Seras mía (Akutagawa Ryunosuke)

XIII

Dazai

Camine por varias horas después de dejarla en su casa, no quería ir a mi departamento, así que camine en círculos

-oye- grito chuya desde lejos, no quería verlo ahora- akutagawa está en casa de la chica, escuche cosas romperse, lo mejor será que vayas

-por qué te interesa tanto chuya- pregunte

-eso no te incumbe - sonrió burlándose- además así puedo molestarte mas

corrí para llegar a su casa, antes que pudiera llegar ella paso justo enfrente de mi corriendo como si su vida dependiera de ello, voltee en dirección a la calle no había nadie, las seguí hasta que ella se detuvo a tomar aire

-una señorita no debe salir así a estas horas-dije sonriendo colocándole mi abrigo en los hombros, ella volteo rápidamente

-intentaba no ser abusada sexualmente por un enfermo acosador-dijo mirando el cielo, solo le sonreí

Caminamos en silencio hasta llegar a las puertas de la agencia, abrí la puerta de esta y la hice sentarse en una de las sillas dentro

-entonces, que piensas sobre akutagawa-pregunte recargándome en el escritorio

-de que o que-pregunto- pues no te voy a negar que no es feo, por eso dije eso aquella vez, pero solo fue porque nunca alguien se había interesado en mi o al menos no que yo lo supiera

- no estas interesada en el

-bueno pues me secuestro, quiso abusar de mí en mi propia casa, mejor si le hubiera roto los brazos- explico algo exaltada- enserio crees que estoy idiota o algo así para estar con el después de eso, tengo que ir a un psicólogo

-puedes quedarte en la enfermería por hoy, hablare con el presidente por tu situación- dicho esto le di la llave de la puerta y me retire dejando con ella mi abrigo

-gracias Dazai- fue lo último que le escuche decirme

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Dazai se fue dejándome sola en la agencia, como dijo fui a la enfermería y me quede dormida allí

Desperté por el ruido de la puerta, de ella entro una mujer de cabello corto, me miro extrañada, claro yo también lo haría si me encuentro a alguien durmiendo en cuanto entro a mi trabajo.

Decidí levantarme de la cama y hacer una pequeña reverencia

-lamento esto, pero por la noche Dazai me trajo aquí para ayudarme- ella miro afuera confundida, pronto el sujeto vestido de detective se asomó por la puerta

-ya sabía que estabas aquí- me señalo el chico abriendo sus ojos un poco, pronto dejo de hablar, puso una cara muy seria, bajo su mano muy lentamente y se retiró de la habitación

-me contó rampo que es por akutagawa, el presidente no tarda en llegar siéntete cómoda- sonrió un poco, me entrego un vestido, supongo que no puedo andar en piyama aquí, salió de la habitación dejándome sola

paso cerca de una hora cuando ella volvió a buscarme, Dazai aún no llegaba, hizo que pasara a una oficina allí se encontraba un hombre bastante mayor con una mirada que intimidaría a cualquiera además de rampo el cual me miraba muy fijamente

-lamento causar muchas molestias- me incline

- nosotros lo lamentamos-dijo esta vez el, ladee la cabeza confundida, porque se disculpaba conmigo

-de que habla- pregunte un poco asustada

-tú vas a- pronto alguien entro empujando la puerta muy fuerte y me abrazo creo que no hace falta decir quién era

-presidente, podríamos escoltarla hasta el aeropuerto, iré con ella también- el hombre solo lo miro un poco y negó con la cabeza, al aeropuerto pero para que

-Dazai no servirá nada de lo que hagamos- dijo con una voz bastante seria

-pero, si se queda aquí entonces- rampo lo interrumpió

-tal vez esa sería la única opción- de que están hablando, no entendía nada de lo que pasaba

-podrías salir un momento- me pidió el presidente, yo solo asentí con la cabeza y salí de la oficina

Me quede cerca, creo que merecía saber que hablaban se trataba de mi después de todo, Yosano no dijo nada solo se mantuvo a mi lado poniendo una mano en mi hombro

-segura que quieres escuchar, no te gustara-advirtió aun así me quede allí

-Higuchi la matara o si no Akutagawa lo hará- escuche decir a rampo- en ambos casos es el mismo resultado

-firmo su sentencia cuando se encontró con akutagawa y su hermana, no hay nada que podamos hacer-finalizo el presidente- no hay forma de cambiarlo

Me reí un poco maldiciendo mi suerte- tenía razón no debí haber escuchado-Dazai salió de la oficina, solo agacho su cabeza al verme

- todo estará bien-trato de sonreír

-no te preocupes-sonreí como pude- me prestan papel y una pluma

Cuando termine le entregue las cartas a kunikida era el único que estaba conmigo en ese momento- escribí la dirección en la parte trasera, además del nombre a quien se entregaran- él se limitó a asentir con la cabeza, para después salir de la habitación

revise en uno de los cajones del escritorio de kunikida, una pistola fue lo que encontré, la tome tal vez me metería en un problema pero si es que realmente puedo cambiar las cosas entonces lo are, salí de la agencia sin hacer ruido y asegurándome de que nadie me viera

- si vas a ese lugar, luego desearas morir-dijo rampo a mis espaldas, medite un poco sus palabras no dijo que moriría pero sí que lo desearía, quisiera haberlo escuchado en ese momento