22/05/2018
Estimado lobo feroz.
Lamento todo lo que hice y aunque mi voz pueda perderse entre el rencor por mis acciones, me gustaría decirte que me disculpes. Le di todas tus cartas a Caperucita y ya no doy recompensa para que te disparen. Quizás la que murió fui yo y no sé necesito de una Bala de plata para hacerlo. Aún no es tarde para ese café y el agua se enfrió por esperar tanto, con amor, seguramente la podrán volver a calentar.Sinceramente arrepentida por todo.
La abuelita
XabossReivax
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El detrás de los Cuentos
RomanceCartas donde se cuenta la realidad de los cuentos, basada en historias de @XabossReivax