Miércoles.
6:57AM. Despierto, todo sudado e incómodo por la noche anterior. Me apresuro porque veo todo muy claro. -Demonios, abriré tarde otra vez- digo para mis adentros. Voy al baño, me ducho, pongo la cafetera y recojo el periódico de la entrada. Cuando ya estoy desayunando y listo para irme, busco mi celular y cuando veo la hora... 7:46AM. -¿Es enserio? Mierda, demasiado temprano aún-.
Entre tanto llega la hora de irme, recuerdo lo que había pensado la noche anterior y mi rostro se ilumina. -Me voy mamá, adiós- vocifero lleno de júbilo, cuando luego recuerdo: Ya no vivo con mi madre, vivo solo.Mi vida es complicada desde cualquier punto de vista. Un hombre de 33 años, con mucho dinero pero con pocas amistades, mi padre había fallecido a mis 2 años y apenas tengo una foto para recordarle. Mi madre... Salí de casa hace 12 años a buscar mejor vida a otro pueblo, era surfista. Buenos tiempos aquellos, hasta que conocí a Carol, una muchacha de piel india con unos ojos que te hacían sentir que podían mirar hasta tu mas profundos pensamientos; unos labios que daban ganas de besar una y otra vez y una complexión divina. Ella era un ángel. Cuando yo era joven era mas rubio aunque ya se ha amilanado con el paso del tiempo. Recuerdo el día que la conocí: Eran como las 2 de la tarde y estaba en la tienda de playa con mi mejor amigo Tony (Somos colegas desde los 9) y ella llegó. No pude dejar de mirarla, y Tony tampoco. Como ya el me conoce, y vio la cara de estupefacción que tenía nos dejó solos, y ahí saque el valor para hablarle:
-Hola chica. ¿Cómo te llamas? No te había visto nunca en esta playa...
-Mi nombre es Carol, un gusto. Es mi primera vez aquí, me mudé ayer.
-Entiendo (Justo en ese momento me absorté en mis pensamientos unos minutos).
-Eh, guapo. ¿Estas ahí? Te me quedas mirando como si fuese una criminal. -se ríe-.
-Es sólo que eres muy bonita y ya sabes... -digo yo comenzando a sonrojarme-. Me gustaría que fuésemos a nadar o algo.
-Oww, me gustaría, pero no sé nadar. Donde vivía antes no había sitio donde hacerlo.
-No te preocupes -Le dije para aprovechar la oportunidad- Yo podría enseñarte, y con la práctica, hasta surfear podrías.
-Bueno, gracias. Vamos de una vez.
-Por cierto, mi nombre es Jeff.
-Nada de eso, te diré rubio de ahora en adelante.
Se levanto de su asiento y ahí lo comprobé, era una Diosa. Tenia unas caderas sutiles pero salvajes y todo su cuerpo era como el paraíso. Volví a quedarme absorto viéndola, en lo que parece que se dio cuenta y aún recuerdo sus palabras luego:
-Eh chico, este no es ni el momento ni el lugar para esas miradas. Levántate de ahí y sígueme.
Duramos toda la tarde en el agua, retozando y hablando y en sólo unas horas ya nos conocíamos casi del todo.
-Estoy ya cansado -Le dije porque se estaba oscureciendo- Ademas, tengo hambre. Pero como vives cerca podríamos seguir mañana. ¿Que te parece?
- Oh, está bien. Pero antes, ¿me podrías decir donde vives? Así sabría donde ir a visitarte... -Lo dijo con una cara de perversión que me hizo mover todo el cuerpo-.
-Mmmm, bueno. Tengo una idea, si quieres, ve a casa y cámbiate, y puedes venir a cenar a la mía, es aquella amarilla que se ve allá. Te haré pescado para cenar.
-¡Me encanta la idea! Aunque me impresionas más tú. Es raro ver un chico tan guapo así que se interese por cocinar. Eres bastante interesante Jeff.
-Muchas gracias -Estaba sonrojado al máximo. Mis mejillas se veían como si fueran a estallar y ni siquiera podía hablar. Me había embobado. Cada segundo que pasaba me la pasaba pensando en lo increíble que era y en lo afortunado que había sido ese día para mi; cuando al fin pude controlar el rubor de mi rostro y empezaba a hablar mas fluido le dije- Tú también Carol, eres una chica increíble y me impresiona también que una chica tan bella como tu le interese estar soltera.
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Colegas antagonistas.
DragosteJeff es un empresario exitoso, con cara de pocos amigos, pero que tiene mas para dar. La rutina de su trabajo hace de su vida un vórtice de miserabilidad hasta que un día decide contratar una secretaria y que tal? resulta que la elegida es su amor d...