Pluma

289 26 35
                                    


🕵

Eran pocas la veces que JongDae convivía con ChanYeol sin la presencia de BaekHyun. No tenían nada en común y sus charlas estaban llenas de silencios incómodos o anécdotas del escritor. Así que cuando el más alto lo invitó a tomar un café, aceptó de mala gana, preparándose para un par de horas incómodas.

Fue recibido con una enorme sonrisa y dos tazas de café humeante — Espero que no te moleste, pero decidí ordenar por ambos. Amo el café que preparan, pero suelen demorar una eternidad.

— No tengo problema alguno.

Y allí estaba el usual silencio incómodo. Dejó descansar sus manos en la mesa mientras esperaba a que la bebida enfríe lo suficiente para poder tomarla. Golpeó la mesa con sus dedos, haciendo un suave tamborileo al compás de la música de fondo.

— No sabía que te gustara ese grupo.

Detuvo sus movimientos — No lo hacen, pero esa tonta canción se me pegó — decidió evitar caer en aquel silencio —. Baek mencionó que estabas preparando una nueva exposición.

— Sí, en Japón. Falta poco más de dos meses, pero siento como si tan solo quedaran un par de días — sentenció masajeando el puente de su nariz —. Estoy tan estresado y casi no veo a Baek. ¿Sabes lo que es vivir en la misma casa y solo estar juntos por unos cuantos minutos? Hay veces en las que ni siquiera logramos dormir juntos, cuando me levanto él sigue en su estudio y va a dormir cuando yo ya estoy en el mío.

— Ambos se sobre esfuerzan — tomó un sorbo y lo tragó con dificultad, el líquido aún estaba caliente —. Le he dicho al enano mil veces que no vaya al límite, pero no me escucha.

— ¿MinSeok no hace lo mismo?

Negó con la cabeza — Solía, pero decidió relajarse y eso lo ayudó. Tiene horarios para escribir y el resto del tiempo se la pasa en la calle o en mi oficina con una libreta y una grabadora a mano — sonrió de lado —. Y encontramos formas muy creativas y placenteras para pasar el rato, si sabes a lo que me refiero.

— Estoy seguro de eso — ChanYeol aclaró su garganta, sintiéndose un tanto incómodo.

— Ahora dime para qué querías verme y dejemos de desperdiciar tu preciado tiempo con charlas banales, tienes pinturas que terminar — dijo manteniendo la sonrisa.

Las mejillas del pintor se tornaron carmesí al ser descubierto — ¿Fue tan obvio?

— Es parte de mi trabajo.

— Te llamé porque necesito tu ayuda, ¿conoces a Im Yoona? Sé que trabaja en editoriales importantes — confiaba en Tiffany, pero necesitaba confirmar su reputación y quién mejor que JongDae para hacerlo.

— Lo hago, trabajó un tiempo con mi padre, pero luego Random House la captó y la convirtieron en un monstruo, en el buen sentido. Es una de las mejores editoras que vas a encontrar en el medio — el contrario entrecerró los ojos — ¿Por qué?

— Es una clienta — se apresuró a responder. Había repasado muy bien su excusa para no meter la pata —. Me pidió hacerle un cuadro y no tengo idea de qué le gusta.

— Algo simple y que tenga animales... solía tener unos llaveros de animales de peluche que cambiaba cada semana.

Pretendió anotar la información en su celular — Cierto, llevaba uno de esos en una de nuestras reuniones... Te debo una — Acabó de beber su café y se levantó — Me tengo que ir y no te preocupes por la cuenta, ya la pagué.

El detective asintió, extendiendo su mano para estrecharla con el contrario — Yeol, dile a Yoona que BaekHyun era el rubio que la defendió en mi fiesta de cumpleaños, lo recordará —apretó el agarre —. Y cuando ella se presente, que le diga que obtuvo el manuscrito gracias a una confusión.

Esquirlas // ChanBaek (EXO) // 2SDonde viven las historias. Descúbrelo ahora