Capítulo 1

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Una mañana de un jueves, supongo que lo fue, ya que ese mismo día firmaba contrato en mi nuevo trabajo por lo que por los nervios y demás cosas no sabría a ciencia cierta que fecha era o al menos no sabía donde estaba, odio estar nervioso por las noches, por más que lo intente, no puedo descansar, es tan frustrante a veces, pero ya ese día tan esperado llegó, no más espero dar la talla, me pasé una temporada buscando empleo. Una vez que llegué a la universidad para darle la noticia al que en ese entonces era mi novio, me había llamado para hablar conmigo por un momento, un momento que no creo que haya sido muy bueno, después de una charla con el ya seguramente se deberán imaginar en que terminó todo eso, y para los que no, pues el terminó conmigo, la verdad es algo frustrante que tener un trabajo me haya costado un novio.

No puedo mentirles, me dolió y bastante ya que el era supuestamente el hombre al que yo amaba... Y lo digo en pasado porque para serles sincero lo pongo en duda, si yo llegué amar a ese hombre, lo cual me recuerda a una canción del dúo Ha-Ash llamada 'Hoy te dejo en libertad quien la haya escuchado ya sabrá a que me refiero, quien no, le insto a que lo haga, aunque dudo que exista alguien que no la haya escuchado por lo menos una vez en su vida.

Tiempo después, no mas de una semana, me habia quedado con una de mis amigas, Itzel, yo estaba en el area de fumadores de una plaza en el centro de la ciudad, mientras la esperaba sacaba un cigarrillo que acababa de comprar para inhalarlo mientra ella llegaba, apenas habia acercado la encendedora al mismo cuando se escuchaban las puertas de la cafeteria abrirse y era completamente inevitable no ver, tanto yo como las demas personas que estaban quedaron embelezados al ver entrar una chica de piel canela, en unas plataformas que a pesar de medir 5'7 pies la hacian ver de casi 6 pies de alto, un afro corto no muy grande pero si le hacia contraste a su forma craneal, de corte big chop en el lado izquierdo de su pelo, unos ojos grandes pero a su vez con mirada de loba al acecho de su proxima presa, me percaté de observar algunas mujeres sentirse intimidadas al verla pasar y como se robaba la mirada de sus novio, no podría esperarse menos de una mujer bien proporcionada de cadera y pechos enormes, aunque su estilo grunge de pantalones grises rasgados, flanelilla blanca y una camisa azul a cuadros, daban ese toque de chica rebelde, cuando ella logra llegar a la mesa, me quita el cigarro de las manos y sin darme tiempo a quejarme o por lo menos procesar lo que acaba de hacer me dice - esto es lo que hay- inhala un poco del cigarro y saca el humo a su lado izquierdo para darle mas sensualidad y preparse para lo que dirá- en primer lugar vas a empezar a cambiar tu guarda ropa de ahora en adelante, te vas a olvidar de el por completo que aunque tambien sea mi amigo no quiere decir que estaré viendote sufrir, de solo verte ya me da grima, asi que solo espera a que me termine esto que no pretendo desperdiciarlo y vamos a la primera tienda y compramos algo de ropa, ¿Vale?-. Apenas pude abrir la boca para dar alguna objeción y ella solo me pone su mano en mi boca y me dice 'solo asiente si aceptas o no', asiento aun teniendo su mano en mi boca.

Una vez ella terminó de fumarse el cigarrillo entramos a la plaza comercial, fuimos a una tienda bastante reconocida pero a su vez bastante cara. - Espero hayas preparado tu tarjeta de crédito- dice Itzel con rostro de que terminaré con un sobregiro en mi tarjeta-  vamos primero a ver que estilo va más contigo, ya asi sabremos de donde partir-.

-Bueno, tengo gusto muy variado la verdad- digo un poco inseguro.

-Si y asi de variado tienes el autoestima- me dice ella con cara de disgusto- perdoname por ser tan seca pero me molesta ver tus estados en las redes, un día estas bién y al siguiente no, y eso lo debes de cambiar de inmediato ¿Me oyes?

Asiento- ¿Y que estilo crees que va más conmigo?- le pregunto.

-Eso ya lo sabrá tu no yo ¿No tienes alguna preferencia, a ver?- dice ella

-Pues... Me gusta mucho el estilo vanguardista europeo- le digo- ya sabes, pantalones skinny, chaquetas y esas cosas.

-mmm... Veamos pues lo tuyo es mas ropa de la tienda Zara, aunque a sinceridad, iremos a más tiendas para que tengas mas variedad, ya que como tu dices que tienes gustos variados- me dice.

Tengo la sensación de que este será un día bastante largo, pero quizás un cambio de armario podría ser de buena ayuda, bueno eso pienso yo. Ya para el final del día compramos tantas cosas que si empiezo a hacer la lista tendría que tomarme un capitulo para describir cada articulo.

Ya de regreso a la cafetería haciendo inventario decidimos comernos unos helados, mientras ella me explicaba como conoció a un chico que le llegó a gustar, ella solo se mordía los labios mientras agradecía el régimen de ejercicio militar que el chico había tenido durante un tiempo en la academia militar.

-¿Y bién, algún chico en partícular en el trabajo?- me pregunta tomando una cucharada de helado.

-Por ahora no, no sé estoy algo decepcionado de las personas ¿Sabes? No sé si me sienta prepara...

-Ahí vamos de nuevo...- me interrumpe- Lo que necesitas ahora mismo es sacarte toda esa frustración de la cabeza y empezar desde cero, entiendelo, el ya siguió con su vida, tu sigue la tuya, ya has perdido muchos años detrás de él ¿Valió de algo haberlo tenido?-

No, supongo- repondo.

No supongas, si admito que en un principio quise que volvieran pero eso lo que hacía era que te ponía cada vez peor cuando escuchaste que ya se estaba conociendo con alguien más y lo lamento por eso - me dice ella en un intento de no darme una bofetada por respeto a sí misma-

Sí, tienes razón - respondo- Pero en serio, todavía no he visto a alguién que me atraiga por menos un poco en mi trabajo.

Perfecto- dice ella- ya se nos hace tarde, tenemos que irnos.

Nos depedimos en la entrada de la estación de metro frente a la plaza, mientra veo que toma su tren hacia su casa yo tomo el bus que va dirección a la mia, de camino a mi casa divagueo la mente un poco mientras escucho algo de música, es increible como me ayuda escuchar algunas canciones, en especial estando en mi casa ya que no es muy grato estar en casa que digamos pero no tengo donde más ir, además mañana tengo que trabajar, por ahora trabajar me ayuda a distraerme un poco de las cosas, tales como, la universidad, mi casa, y mi ruptura, es algo bizarro pero es como una terapia para mi.

Ya estando en casa después de un largo día y un largo viaje a mi casa, al fin me da tiempo para ponerme cómodo y ver mi serie española a la cual me siento super identificado ahora mismo, tantas emociones y tantas cosas que me hace sentir que la autora del libro en el que se basa investigó mi vida, y las plasmó en su serie. Sí quizás quieres saber de que trata, pues trata de una chica que a sus treinta no se ha casado ni tiene novio, y que su crush de hace trece años al que apenas sabe que existe le hace favores desde el más pequeño como prepararle una taza de café hasta hacer sus plantillas para la radio en la que trabajan los dos, su hermana menor que programa casarse antes que ella, hace que su madre le diga que se va a quedar sola y gorda, por lo que hace una apuesta que en doscientos setenta y cuatro días debe estar en la boda de su hermana con kilos menos y un novio pero no cualquier novio sino el futuro padre de sus hijos, por lo que eso la conlleva a un sin número de citas, y redescubrirse ella misma como persona, espero haber saciado tu curiosidad.

Una vez termino unos cuantos capítulos, pongo toda la ropa que compré en mi armario, estoy un poco cansado como para probarmelos, y preparo mi ropa para trabajar el día de mañana, creo que por ahora no usaré la ropa que compré, necesito unas cuantas cosas más para hacer de mi outfit algo completo. 

Diario de un EscorpiónWhere stories live. Discover now