<No se me ocurre ningun título, pero hay pelea>

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No era un secreto en la mansión que Jennie y Jay estaban juntos. Tampoco era un secreto que Jay era un borde de mierda para lo dulce que es Jennie.

- Oppa~ - Jay se apartó cuando Jennie fue a darle un beso.
- ¿Qué quieres? - dijo serio.
- Darte un beso - lo intentó de nuevo sin victoria.
- Ahora no puedo, estoy trabajando - mentira, estaba mirando Instagram.
- ¿Por qué eres tan borde?
- ¿Quieres dejarme en paz?
- Te voy a dejar pero de verdad como sigas así.
- A ver si es verdad.
- Borde de mierda - murmuró Jennie.
- Piérdete chica.
- Eso pensaba hacer. - Jennie se levantó del sofá en el que estaban y salió dando un portazo.

" Puedes quedar hoy?"
" Contigo siempre, guapa. Te recojo en 5 min"
"Ok"
Que si, que era todo lo dulce que queráis, pero lo sexy no se lo quita nadie. Y si en casa no le dan lo que quiere, tendrá que salir a buscarlo la chavala.
Y en diez minutos, Jay Park estaba abriéndole la puerta del coche.
- Ya hemos llegado, my lady.
- Bonito sitio.
- Como tú - Jay le guiñó un ojo.
Los hijos no sabían nada de la SM, ni de las mafias, ni de los enemigos de sus padres. Asi que para Jennie no era un enemigo, era un amante.

- Eh, ¿alguien ha visto a Jennie? - Dijo Jay preocupado cuando bajó al salón.
- Ha quedado - dijo Lisa
- ¿Con quién?
- No me lo ha dicho. Sólo me ha dicho que has sido un borde de mierda y que se iba a buscar calor.
- Me cago en- - Jay salió corriendo.
- Adiós eh - dijo Lisa sin dejar de mirar el móvil.

Jay se había metido en alguna que otra pelea con Park porque le tiraba demasiados piropos a Jennie. En una ocasión, Jennie se puso de parte de Park y casi le deja; estuvo llorando toda la noche.
Jay sabía muy bien dónde estaban. Ese fue el club en el que se cruzaron las miradas por primera vez Jay y Park.
En 0' llegó al sitio y entró cabreado. Tiene genes YG, no le gusta que le toquen lo suyo, porque a parte de tocar a su novia, le estaban empezando a tocar los cojones.
No les veía por ningún lado. Decidió salir del lugar y al pisar la calle oyó gritos de una chica pidiendo ayuda. Y la voz era familiar. Jennie.
En el callejón de al lado Park y sus matones la estaban reteniendo para violarla y matarla probablemente.

- Una YG menos - soltó Park
- Vete a la mierda. AYUDA~ - pataleó con todas sus fuerzas.
- EH, suéltala.
- O si no, ¿qué? - Park le miró a los ojos.
- Te voy a hundir el esternón, hijo de puta.
- Venga - Park soltó a Jennie, pero los matones la seguían reteniendo. Park se acerco a Jay y le soltó un puñetazo. Este se defendió y contraatacó. Y así siguió la pelea hasta que Park le tumbó de un puñetazo y se puso encima de él con la navaja en su cuello.
- ¿Últimas palabras? - ladeó la cabeza sonriendo.
- Lo mismo digo - Park levantó la cabeza y ahí estaba SeungRi apuntándole entre ceja y ceja con su pistola. Park soltó la navaja y se apartó lentamente de Jay, pero la sonrisa no se iba de su rostro.

- ¿Qué te hace tanta gracia? - le preguntó Ri.
- Que por mucho que me mates a mi y a mis hombres no vas a hacer que la puta de tu muj-. - ni siquiera acabó la frase. SeungRi ya se lo había cargado.
- Hijo de la grandísima puta. - los ojos de Ri se llenaron de lágrimas.

Taeyang ayudó a Jay a levantarse.
- Iros de aquí - le dijo mirando a Jennie
- Vale, papá. - dijo Jay mirando al suelo.
GD y Daesung se acercaron a los matones, que no querían soltar a Jennie. Pero so se solucionó fácil con 2 disparos. Pero aún quedaban unos quince matones, lo que viene siendo un aperitivo para Bigbang.
Jennie salió corriendo a los brazos de Jay. Este la cogió de la mano y salieron corriendo. Aunque no llegaron muy lejos, porque Mino y Rose les estaban esperando apoyados en su Lamborghini negro.
- ¿Os llevamos a algún lado? - preguntó Rose sonriendo.
- A casa porfa. - dijo Jennie casi llorando.
- Venga mujer, si ya pasó - Mino la abrazó reconfortándola, y Jay le lanzó una mirada de que también le iba a hundir el esternón.
Subieron al coche. Jay se metió detrás con Jennie. Mino estaba en primera fila y Rose al volante. Y he de decir que Rose no es la más indicada para conducir, ya que le gusta vivir a tope.
- ROSE POR DIOS NO NOS MATES TÚ AHORA - gritaba Jay desde el asiento de atrás mientras su hermana le pisaba más al acelerador. Y ni puto caso. Sus hermanos estában disfrutándo en primera fila de los dotes de conducción de Rose.

Y ese día fue cuando YG volvió a ser una mafia, los hijos se enteraron de toda la historia y les asignaron trabajos en la mafia.

Y también fue el día en el que Jennie se llevó una buena bronca. Y Rose una multa. Y Jay Park un tiro en la frente. Eh, pero y tan felices todos. :)

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