1:04 A.M [Pausado y en edición]

Capítulo 8

Salir del país sin toparme con Taemin fue difícil, ya que cuando me encontraba en el aeropuerto me llegó un mensaje en donde decía  que iba a buscarme, pero no alcanzó mi vuelo.

No es que desease irme sin despedidas o algo así, me vi forzada por mi propia empresa a hacerlo, me enviaron a L.A hasta que  todo aquel escándalo se olvidara, y eso incluía cero contacto con Key o cualquiera de su circulo, incluyendo todo SHINee, o sea Taemin.

En un comienzo quise  gritar, pero tampoco quería poner a Taemin en una posición peligrosa, los medios seguían buscando más del escándalo, y al parecer en SM ya habían notado nuestra cercanía, aunque no tenían idea de lo que realmente pasaba pero estarían atentos.

Antes de siquiera salir del país me habían quitado mi móvil pasandome otro para no tener comunicación hasta que fuese todo olvidado, llevaba una semana sin saber nada de Key ni de Taemin, estaba realmente frustrada y no quería ni imaginar como se encontraban , especialmente el menor, pero al menos no todo era malo, estaba tomando cursos de perfeccionamiento en mi área y dentro de unos días iría a otro estado a unos seminarios en Berkleey, el sueño de todo músico.

Me encontraba en una amplia cafetería al sur de L.A trabajando algunas partituras en mi laptop junto a una gran taza de café, pero sabía diferente aquella mañana, desde hace una semana que sabía diferente, no podía negar cuanto los extrañaba, cuanto extrañaba Corea a pesar de lo mucho que siempre me quejaba al estar viviendo allá, pero ahora extrañaba incluso lo que me desagradaba.

Suspiré cerrando los ojos un instante cuando pude sentir una intensa mirada sobre mí que no lograba incomodarme del todo pero aún así era desagradable, por lo que bufé algo enojada volviendo a concentrarme en la pantalla del ordenador frente a mí, aunque aquella molestia no se iba.

--¿Emma?...¿Emma Rimbua?-- Pude oír delante de mi laptop, aquella voz hizo que me paralizará, era una voz tan familiar pero ya lejana que mi corazón paró y la sangre en mis venas se congeló por lo que cerré la pantalla abruptamente, mirando con los ojos muy abiertos al hombre que estaba frente a mí, casi como un fantasma.

--Jung Ji...--Salió casi en un hilo mi voz, parandome frente al hombre que me regalaba una cálida sonrisa, más yo  no sonreí, mi rostro cambio a una expresión dura casi como una máscara de cemento, no podía estar pasando, luego de todos esos años en el lugar menos probable me tenía que encontrar de cara a un pasado que no deseaba recordar, pero allí estaba frente a mí Kang Jung Ji, como sí la vida quisiera darme una jodida bofetada, mi suerte no podía ser más de la hostia.

¿Quién es Kang Jung Ji? Simple, él era la persona por la cual llegué a Corea.

Aún me encontraba estudiando mi grado de composición musical en la Universidad  Europea de Madrid cuando en una de esas casualidades me tope de cara con uno de los estudiantes extranjeros de postgrado, un chico medianamente alto, con una bonita sonrisa, cabello demasiado corto para mi gusto, ropa de abuelo, pero aún así interesante, sobre todo con sus frases casi inentendibles en español, pero debido a que ambos hablábamos inglés comenzamos una conversación.

Esa conversación se fue repitiendo día tras día, volviéndose cada vez más larga e íntima, pasando un par de meses para que comenzaramos a salir, y finalmente vivir juntos.

Todo era demasiado perfecto al punto de dar miedo, ambos queríamos las mismas cosas, poseíamos sueños complementarios, pero un día su padre lo llamó y su rostro cambió completamente, diciéndome que debía viajar de urgencia a Corea y no sabía cuándo podría volver.

A pesar de que nos llamábamos cada día ya no era lo mismo y la frustración comenzaba a corroerme, por lo que sin pensarlo tomé los ahorros que tenía en el banco y aborde el primer avión que logré conseguir para Seúl.

A penas llegué al aeropuerto lo llamé para contarle la sorpresa, pero su voz fue severa, al ir por mi no estaba nada feliz de verme, incluso discutimos de lo inmadura que fue mi decisión, siempre sacando en cara nuestra diferencia de edad, para luego abordar un automóvil y ni siquiera llevarme a la casa de sus padres, sino a un hotel.

Estuve un par de días allí y me visitaba, pero algo me decía que nada estaba bien, absolutamente nada, por lo que finalmente decidí seguirle, encontrandome con mi novio tomado del brazo de otra chica mientras entraba en una tienda para novios, simplemente no lo podía creer y lo encaré, su rostro casi se cayó al verme mientras todos me miraban con desprecio debido al gran volumen de mi voz y no poder entender lo que decía, la muchacha a su lado se aferraba a su brazo mientras le pedía explicaciones, me tomó como si fuese una desconocida y me sacó.

Afuera de la tienda sin siquiera mirarme a los ojos me dijo la verdad, la dura verdad de que su familia era de prestigio, adinerada, que su padre estaba apunto de morir y quería verlo casado antes de eso, que ya le habían elegido una novia, Park Eun Ji, la hija menor de uno de sus socios de negocios, así terminaría de unificar ambos patrimonios, me pidió perdón, lloró, juró que me amaba, pero que el deber con su familia era primero, era el único hombre, el heredero, mi mano golpeo su mejilla con fuerza y no volvía a verlo, pero tampoco volví a España, al poco tiempo conseguí empleo en SM y continue mi vida allí.

--Luces más bonita que lo que recordaba-- Dijo casi en un susurro mientras seguía en estado de shock, inmóvil, no era para nada agradable verlo allí,a pesar de que los años habían pasado, pero eres muy desagradable, no le hable, tomé mis cosas decidida a salir lo antes posible del lugar, pero el me jalo del brazo, por lo que me voltee furiosa mirándolo, al ver mi rostro me soltó y puso en mi mano una tarjeta con su número, reí por lo bajo y negué.

--¿Eun Ji no va a enojarse sí tu ex te llama?--Solté venenosa mientras elevaba una ceja, él solo sonrió y  movió su cabeza--Me separé hace un par de años-- soltó delante de mí para luego dejarme ir.

Desesperada tomé un taxi hasta mi hotel, al llegar allí corrí a mi habitación buscando con desespero mi teléfono, a la mierda la SM, debía hablar con la única persona que conocía esta historial, el número me lo sabía de memoria, por lo que desesperadamente anote en la pantalla , llorando algo desesperada, sintiendo aquella voz tan familia al otro lado.

--¿Alo?-- Dijo somnoliento mientras se oían mis sollozos y deje salir mi voz-- Bummie, hoy lo vi, hoy vi a Jung Ji-- Kibum se quedo completamente callado por un rato mientras seguía llorando hasta que volví a sentir su voz, sólo digo me voy mañana a Los Angeles y pude sentir mi corazón más tranquilo mientras miraba aquella tarjeta de  presentación y buscaba un cigarrillo en mi bolsillo.

_________________________________________________________________

¡Hola! creo esta es la primera vez que escribo por acá, siento mucho la tardanza y lo poco que escribí, pero el próximo capítulo será más largo y emocionante, gracias por su apoyo, espero les guste este cap.

¡Nos leemos!