I'm Tired...

**Lirismo**

El timbre anunciando el receso no tardó en sonar, dando por terminada la primera clase. Butters se levantó de su asiento y recogió todas sus pertenencias como rapidez para alcanzar a su novio quien salía junto a su grupo de amigos mientras se carcajeaban

-kenny! E-espera!- se apresuró a decir Leo antes de que el mencionado cruzara el umbral de la puerta

El otro rubio detuvo su andar para voltear al escuchar que alguien le llamaba, quedando frente a su pequeño novio, el cual sostenía entre sus manos un pequeño bulto

-Que ocurre Leo?- Kenny alzó una ceja con clara confusión en el rostro, sin entender el porqué lo había detenido

-O-olvide darte tu regalo... E-espero que te guste!- Butters le entregó el pequeño paquete al Rubio mayor con mucho nerviosismo

Kenneth se quedó observado el obsequio por unos segundos, con un brillo extraño en los ojos, sus manos comenzaron a desenvolver el dichoso regalo hasta encontrar una pequeña cajita de terciopelo roja

-Bunny, amor, sé que soy irresistible pero no crees que somos muy jóvenes aún como para casarnos?- Kenny hablaba con una sonrisa burlona, subiendo y bajando las cejas de manera pervertida

-N-no es eso!- Butters se apresuró a aclarar -s-solo ábrelo!- su cara estaba demasiado sonrojada, frotaba sus nudillos casi con desesperación

Al abrir la cajita de terciopelo el rubio mayor se encontró un hermoso collar de un conejito blanco con algunas manchitas amarillas, tenía la letra L enmarcada en dorado

-Yo tengo el otro...- Murmuró Leopold mientras dejaba a la vista su cuello, donde allí reposaba un collar muy similar al de Kenneth, solo que tenía un conejito con manchas naranjas y la letra K enmarcada

-Leo... Es precioso...- los ojos de Kenny brillaron con intensidad al tiempo que abrazaba a su novio, pegandolo a su pecho -me encanta, gracias....-

Butters solo se dejó abrazar, correspondiendole aquel gesto con cariño y una gran sonrisa en su rostro, completamente satisfecho por la reacción de su acompañante

Kenny besó los labios de Leopold por unos escasos segundos que para el más pequeño parecieron una eternidad. No acostumbraban mucho a besarse, solo con dedicarse algunos piropos y abrazarse de vez en cuando era suficiente para los 2, pero en esta ocasión, aquel beso fue increíblemente significativo para el tierno Butters

El ambiente entre ambos era muy cálido, o al menos así lo sentía el rubio menor, quien se sentía como si estuviese en una suave y esponjosa nube de fantasía junto a su amado Kenneth McCormick

Pero eso no podía durar para siempre verdad?

-Bueno, debo irme, los chicos me esperan, te veo luego bunny- el chico de parka anaranjada se despidió dandole un pequeño beso en la punta de la nariz al pequeño Leo

-A-ah! S-si! Ha-hasta luego!- Butters aún no salía del todo de su ensoñación, una vez que se halló solo en aquella aula de clases suspiró como colegiala enamorada para luego encaminarse al comedor y poder encontrar a su amigo inglés

El día transcurrió sin ningún contratiempo, Butters llevaba orgullosamente el collar que compartía con Kenny, sin miedo de exponer su regalo a sus demás compañeros, mostrando una hermosa sonrisa a pesar de algunos malos comentarios que escuchaba por los pasillos

Pues si, de ves en cuando escuchaba algunos comentarios dirigidos a su persona de parte de los demás alumnos, tales como "marica" "gay" "fenómeno" "perra", entre algunos otros, pero a él no le afectaban en lo más mínimo, incluso hasta el se reía de algunos de esos insultos