La Tutora

Cap. 1

POV Matt
El día era perfecto, con el cielo azul pero viento helado aunque no importaba mucho si usabas una buena chaqueta. Pero yo no tenía una, porque al parecer no tenía frío al salir de la casa como le asegure a mi mamá pero al menos en la cafeteria donde me encontraba el ambiente era cálido.
¿Por qué estoy aquí preguntaran?
Espero a que llegue Cora, le invite a tomar algo para agradecerle el esfuerzo que hizo para que yo pudiera mejorar mis notas este semestre.
Ahogue una risa de recordar la última sesión que tuvimos la semana pasada donde trato de enseñarme matemáticas, por muy cabeza hueca que sea, ella logro que me sacara un 9.

Oí un ruido que me saco de mi mundo, era Cora quien se sentaba frente a mi, pero no era mi Cora, está chica estaba pálida y con rostro de no haber comido hace una semana, lo que me extrañó más fue el pequeño temblor en sus manos que oculto entre sus piernas casi inmediatamente después de sentarsce.

- ¿Dios Cora, estás bien? -Le pregunto acomodandome en mi silla y mirándola preocupado- No te ves...Cora.

- Descuida es un resfrío nada más -Dijo sacando un pañuelo y sonandose fuerte la nariz.

- ¿Segura que estás bien? De haber sabido que estabas enferma nos hubiéramos juntado en tu ca... -No me dejó terminar.

- ¡NO! ¿Cómo creés? Mi casa es un nido de gérmenes, mis padres también están enfermos -Explico simple mientras le hacía señas a una mesera- Pero descuida, en unos días estaré como nueva para el partido de volei.

Me regaló una sonrisa para luego pedir un Frappe de frutilla, yo pedí un Frappe de caramelo y dos brownies. Hablamos cerca de una hora luego de que nos trajeron la comida, recordábamos los últimos 3 meses en que ella me había empezado a dar clases y como las cosas cambiaron después de eso.

Admito que ella no sólo me enseñó matemáticas e historia y se que ella no admitirá que yo también le enseñe algo, pero fin de cuentas creo que ambos nos llevamos lo mejor del otro.

«Racconto (19 de septiembre 2016)»

La práctica de baloncesto estuvo muy pesada, el entrenador quiere ganar el campeonato estatal este año y dice que debemos esforzarnos el triple de ahora en adelante para lograrlo, solo espero eso no afecte mis notas, que de por si son complicadas para mí, me esfuerzo por tener buenas notas y hasta el momento me ha dado resultado pero solo por el hecho de que estudiaba todas las tarde como dos horas para poder entender la materia que me pasaban en el día; si el entrenados nos da más horas de entrenamiento no sé cómo balancearé todo, porque los dos años anteriores sólo teníamos entrenamiento lunes de 4 a 6 y los jueves de 4:30 a 5:45, que para mi estaba bien pues podía estudiar después del entrenamiento y tenía suficiente tiempo libre ente semanas para hacer trabajos, salir con mis amigos y estar con mi familia.
Pero creo que lo más pesado de hoy fue recibir mi primer examen de matemáticas donde califique 5 aunque no sea un alumno de 10 todo el tiempo me mantengo con notras entre 7 y 9, pero este año parece ser más complicado.

Llegué a casa a las 6 con 10 saludé a mi mamá y subí rápido hasta mi habitación para darme una ducha, luego de eso ordene mi cuarto pero poco antes de empezar a estudiar me llamó mi madre a cenar.

- ¡Cariño la cena está lista, baja a comer, hice tu comida favorita!

- ¡Ya vooy! -Grite cantando mientras bajaba las escaleras y me sentaba en la cocina con mis padres.

- Hola hijo ¿Como estás? Hace tanto que no te veía -Dijo mi padre sirviendo jugo.

- Dios papá han pasado años, me encuentro bien y que tal tú, Te pasan los años -Respondi sirviéndome el primer trozo de pollo con espagueti- Mmm... Mamá esto esta delicioso.