hyung! — Dijo Jimin abrazando al mayor por detrás logrando nterrumpir sus pensamientos.

—Buenos días Jimin... -contestó Yoongi apartando los brazos de Jimin de su torso. —Debo entrar a clases, llegaré tarde si me entretengo contigo.

En ese instante el camino de Yoongi fue interrumpido por una pequeña mano que tomó su muñeca.

—Hyung...

—¿Qué quieres?

—¿Por qué no me esperó ayer cuando salimos de clases? Lo estuve buscando por todos lados.

Yoongi lo miró desinteresadamente y quitó la mano de Jimin de su muñeca.
—Estaba agotado ayer, así que quería llegar temprano y dormir.

Jimin bajó la mirada y avergonzado comenzó a jugar nerviosamente con sus manos.
—Sé que usted me vio besándome ayer con...

—No importa Jimin... Tú sabes que puedes hacer lo que quieras, no me debes ninguna explicación —respondió secamente el mayor.

Jimin se acercó al mayor, tomó su rostro con sus manos y depositó un corto beso en los delgados labios de Yoongi.
—Usted sabe que es el único para mi hyung, y esta vez no dejaré que se vaya sin mi— Dijo haciendo un tierno puchero con sus labios. Yoongi lo observó sin expresión, tratando de contenerse ante aquel dulce acto.
— Debo entrar a clases, nos vemos en la salida— se despidió el menor con una sonrisa.

Durante toda la clase Yoongi no pudo concentrase, estaba buscando la mejor estrategia para evadir al menor y así no irse con él después de clases. El mayor sabia que era lo siguiente que sucedía al irse junto con Jimin , por lo que evitarlo era la única solución que se le ocurría.

—Muy bien chicos, nos quedaremos hasta aquí con la clase. ¡Ah! Y quiero recordarles que deben componer una nueva canción al finalizar el semestre, deben comenzar a trabajar en ello, es su evaluación final — finalizó diciendo su maestro de teoría y composición.

Yoongi tomó sus cosas rápidamente y se apresuró en salir del salón de clases.

—¡Hey! —gritó Namjoon queriendo captar la atención del peliplateado — ¿Por qué tan deprisa? ¿No esperarás a Jimin a que salga de su clase?

—Debo irme pronto, tengo que arreglar unos asuntos —mintió— Escribeme para reunirnos y así comenzar a construir la letra de la canción.

—De acuerdo —contestó el moreno.

Yoongi estaba por llegar a la salida cuando de pronto lo alcanzó aquel motivo que tanto le  temía. Con solo ver sus cabellos rubios, sus labios esponjosos y su eyesmiles su estómago se retorcía de la emoción, indicándole fuertemente que sus acciones estarían fuera de control y eso precisamente le causaba pavor.

—¡Hyung! ¿Nos vamos?— Jimin le sonrió y tomó la mano del mayor entrelazándola con la suya.
Yoongi asintió con una leve sonrisa, aunque internamente estaba insultándose así mismo nuevamente —Maldito débil, sólo esta jugando contigo y tú dejas que lo haga imbécil.

Definitivamente Yoongi estaba a punto de entrar a una montaña rusa de emociones...

Es la primera historia que hago, espero hacerla entretenida y cada vez mas emocionante...

Bittersweet.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora