Cap.I

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11 de Diciembre 1985≈
-Londres, Inglaterra-

(Evan)

Porque me obligan a hacer esto?
Porque no entienden que yo no amo?
Odio ser el único heredero a el trono!

Mi día transcurre normal, casos que atender, huérfanos a quienes rescatar, lidiar con mi padre o como a el le gusta que le llamen:

«Sir. Louis Charles de Blansonari lV Rey de Inglaterra

Odio llamarle así, gracias a mi madre que me puso un nombre diferente, no soportaría ir por la calle con tal nombresito.

Muchas veces pienso en como será la vida detrás de los muros de la realeza, donde puedes caminar sin guardias, donde no se inclinan delante de ti cada vez que te ven, donde hablas como a ti se te antoje sin modales, sin estúpidas frases rutinarias.

-Buen día Príncipe Evan, ¿Que tal descanso?- Mi nana Lilly me saca de mis pensamientos.

-Muy bien Lilly y a ti como se te dio la noche?- Agggg! Como odio hablar como niño refinado.

-Muy bien Príncipe- dice con una sonrisa - Disculpe la molestia pero el Rey Louis de Balsonari lo solicita en su oficina-

-Gracias Lilly, en un momento estaré ahi- digo devolviéndole la sonrisa.

Inclina su cabeza en señal de despedida y comienza a caminar, por lo que veo preparará la comida porque se dirige a la cocina.

Comienzo a caminar hacia la oficina de mi padre, como de costumbre caminó por un pasillo lleno de fotografías de mis familiares desde los más viejos hasta ahora.
Todos los reyes con grandes sonrisas toman a sus esposas y hijos en una hermosa foto llena de alegría y amor.

Por desgracia el tiempo cambia y las fotos "familiares" (si se les puede llamar así) de ahora constan de el rey con su gran corona sentado en su trono, detrás de este, la reina con una sonrisa demasiado falsa como bien actuada, a un lado de ellos, un pequeño niño con un brillo en sus ojos, parecé que lloró antes de que la tomaran.

Que pasa con las familias de "sangre azul" hoy en día?...

-Buen día Príncipe Evan- dicen los guardias que pasan a un lado de mi, mientras hacen reverencia, sacandome de mis pensamientos.

-Buen día- digo y ellos se retiran.

Llego a la puerta de la oficina de mi padre, toco dos veces la gran puerta de madera importada, que estupidez cortar árboles para los caprichos de un rey ambicioso.

-Adelante!- suena la voz gruesa y ronca de mi padre.

Giró la perilla y entro lentamente, mi padre me ve y se pone de pie, veo su mirada llena de esperanza, se lo que me dirá: Evan has encontrado a la dueña de tu corazón?.....

-Hijo, se que puede parecer insistente, pero ya encontraste a la dueña de tu corazón?- ruedo mis ojos.

-Buen día para ti también padre- digo en tono sarcástico.

-Entonces? Alguna chica especial?- dice con cara de frustración.

-Entiende papá yo no creó en el amor, ESO ES UNA MIERDA!!- digo para que lo entienda de una vez.

Una arruga se posa en su frente, y preparo mi cabeza para el sermón que se viene a continuación.

-POR EL AMOR DE DIOS EVAN!- grita-NI TU MADRE NI YO TE HEMOS ENSEÑADO A HABLAR ASÍ!- la rabia me consumé.

TOXIC ≈juego de la corona≈Donde viven las historias. Descúbrelo ahora